𝚂𝚊𝚕𝚟𝚊 𝚊 𝚕𝚊 𝚛𝚘𝚜𝚊 𝚋𝚕𝚊𝚗𝚌𝚊 [MikaYuu]

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟖

Estás flores, son para una persona
que más apreciaba la persona que
una vez amé.

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Pov Yuu

Aún me estoy acostumbrado a llamarle por ese apodo para que se sintiese cómodo.

— ¿Estás flores estarían bien? —en manos tenía un ramo de rosas, recién recogidas del jardín en una cesta.

— Umm~ Tienen un aroma agradable —me acerque para olerlas pero.....pase por su cabello y su cabello también olía bien— Ah, esto es.... —huele a las rosas.....ah....////////— ¡Ha! —me aleje de inmediato.

— Tu cara está roja ¿Estás bien, Yuu-chan? ¿El olor te habra hecho sentir mal?

— ¡No! Un poco, este......Eh... Recordé el olor de la jalea ¡Si! ¡Ya me dió hambre....!

— ¿Es así....? Eres un glotón, Yuu-chan jajaja

Desde el día en que corrimos tomados de las manos en Londres, pareciese que la atmósfera que tenía Mika se ha detenido un poco.

Él sonríe y está feliz....de alguna manera, mi corazón está inquieto.

— ¡Ya se! Traeré un florero si usted quiere decorar -me estaba dirigiendo hacia el interior de la mansión por un florero pero Mika me detuvo.

— No.... No necesitamos un florero. Porque estás rosas, las necesito para visitar a alguien.

•••••••

Más tarde, tuve que acompañarlo al cementerio. No sé me pasaba por la mente eso.

— Oh! No esperaba verlo por aquí, señor Smith.

— Señor Geales, que coincidencia.

Nos encontramos con un hombre de mediana edad, pero su rostro se me hace familiar.

— Te ves bien, estás lleno de energía, me alegro muchísimo. Y emm....

— ....Señor Smith, este chico es Yuuichiro. Yuuichiro el es el señor Smith. Tu también lo conoces, es el editor en jefe de la editorial.

— ¡Ah..! —¿No puede ser él, o si?

— No hay excusas por la insolencia de mi hermano menor en ese momento, déjeme disculparme.

— Yo... También, irracionalmente vine sin previo aviso... -dije algo apenado por lo ocurrido.

— ....Estoy sorprendido de que hayas traído a una persona en el aniversario de su muerte. —el señor Smith se dirigió a Mika, y el estaba agachado acomodando el ramo de rosas en la tumba. — ¿Algo te hizo cambiar de parecer?

— ......¿Puedo cargar este peso de culpas yo solo....?

— ....? —mire un rato el nombre grabado en la tablilla de la tumba.

"Johan Welt" creo haber escuchado en algún lugar...

— Este.... Está tumba es...?

— Ah! Es de un amigo en común —dijo el señor Smith y al cabo de un rato hablo Mika.

— ....Es el padre de una persona que una vez amé....

— ....! -esas palabras me dejaron impactado. Siempre me preguntaba si alguna vez tenía un amor de verdad.