Gracias

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Nines había enviado un mensaje a Connor para informarle que estaría ocupado y que se juntaran otro día. No pretendía dejar a su hermano cerca de Gavin, mucho menos en el estado en el que estaba.

Momento antes el detective había molido el RedIce con una tarjeta, lo aplasto un poco y pacientemente fue moliéndolo hasta crear un polvo fino y cristalino, hizo una linea sobre la mesa de centro y consumió aquello al aspirarlo por la nariz para luego recostarse en el sofá para poder dormir.

No es que le asustara aquello, Nines ya había visto al detective en diferentes facetas y quería pensar que aquello lo sacaba de aquel estado mental en el que estaba, aun así debía ser cuidadoso con él, sabía que era bueno engañando y cuando las cosas no salían como creía, los golpes eran la opción dos, tres y cuatro.

El androide vio al detective dormir, revisó la hora en su pantalla interna y terminó por reposar su mejilla en su mano, ya que estaba sentado a un lado de la mesa de comedor mientras volvía a analizar al detective, las manchas de sangre seca en su rostro y ropa, su piel pálida y ojeras marcadas, sus manos descansando en su abdomen, con la piel destrozada por los golpes, Gavin era un hombre raro, después de haber comido sólo una hamburguesa en un local de mala muerte, lo siguió a casa como un cachorro para después drogarse y acostarse como si el lugar le perteneciera.

-Ya son las diez de la noche -Dijo el androide al levantarse de su puesto para ir hacia el detective quien abrió los ojos antes que lo tocaran- ¿Quiere algo para comer?

-¿Me invitarás? -Preguntó con voz ronca, adormilada.

Nines volteó hacia la puerta de entrada, volvió a ver al detective y se encogió de hombros.

-Claro -Respondió e irguió su cuerpo- ¿Algo para cenar?

Gavin sonrió y cerró sus ojos un momento, entrelazó sus dedos sobre su vientre y respiró profundo.

-Comida china -Dijo y se encogió empujando uno de sus zapatos con su pie contrario para quitárselo, haciendo lo mismo con el otro. Ambos zapatos cayeron descuidadamente mientras este abrís sus ojos para ver al androide- ¿Puedo pedir café y donas de nuevo?

-¿Las mismas?

-Una caja de seis, las que deje en la mañana me las iba a comer ahora, pero las botaste antes que tomara la caja.

-¿Qué clase de comida China prefiere?

Gavin volvió a sonreír, respiró profundo una vez más y meneó la cabeza.

-Fideos... No, arroz, arroz con carne de vacuno, de esa que tiene cebollín y algas, no sé como se llama.

-Yo tampoco sé, Gavin, no conozco la comida humana.

-Entonces algo que se escuche rico -Dijo antes de cerrar sus ojos mientras acomodaba su cuerpo.

-Bien, pero antes de comer quiero que tome un baño -Pidió y se cruzó de brazos al ver cómo el detective abría los ojos y levantaba la mirada hacia él- Está manchado de sangre y no creo que sea higiénico que vuelva a comer así.

Gavin levantó sus manos para ver sus dedos, frunció el ceño como si no reconociera sus dedos y tiró de la piel de sus nudillos que colgaba descuidadamente.

-No, no haga eso -Dijo Nines al desenvolver sus brazos y poner una mano sobre las de Gavin, palmó suavemente su brazo y lo ayudó a levantarse notando lo obediente que se volvía.

Ayudó a Gavin a quitarse la ropa mientras prendía el agua de la ducha nivelando la temperatura apropiadamente y lo dejó solo cuando se comenzaba a quitar la ropa interior, por lo que fue a su cuarto buscando más ropa que pudiera quedarle al detective, ya que la ropa del día anterior aun estaba en la lavadora y ni siquiera había iniciado un lavado.

En mis manosWhere stories live. Discover now