Calma antes de la tormenta

426 59 27
                                    

Xiao Jiu se escabulló tratando de encontrar a Yue Qi, las casas de barro y paja dónde viven todos los esclavos eran húmedas y parcialmente destruidas. No sé arriesgaría a traer su botín a este lugar.

Cualquiera podría arrebatarlo.

Yue Qi se encontraba con algunos niños pequeños, hablando de alguna cosa que Xiao Jiu no se molestó en identificar. Tomó el cuello de la túnica raida de Yue Qi y la jaló.

Yue Qi volteó y su mirada indulgente y amable se volvió a Xiao Jiu.

- ¿Sucede algo, Xiao Jiu? -

Xiao Jiu asintió sin decir nada y lo instó a seguirlo.

Yue Qi se despidió de los niños pequeños con un gesto y siguió a Xiao Jiu.

Xiao Jiu guío a Yue Qi durante bastante tiempo, dando vueltas y tomando desvíos.
Cuando se sintió lo suficientemente seguro, fue directamente a su escondite.

En una tierra baldía y seca había un agujero que fue usado por bandidos para almacenas los bienes robados hace décadas. Xiao Jiu lo encontró por accidente, no era apto para vivir pero si para almacenar cosas.

Estaba muy escondido, incluso si le daban unas cuantas miradas no podrán encontrarlo sin varias búsquedas exhaustivas.

- ¿Xiao Jiu? ¿Para que estamos aquí? -

Xiao Jiu observó su entorno con mucha precaución, al ver que no había nadie, habló.

- Conseguí cosas y hay que contar algunas otras cosas, todo el rato que estuve fuera fue una aventura que tú no tendrás -

Yue Qi estaba ligeramente confundido, no entiende que clase de aventura podría tener en poco más de un día y una noche. Pero no dirá lo contrario, ya estaba lo suficientemente asustado cuando Xiao Jiu no volvió por la noche.

- Mira, mira, esto es lo que conseguí -

Una canasta grande estaba escondida al costado de la cueva, Yue Qi no podía creer que su amigo consiguió todo eso de forma justa.
Xiao Jiu comenzó a sacar cosas de la canasta.

Un montón de frascos de vidrio con cosas dentro fue lo primero, había muchos de ellos. Se podía ver perfectamente lo que había dentro, era mucha comida.

Todo el "botín" era totalidad de frascos con cosas en conserva y algunas pocas cosas envueltas en pañuelos bordados, no podía ver de qué se trataba.

- Xiao Jiu ¿Estás seguro de que no robaste nada? -

La voz de Yue Qi era muy dudosa, y tenía fundamentos. Tantos frascos de vidrio, no eran raros de ver pero si de comprar, las familias campesinas cómo la de Yue Qi solo tenían frascos de barro para sus conservas. Seguramente nadie gastarían tanto dinero en frascos de vidrio para darles a vagabundos.

Xiao Jiu estaba muy ofendido por su pregunta y se apresuró a explicar.

- ¡Hmm! Yo no robe nada, alguien más me lo dió a cambio de que guardara un secreto -

Eso alarmaba aún más a Yue Qi.

- ¡¿Que case de secreto?! ¿Asesinaron a alguien? -

Yue Qi ya podía ver su vida terminarse por ser cómplice de un asesinato.

- ¿Qué? ¡No! Te lo contaré desde el principio para que dejes de pensar estupideces -

El esclavo mayor estaba un poco más tranquilo al escuchar que había una explicación. Solo esperaba que no sea nada irrazonable.
Asintió sin contestar a las palabras de Xiao Jiu.

- Todo comenzó cuando ví a Shi'er recibiendo bollos en la puerta de uno de los edificios rojos, ¿ Los conoces? ¡El más grande y bonito de todos! Y yo también tenía un pañuelo como el de Shi'er, en el que me dieron bollos ¡Y tú dijiste que estaban envenenados! -

Cortesana Yuan Revoluciona En El Arte Teatral De Ser Un Té VerdeМесто, где живут истории. Откройте их для себя