Extra 2

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Operación Haechan x Shotaro en acción Parte 2

Shotaro regresó con sus amigos junto a Chenle y Mark. Se sentó junto a Haechan y suspiró, pensando lo que debería decir a continuación. Sujetó las manos de su amigo y asintió.

—Me gustas.

Haechan asintió. —Lo sé, me lo has dicho, varias veces. Y yo también te he dicho que me gustas.

—¡A esto me refiero! —soltó las manos de Haechan—, no me refiero a que me gustas como amigo.

—También lo sé, Taro.

—¿Lo sabes?

Los demás decidieron darles espacio para aclarar las cosas de mejor manera. Yangyang tuvo el impulso de hacer lo mismo, pero Jaemin era más difícil que los demás y no sabía qué decir o hacer.

—¿Deberíamos dejarlos solos? —preguntó Mark, entrelazando su mano con la de su novio.

—Vayan a divertirse, nos quedaremos hablando —les pidió Yangyang.

Jaemin levantó una de sus cejas y puso sus manos en sus bolsillos, tratando de esconder los nervios.

Jeno sujetó la mano de Renjun y lo arrastró lejos, lo único que pudo oír fue un "me gustas", pero no supo de quién.

—Nuestros amigos son un caso, ¿no crees? —preguntó Renjun, por fin recostándose encima de Jeno, alejados de las personas curiosas.

—Ya lo creo. Menos mal que no eres como ellos o todavía estaríamos tratando de decir las cosas.

Renjun levantó una de sus cejas y miró hacia arriba, tirándole un mechón de cabello. —Tú deberías sacar la voz, señor secretario. No es justo que solo yo sea el que habla.

—Tú puedes hablar por los dos —Jeno lo apretó en un abrazo y Renjun sonrió encantado. Le gustaba mucho cuando su novio se volvía pegajoso con él.

A Renjun siempre le han encantado las historias de amor donde si se demuestran cariño y no actúan frío. Tal vez no algo extravagante como tatuarse el nombre de su pareja o proponerle matrimonio, pero abrazarlo y besarlo era algo que le encantaba mucho.

—¿En qué tanto piensas? —dijo el rubio mientras le daba pequeños besitos en el rostro.

—En ti.

Jeno dejó de besarlo y chocó su nariz con la de su novio. —¿Qué te tiene pensando en mí?

—En lo lindo que eres, no me refiero a físicamente, eso es pura suerte. Me refiero a lo tierno y dulce. Jamás pensé que mi primer amor que se veía frío como el hielo fuera una paleta de caramelo —Renjun sujetó la mano de Jeno y le besó los nudillos—. Gracias por ser mi novio, samoyedo.

—Me harás llorar —posó su cabeza sobre la de Renjun y suspirar—, yo debería agradecerte por aceptarme. ¿Te dije cómo me enamoré de ti?

Renjun negó debajo de su cabeza. —Amaría escuchar esa historia.

El rubio suspiró con una linda sonrisa, apretó a Renjun en sus brazos y se quedó en silencio por un rato. —Creo que cuando te sentaste junto a mí el primer día.

—¿Qué? ¿Hablas en serio? —Jeno asintió—. ¿Cómo es eso posible? A la mayoría le caigo mal y después me aceptan.

—Bueno, a mí no. Lucías tan lindo y eras amigo de todo el mundo, a mí me trataste como uno más de tu grupo. Jamás había hablado tanto y el primer día yo ya parecía un loro de tantas palabras que usé. Mis padres están felices porque siempre he sido una persona tímida, detesto ir a las fiestas que hacen con sus amigos porque no me siento cómodo, pero solo tu presencia me calma.

—¿Quieres decir que ambos nos damos calma? —el rubio asintió sin aflojar el abrazo—. Tus brazos han permitido que mis ataques de pánico desaparezcan, no he visitado la enfermería desde que empezamos a salir. Mi mamá también está feliz de que salga con el lindo Lee Jeno.

Se quedaron recostados mientras que sus demás amigos charlaban de lo lindo sobre cualquier cosa. Todos habían arreglado sus problemas, así que solo debían disfrutar del buen día que hacía.

Al volver a casa, Jeno recibió un mensaje por parte de Haechan.

Haechan

Gracias por ayudarme

No fui el único

Pero me alegro de que arreglaran las cosas

De hecho, estamos saliendo

Eso fue más rápido de lo que pensé

¿Rápido?

Estás loco

Fue lento y doloroso

Después de mil años intentándolo

Lo logré

Por eso, muchas gracias

No hay de qué, Haechannie

Si necesitas ayuda con Junnie

Solo debes decirme, aquí estoy para servir

Jeno lo pensó por un rato antes de quedarse completamente dormido. ¿Había algo que necesitaba hacer con Renjun?

Compañeros de asientoWhere stories live. Discover now