Capitulo 47

479 74 130
                                    

Los días corrían con normalidad, está vez si estaba recibiendo visitas que no sean solo de Coco.
Cada vez estaba más cerca para que le cerrarán esa herida cerca del labio, aún que tendría aquella cicatriz y las otras dos heridas en la otra parte de la cara significaba que es un avance para su rostro el cual el pensaba que ya no tenía solución.

Todos los días recibía visitas, cuando Coco quería estar a solas con Azulin allí se encontraba el padre leyendo o tejiendo algo, había encontrado nuevo pasatiempo aparte de su pasatiempo favorito que era arruinar momentos entre estos dos ositos.

Pompóm nunca apareció entre esas visitas, Coco le parecía sumamente sospechoso ¿Por qué no aparecía cuando al principio quería verlo? Coco ya sospechaba que aquel osito de pecas podría estar tramando algo.
Sin embargo no diría nada a nadie, si quería saber sería solo.

Y aquí vamos de nuevo con nuestros ositos, Coco llegó a la habitación de Azulin cómo todos los días y vio que ya se encontraba el padre.

C: Buenos días padre

Este no recibió ningún saludo de parte del padre, cada palabra que el dijera sería ignorado.

A: Por que sigues intentando si sabes que no te va a responder?

C: Por que tengo educación, seré un simple hombre pero los modales nunca deben irse

Coco miro al padre quien estaba agarrando el libro que estaba leyendo con fuerza.

A: Lo hiciste enojar, de nuevo

C: No era una indirecta para el, si se identificó por qué no tiene modales no es mi problema.

A: Así menos te va a aceptar o incluso querer, va a ser igual que la abuela de Emma, mínimo haz el intento de que te quiera

C: Lo hago pero ni siquiera me quiere ver en pintura, ni en peluche

A: Peluche?

C: El padre me mostró aquel peluche que simulaba ser yo, ¿Tanto me extrañabas como para hacer un peluche?

Azulin cayó en cuenta y su cara parecía multi color de tantos tonos rojos que se había puesto.

Coco río y se fue acercando a Azulin, pero justo en el momento del beso un libro los dividió.

P: Los ositos buenos con los malos no pueden estar juntos.

C: Por eso mismo debe irse y darnos un momento.

P: Tu eres el osito malo.

C: No soy el único padre.

A: Padre si nos diera un momento aún que sea 1 minuto de privacidad?

P: Cuando no estés conmigo tendrás privacidad, pero solo en la mañana por qué el resto del día estaré

C: Y la noche? No me diga que también vendrá en las noches

P: Las noches son las más peligrosas para tipos como tú

C: Ni que fuera narco.

P: No me refiero a eso.

Coco pensó un poco y cayó en cuenta.

C: Padre esos pensamientos no son de Dios! Quien diría que usted piensa eso de mi!

Dijo Coco haciéndose la víctima, no iba a confesar nada.

Azulin estaba a un lado procesando todo, Coco era narco? ¿O era traficante de órganos?.
Mientras este pensaba el Padre seguía con su sermón sobre Coco y este le respondía todas, no iba a dejar que hablara mal de el.

C: Por que me odia tanto si el que obligó a Azulin en el servicio militar a conocerme fue usted!

P: Quería que lo ayudarás con su entrenamiento, no que se enamorarán!.

C: Los sentimientos se dieron y debe respetarlos.

P: No olvides que el que se conocieran no fue más que un error mío.

Azulin estaba escuchando todo, no recordaba con claridad muchas cosas del servicio militar, o no las que decía Coco y el padre.

C: Y bien que agradezco de aquel error, nunca me arrepentiré de habernos conocido.

P: Si los detuve más de una vez allí aquí no será la excepción.

C: De cuántas cosas no está enterado, no crea que en este tiempo solo fuimos amigos.
La luna fue cómplice de nuestro primer beso, la prueba de nuestro amor prohibido y ahora el Sol será la prueba de nuestro amor que ya no es prohibido y sorpresa no es.

El padre se encontraba viendo a Coco desafiante, demasiado diría.
Las venas de sus manos se notaban de tanta fuerza que contenía en sus manos.
No podía creer lo que decía Coco, quería que solo fuera algo para fastidiarlo.

C: Que pasa no me cree? Quiere enterarse primero que el sol sobre nuestro amor libre?
Dijo para acercarse a la cara de Azulin.

El padre vio a Azulin, no dejaría que haga eso alfrente de el ¿No?...

Azulin no sabía que hacer, correspondia a Coco en demostrar que el padre no los iba a separar así de fácil, o pensaba en el padre.
Pero el quería poder demostrar lo mucho que ama a Coco, quizás este ya era momento de pensar en él y no en los demás.

Azulin agarró la cara de Coco y le dió un beso.
Aquel beso sabía a gloria, gloria de que por fin pudieron dejárselo en claro al padre de que no pensaban estar separados.

El padre dejo caer aquel libro, estaba viendo como su niño de casa se besaba con aquel malandro que ante sus ojos pateaba hasta abuelas.

Coco y Azulin se separaron de aquel besó, Azulin estaba perdido en los ojos morados de aquel oso mayor que había robado su corazón.
Aquellos ojos morados lo miraban con ilusión y amor, con solo una mirada este sentía que volaba, amaba esos ojos.

Coco giró a ver al padre, este estaba confiado, no le importaba recibir otro golpe, estaba dispuesto a muchos más por Azulin.

Padre tenía una mirada de decepción pero seguía con su comportamiento dominante, no se iba a dejar ganar tan fácil.

P: Eres solo una escoria que atrajó a Azulin con sus sucios coqueteos.

A: Pero el no me coqueteaba! Yo le coqueteaba a el.

El padre miró sorprendido a Azulin, aquellas palabras este mismo lo había dicho hace tiempo atrás, cuando estos dos se veían a escondidas en aquel servicio militar e bosque.
Mismas palabras fueron dichas cuando los trato de separar en ese tiempo, ¿Aún quedaba algo del antiguo Azulin? Si era así como debía sentirse después de que lo corrompió.


Ya estoy planificando el pasado de ellos y nisiquiera he escrito el final JAJAJAJ
Fin de semana día de más de una actualización 😻
Corazón mimoso para ustedes!!!!!!<333333✨✨✨✨✨


❥ ℂ𝕣𝕚𝕒𝕟𝕫𝕒 ˖۪⸙͎Where stories live. Discover now