22° PARTE

178 30 0
                                    


***

Apo fue entregado, y Mile recibió la recompensa por su cabeza.

- Tenemos mucho dinero.

Drake quería contar el dinero, pero era tedioso contarlo.

- Dinero que se va a ir a asociaciones para personas necesitadas.

- Dicen que el dinero solo es para mirar.

Ambos suspiraron.

- Drake, ahora solo falta entregar a los otros hermanos.

- Lo sé, pero Ohm no ha aceptado.

- Por cierto, ¿Se creyó la historia de la violación de tu madre y de que eras su hermano?

- Quiero creer que sí.

- Al principio sí, pero eres demasiado mal actor.

Drake y Mile voltearon cuando escucharon la voz de Ohm. Los tres hombres se miraron.

- Bien, ya que estás al tanto de todo según veo... ¿Por qué no te vengas?

- No, eso es cosa del pasado. Lo que me interesa saber es cómo vas a hacer para entregarme y cobrar el dinero. Todos saben que soy difícil de cazar.

Mile miró a Drake.

- Creí que no habías aceptado.

- ...aún. No había aceptado aún. Pero... analizando todo y habiéndome enterado de todo, quiero... 'entregarme'. Además, no creo que vayan a dar todo el dinero a la beneficencia ¿Cierto?

- Cierto. Nos quedaremos con una parte. Contigo ya somos 6 los involucrados en el asunto. Habíamos acordado quedarnos con una cantidad bastante... equitativa.

- ¿Cuánto?

- Bueno, contigo dentro las cosas y los montos cambian. Primero, el costo por sus cabezas acaban de subir a 30 cada una. La cabeza de los Pawat vale un total de 120 millones de dólares. Cada uno recibiría 10 millones e irían en distintas direcciones por precaución. Lo que resta del dinero lo daríamos a instituciones de caridad y orfanatos.

- Woaoo así que todos tienen 'bonitos sentimientos'.

Drake y Mile hicieron una V con sus manos y la colocaron debajo de su mentón. Ohm hizo una mueca de asco al verlos.

- Bien. Entonces entrégame.

- A mí también, así cobraremos un poco más por cabeza.

Nanon caminaba hacia ellos mientras fumaba un cigarro barato

- Así le daremos más a la caridad.

Ohm se sorprendió al verlo allí, pero a los segundos siguió mirando a Drake y Mile, mostrando poca o nula importancia por el recién llegado.

Nanon miró a Ohm y luego a los chicos.

- ¿Cuando será el intercambio? -Preguntó Ohm.

- En tres días, por la tarde.

- Bien, sabes dónde encontrarme.

Dicho esto, Ohm salió del lugar dejando a los tres atrás. Segundos más tarde, Drake habló.

- ¿Y a ti? ¿Dónde te encontraremos?

Mile sonrió.

- Hasta la pregunta es tonta. Estará dónde Ohm.

Nanon sonrió al ver la cara de Drake.

- Bien.

Nanon fue tras Ohm, mientras Mile y Drake se miraron el uno al otro.

- Los Pawat siempre encuentran la horma de su zapato.

- Lo hacen.

...

Apenas abrió la puerta, Nanon no solo trabó la puerta con su propio cuerpo, para que Ohm no la cerrará, sino que lo empujó hacia adentro de la pequeña habitación, antes de que el dueño de esta tan siquiera dijera algo.

- ¿Qué quieres? ¿El imbécil de tu novio no te la sabe meter bien? ¿O no dame mamártela?

Un puñete fue a parar en la mejilla de Ohm.

- Esta es por tener la boca de desagüe. Y esta...

Un segundo puñete fue lanzado.

- Esta es porque ni siquiera eres capaz de retenerme.

A ver, el primero se lo tenía merecido ¿Pero el segundo?

- No eres una cosa como para retenerte. Y tú mismo lo dijiste, a la fuerza nada se obtiene.

- ¿Y quién mierda te dijo que estoy contigo a la fuerza?

- Tú mismo te largaste!!

- Tenías que detenerme!!

- Bipolar de mierda!

- Hijo de puta!

El deseo siempre es más fuerte que la razón en algunos casos, como este. Entre Ohm y Nanon existe una pasión bastante extraña.

El escenario era tan loco, ropa volando y el sonido pecaminoso de dos cuerpos fuertes entregándose al deseo de la carne.

- ¿Por qué la mayoría de las veces soy pasivo?

- Porque te gusta aunque reniegues de ello.

Una palma abierta voló hasta los labios de Ohm.

- ¿Por qué siempre me pegas? ¿Acaso estoy mintiendo?

Ohm empezó a reír por la molestia de Nanon.

- Parecemos perros y gatos.

...

Los días han pasado como un rayo muy a su pesar.

- En unos días tenemos que estar bajo la supervisión de los chinos, no nos espera nada bonito. Nos van a interrogar de formas... raras.

- Iré primero.

- No! -Se apuró a decir Ohm- Yo iré primero. Ya sabes, tengo amigos allí.

- Sé lo que intentas hacer, tú no tienes la información que yo tengo aquí. Tú eres más de puños, Ohm. Si ellos me llevan primero, no me harán mucho, porque no les conviene.

- Dije que no! Además... ¿Me acabas de llamar troglodita cuando mencionaste los puños?

Nanon aguantó la risa.

- N-no...

Ohm se acercó y besó sus labios.

- Ya me alejaron de ti una vez y no hice nada para protegerte. No va a haber una segunda.

Ambos suspiraron hondo, mientras miraban al vacío.

Sabía que lo que se les venía iba a ser un infierno.

***

(TERMINADA) MILICIA CELESTIAL Donde viven las historias. Descúbrelo ahora