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Ellie caminaba codo a codo con Amelia, quien observaba a su alrededor con cuidado, como si en cualquier momento algún infectado saldría de entre la vegetación para saltar sobre ella, pero conforme la caminata se alargaba, la tensión en el cuerpo de la mayor se disipaba con el viento, incluso la niña sonrió en grande cuando se percató que Lia disfrutaba del sonido del cántico que las aves cercanas producían.
—El Capitolio está en esa dirección—Tess exclamó, señalando frente a ella, una inmensa cantidad de autos y trozos de edificio obstruían el paso—Diez minutos si pudiéramos pasar por ahí.
—¿La ruta larga o la ruta corta?—Joel exclamó, observando a la castaña
—Es la ruta larga o el camino donde nos joden a todos—replicó la compañera del hombre
—Yo voto por la ruta larga—Ellie exclamó con velocidad y nerviosismo
—En especial si te guías por tan poca información. Si realmente ustedes han salido deberían conocer el hotel, ¿cierto?—Amelia observó a los dos mayores con simpleza—Nada mejor que una bella vista—comentó sarcástica, iniciando su caminata nuevamente, escuchando los pasos apresurados de Ellie para llegar a su lado
