Lo imposible.

Capitulo 13

Llevaba más de una hora y media soportando los regaños del decano, mirando hacia el suelo y asintiendo levemente cada vez que era necesario. Por un lado me hacía sentir menos culpable que Hobi y Kook no hayan tenido problemas mayores, a Kook le pidieron no tan amablemente que se fuera y le dieron a entender que no podía volver a ingresar más allá del estacionamiento cuánto me dejara o recogiera de clases y con Hobi hablarían luego , pero de todos modos no tener al menos a uno de ellos aquí conmigo me hacía sentir insegura y pequeña. Por otro lado odiaba creer que Min pudiese salirse con la suya y no recibir ni siquiera una advertencia después de lo que hizo solo por ser mayor y estar en la universidad...

-Como entenderá, señorita, la aceptamos aquí a pesar de sus notas por la recomendación de la empresa en la que se emplea su padre, pero este establecimiento no puede por una alumna de intercambio perder la fama y categoría que le llevó años de sacrificio y dedicación de muchas personas conseguir. Comportamientos como el de hoy son inaceptables, tanto de alumnos de nivel medio como universitario, más aún si hay personas del exterior involucradas, le pido no vuelva a ocurrir o me veré en la obligación de tomar medidas drásticas...de volver a ocurrir algo así o recibir la más mínima queja sobre su comportamiento me veré obligado a cambiarla a clases virtuales y prohibirle el ingreso aquí para evitar la incomodidad de los demás estudiantes- sentenció.

Llegado este momento deje de oír, no podía creerlo, el problema no era yo, yo no había hecho nada!... Estaba claro que el maldito Min era el culpable, porqué todo parecía recaer solo en mí?, No escuché una sola palabra en contra de él.

Una vez el decano terminó de regañarme, salí de su oficina mareada por tanta palabrería, mí cabeza daba vueltas, escucharlo rebajarme de esa manera me trajo recuerdos de mí padre, agité mí cabeza queriendo alejar esos pensamientos, no quería recordarlo. Miré la hora eran pasadas las tres, pronto Kook volvería a recojerme y podría volver a mí lugar seguro.

Caminé por el colegio para hacer tiempo y veinte minutos antes empecé a caminar hacia el estacionamiento, dentro de ese lugar empezaba a sentirme ahogada, al llegar pude ver qué Kook ya estaba ahí, rápidamente fui hacia él y antes de poder acercarme a la puerta ya la había abierto para mí.

-Como estás, Angie?- su voz se oía dura pero tranquila.

-Kook, perdona por lo que pasó allí y por el regaño innecesario que te dieron, juro que no creí que pasara algo así...- me sentía avergonzada, no solo por lo qué había ocurrido sino porque caí en cuenta que Kook podría haber visto las fotografías y tal vez su idea de mí hubiera cambiado.

-Angie, no importa lo que pasó allí, ni lo que hayas hecho la otra noche, soy tu amigo y siempre estaré aquí para ti ok? , Solo quiero que lo sepas...- dijo al darse la vuelta hacia mí asiento.

-Es bueno saber que lo que has visto no te hace pensar mal de mí....pero es algo extraño también, si esto hubiera pasado de dónde vengo, todo sería muy diferente -solté sin pensar.

-Mira, no sé cómo serán las cosas allí ni como crees que son aquí, pero yo tengo mis propias reglas, y nadie toca a quién es importante para mí...- terminó la frase casi sonrojado, haciendo que bajara la vista.

-Gracias, Kook...nos vamos, por favor?-

Asintió mirando hacia delante y arrancó, minutos después estaba en mí sala de nuevo, cambiaba de canal sin encontrar algo ni entender lo que veía, mí mente no dejaba de repasar todo lo ocurrido desde ese día en el vestuario, si solo hubiera mostrado carácter desde ese momento, hubiera sido diferente?, De haberlo dejado doblado de una patada esa noche en casa de Nam, hubiera cambiado algo?...jamás lo sabría, e intentar solucionarlo era algo de lo que ahora mismo no quería hacerme cargo.