"¡Usted es mi mujer!"

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Mario miraba completamente angustiado a Betty, sin saber que afuera estaban muy pendientes de su conversación. Así que solo se acerco a ella y le tomó las manos, necesitaba su ayuda... Ella era la única amiga que ha tenido en la vida...

MC: Betty por favor, no me deje… yo le prometo que no meteré más la pata...

B: Pero... ¿Cómo le puedo creer? ¡Lo que hizo fue horrible!

MC: Yo sé, yo sé, pero es un tema complicado para mí, pero le prometo, le juro que no lo volveré a hacer...

B: ¿Seguro? Mire que si yo me entero de que…

MC: No Betty jamás lo hare de nuevo, pero usted me jura que se quedará conmigo...

B: ¡Ufff! Que lo voy a hacer, está bien, pero esta es tu última oportunidad...

MC: Gracias Betty, muchas gracias...

Y la abrazo siendo correspondido por ella... Ninguno de los dos llegó a imaginar nunca que formarían esta gran amistad... Estaban aun abrazados cuando la puerta se abrió de golpe y vieron el rostro rojo de Armando y la mirada triste de Camila... “¿Qué hacían allí? ¿Estarían escuchando?”

Mario la soltó sutilmente, pero no se alejó de ella, más que nada porque estaba muy pendiente de la mirada de Camila, parecía que quería... ¿Llorar? ¿Por qué?... Si ella misma le dio a entender que no sentía nada por él... En cambio Betty estaba un poco nerviosa, no quería imaginar que Don Armando le hiciera una escena de celos...

A: (furioso) ¿Qué esta pasando aquí?

B: Doc…

A: Pregunte... (suspirando para controlarse) ¿Qué está pasando aquí? ¿Por qué estaban abrazados? ¿Me estoy perdiendo de algo?

MC: Mmmm... nada, nada solo estábamos solucionando unos problemitas... (sin dejar de mirar a Camila) Y usted anda escuchando tras las puertas por lo que veo ¿No?

A: (sin saber que responder) No, solo…

MC: Bueno es lo de menos... (girándose) Betty hablamos luego ¿Sí preciosa?

B: (roja) Por supuesto...

MC: Perfecto, estese lista que esta noche la llevo a cenar.

B: (no muy segura) Cla... claro...

Armando cuando escuchó aquellas palabras casi le dio un ataque... “¿Saldrían juntos?”... No, eso no podía suceder, sabía perfectamente en que terminaban esas “saliditas”... Camila era la otra persona que se había quedado bloqueada antes sus palabras... “¿Comerían juntos? ¿Tendrían alguna relación?”... Y de solo pensarlo le daba unos celos terribles, tenia que buscar la solución a su problema...

Betty solo los miro a ambos y en sus ojos vio el enojo y los celos, en ese momento pensó que Mario tenía una oportunidad segura con Camila, solo que no debería ser tan cobarde y arriesgarse por ella, en cambio a Don Armando no sabía muy bien que pensar, así que prefirió irse por la tangente...

B: Doctor podemos hablar ahora, mire que…

A: No si ya escuche, tiene un compromiso, me imagino que no puede retrasarse ¿Verdad?

B: (suspirando) Así es, me gustaria que fuera en la sala de juntas, ya que también debe estar Mario, Doña Camila y por supuesto Doña Marcela...

A: Pero bueno... ahora es “Mario”, veo que nos saltamos las formalidades...

CM: Voy a dejar mi cartera... (quería salir de allí)

Camila salió rápidamente de la oficina y se encerró en la de ella, la verdad es que tenia ganas de llorar y no sabía bien el porqué. En cambio Armando miraba fijamente a Betty esperando una respuesta que veía no le pensaba dar, así que decidió insistir...

TU LLANTO FUE MI SALVACIÓNWhere stories live. Discover now