Mr. Wonderful ☆ Changlix

07

Felix abrió lentamente sus ojos y miró a su alrededor. Él no estaba en su dormitorio. Sus paredes eran de color verde salvia. Estas paredes eran blancas, blanco aburrido, si le preguntaban a Felix. ¿En dónde diablos estaba?.

Felix trató de levantar las manos para limpiarse los ojos, pero solo podía levantar una mano. Mirando hacia abajo, vio que la otra mano estaba atrapada por Changbin. ¿Qué estaba haciendo aquí?. Antes de abrir la boca y decir algo, se dio cuenta del esmalte de uñas verde en las uñas de sus manos. Era el peor trabajo de pintura de uñas que jamás había visto.

Entonces se dio cuenta de la botella de esmalte de uñas verde que tenía Changbin en la mano, y tenía una mano manchada con esmalte de uñas. Si él no lo supiera, podría pensar que Changbin había tratado de pintar sus uñas. Pero eso no tenía sentido. ¿Por qué Changbin pintaría sus uñas?.

Cuando trató de jalar su mano lejos del agarre de Changbin, Changbin rápidamente dejó caer la botella de esmalte de uñas en la cama y alzó su mano y la puso sobre su abdomen para acariciarlo suavemente.

—Shhh, bebé, está bien. Todo está bien. —Changbin le murmuró en voz baja sin ni siquiera abrir los ojos. Él solo puso la cabeza sobre la cadera de Felix al lado de su mano.

Felix se inclinó y con la mano libre recorrió los rizos suaves y oscuros de Changbin. Se veía tan cansado. Tenía bolsas debajo de sus ojos. Ni siquiera tenía puesto su chaqueta del traje o su corbata. Las mangas de su arrugada camisa blanca estaban enrolladas y tenía desabrochados los botones. Felix no recordaba haber visto alguna vez a Changbin nada más que mostrando lo mejor de sí. Casi parecía humano.

—Me alegra ver que estás despierto. —Dijo una tranquila voz en la puerta. Felix alzó la vista para ver a Jisung caminar hacia él. Él parecía tan cansado como Changbin se veía. Jisung caminó hasta el otro lado de la cama donde Changbin estaba y se inclinó para darle un beso a Felix en la frente.

Felix lo miró, perplejo. —¿Dónde estoy?, ¿qué está pasando?, ¿y por qué está Changbin aquí?.

Jisung acercó una silla y se sentó. —Estás en el hospital.

—¿En el hospital?, ¿por qué estoy en el hospital? —Felix casi gritó.

—Shhh, no queremos despertar al gran chico. Esta es la primera vez que duerme desde que te trajeron aquí anoche.

—¿Por qué estoy en el hospital?, ¿qué pasó? —Felix preguntó en voz baja esta vez.

—Felix, te tuvieron que hacer un lavado de estómago debido a una sobredosis de píldoras para dormir. —Jisung se pasó una mano por el pelo se veía frustrado. —Cariño, ¿por qué lo hiciste?. Podrías haber hablado conmigo, o Hyunjin o Jeongin. No tenías por qué tratar de suicidarte. Tú sabes que siempre estaré allí para ti. Y nada puede ser tan malo como piensas que es.

—¿Suicidarme?, ¿pastillas para dormir?, ¿estás loco?. No traté de suicidarme. ¿Sobre qué demonios estás hablando?. —Esta vez, Felix le gritó.

—Cariño te tomaste un montón de pastillas para dormir —Dijo Jisung solamente.

—Me tomé cuatro, cuatro pastillas para dormir. Eso es todo. Yo nunca trataría de suicidarme.

—Entonces, ¿qué era lo de la carta de suicidio que le dejaste a Changbin?.

—No era una carta de suicidio. Era una carta de despedida. Me iba. Yo tenía mis maletas listas. Están en la sala de estar al lado del sofá. Ve a ver si no me crees. Mi bolso está justo al lado del sofá.

—Si tu no tomaste un montón de pastillas para dormir, ¿por qué no podíamos despertarte?. Tuvieron que lavarte el estómago, Felix. Te conectaron hasta a una intravenosa. Ellos no hacen eso por dos pastillas para dormir. —Jisung dijo con severidad.