HANAHAKI [SPREEN]

Capítulo Dos.

La risa de Spreen suena desde la bocina de su celular, y ella suelta pequeñas risitas acompañándolo.

Ver a Spreen hacer directos le ha llenado ese espacio que poco a poco se fue abriendo en su ser al alejarse de él. Las salidas se han acabado, las llamadas ya no están, solo le quedan escasos mensajes que responder. Ella no podía morir, ella no quería morir.

Entonces se fue por lo más efectivo; olvidar al alto morocho. Dejó de contestar sus llamadas con la excusa de que el último semestre la estaba matando, así mismo cortó las salidas. Y aunque todo eso había sido difícil, se las apañaba con los mensajes que Iván le mandaba, a pesar de ella responder cada tanto.
Lo extrañaba, extrañaba su olor, sus abrazos fuertes, su voz bullosa cuando se emocionaba y tranquila cuando está relajado.

Su celular sonó con el característico timbre personalizado que le tenía a Iván y ella miró la pantalla donde la imagen del chico se mostraba. El morocho insultaba a Juan Guarnizo luego de que este le hablara como un bebé a su yo cubito.

Iván (No responder)

¿Qué tal ese proyecto?

Siento que voy a morir, no he llegado ni a la mitad.

Su mirada se dirigió hacia la maqueta ya terminada que se encontraba en su mesa de trabajo, una sonrisa burlona salió de sus labios, esa maqueta había sido pan comido, sabía que su nota sería estupenda.

Un ardor se sintió por su garganta y Anabelle carraspeo intentando librarse del fastidioso síntoma, que luego se convirtió en una fuerte tos que la hacía sentirse asfixiada.

Se tapó la boca con su mano derecha mientras la izquierda abrazaba su garganta buscando menguar el dolor, y entonces expulsó un poco de sangre junto a un pétalo.

El pequeño pedazo amarillo lleno de líquido rojo la saludó y ella sintió como sus ojos lagrimeaban. Se levantó e hizo la rutina que ya había hecho varias veces de lavarse, limpiar todo y en este caso cambiarse de camisa y lavarla luego de ver pequeños salpiques de rojo en ella.

Agarró la libreta que se encontraba junto a la maqueta y el pequeño esfuerzo azul con un oso polar en la punta, abrió el cuaderno hasta encontrar la primera hoja libre y anotó la nueva actualización de su travesía.

“Pétalo #27.
Hoy ha sido amarillo, un pétalo de un lindo girasol.”

Iván no volvió a ver su celular durante las siguientes cuatro horas de stream, y Anabelle lo agradecía, para cuando el streamer finalizó el directo ya ella se encontraba dormida, con su celular en vibrador  y con un mensaje de Iván.

Iván (no responder)

Ya de seguro estás dormida, así que descansa, boluda.

Segundo capítulo 🤗
Aún no hay ninguna leída, pero me mantengo positiva esperando que alguien empiece a leerla y le guste lo que escribo.
Si estas aquí, ¿podrías dejar tu votito?