When I Hear you...[Hyunlix]

12. Hyunjin

Dos meses. Dos maravillosos meses...Dos maravillosos meses de noviazgo ¿Dos maravillosos meses de vida? No.

No tiene nada que ver con Lix, él es Perfecto, es lo mejor de mi. Pero está esta cosa en la depresión: no puedes controlarla. Ni cuando desaparece ni cuando vuelve.
Y no es fácil poner en palabras lo que siento. A veces hay altas, y suelen ser cuando estoy con él, y a veces hay bajas.

Mamá...Luce bien con lo nuestro. Me aclaro múltiples veces que lo mío con Felix le parecía bien, y que no debía de preocuparme, pero en cierto modo siento que la decepciono. Tal vez esperaba que en estos dos meses de noviazgo mi vida mejorara, que la felicidad que siento cuando estoy con él se extendiera a todos los aspectos de mi vida, creo que fue lo que ella espero desde que él pisó la casa, que él me cure. Pero la depresión no funciona así. No importa cuán perfecto sea Felix, no puede curar mi enfermedad.

Igualmente sigo luchando, por ella, por él, por nosotros.
El apoyo de Felix ha sido un bálsamo para mis momentos oscuros. Él comprende mi situación y me acompaña en cada paso de esta batalla contra la depresión. A pesar de no poder curarme, su amor y apoyo incondicional me brindan fuerzas para seguir adelante.

Sin embargo, la presión de mantenerme bien en todos los aspectos de mi vida se vuelve abrumadora a veces. A veces creo que el constante silencio con el que lidio me consume. Es como un vacío oscuro que no me deja escapar de los pensamientos intrusivos.

Me deje caer en la cama de la habitación, mirando la pintura en el atril, sabiendo que estaba manchando las sábanas con la pintura de mis dedos.
Mis pensamientos vagaban mientras observaba las manchas de pintura en las sábanas, un reflejo de mi propia confusión y lucha interna.

Vi como Felix entró en la habitación. En un principio lucía emocionado por algo que miraba en su celular, pero al verme toda emoción feliz que pintaba su rostro se esfumó. Se acercó rápidamente a mí y se sentó a mi lado.

"Hola" señaló.

Lo salude con la mano y el vio la pintura fresca sobre ella. Guardo su celular en su bolsillo y tomó delicadamente mis muñecas.

"¿Nos lavamos las manos?" Sonrió de costado. Ya sabía cómo lidiar con esto.

Asentí con la cabeza y nos dirigimos al baño juntos. Abrió el grifo y dejó que el agua corriera mientras se posiciona detrás de mí, de puntillas de pie, apoyaba su mentón sobre mi hombro y pasaba sus brazos por debajo de los míos, sus manos se mezclaron con las mías, ayudándome a limpiarlas.

Mientras el agua caía y nuestras manos se encontraban bajo el chorro, sentí la calidez reconfortante de su tacto y su presencia reconfortante detrás de mí. No necesitábamos palabras para entendernos, nuestro amor se expresaba en esos pequeños gestos de cuidado y apoyo.

Felix tomó una toalla suave y secó delicadamente mis manos. Su ternura y paciencia eran un recordatorio constante de que no estaba solo en esta batalla.
Volvimos a la habitación, miró el lienzo y luego a mi.

"Bonita pintura"

Sonreí débilmente ante su comentario mientras observaba mi pintura en el lienzo. Aunque mi mente seguía luchando contra los pensamientos oscuros, ese pequeño momento de conexión y cuidado me recordaba que había luz en medio de la oscuridad.

Felix se sentó a mi lado en la cama y tomó mi mano, entrelazando nuestros dedos. Su contacto era reconfortante y me llenaba de una sensación de seguridad y tranquilidad.
Después de un momento, tomó mi mano y comenzó a dibujar suavemente círculos en mi palma con su pulgar. Era un gesto íntimo y tranquilizador, una forma de conexión que trascendía las barreras del lenguaje.

"¿Sabes qué hay una operación que puede
Devolverme  la audición?" Solté su mano para lograr explicarle.

"Ni se te ocurra Hyunjin" me miró frunciendo el ceño.

"Por favor Lix...moriría por escucharte"

"No digas idioteces" el movimiento de sus manos fue más brusco, estaba enojado. "No quiero que pongas en peligro tu vida por algo así, Hyunjin", expresó con seriedad, sus manos moviéndose con urgencia. "Eres valioso tal como eres, y no necesitas la audición para ser amado o para vivir una vida plena".

Tomé una respiración profunda y respondí, mis manos moviéndose con determinación. "Lo sé, Lix, pero a veces me siento tan limitado por mi sordera. Quiero experimentar el sonido, quiero poder escuchar tu voz, las risas, la música...".

"No voy a perderte por una operación incierta Hyunjin. No, me niego."

Suspire y rendido asentí con la cabeza.

"Perdón por preocuparte"

Él negó con la cabeza y me abrazó con fuerza, aferrándonos el uno al otro como si nuestros cuerpos pudieran decir todo lo que las palabras no podían expresar.

Un día soleado iluminaba la habitación mientras me sentaba frente a mi escritorio, intentando plasmar mis pensamientos en palabras. A pesar de la luminosidad que se filtraba por la ventana, sentía una sombra persistente dentro de mí, una sombra que no siempre entendía ni podía controlar. La depresión, como un visitante inoportuno, había estado acechando mi vida desde hacía mucho tiempo, y aunque había encontrado en Felix un apoyo incondicional, sabía que él no podía ser mi cura definitiva.

Los ama MissHyunsta 🩷
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