Daddy's Room┆KM

🍺┆Capítulo 10

Kook me lanzó contra la puerta en un rápido movimiento y se colocó frente a mí, claramente está evitando que huya de sus garras y por cuestiones obvias no intentaré nada de eso porque es demasiado agradable estar atrapado entre sus fuertes brazos.

—Profesor Jeon, ¿qué está haciendo?

—Anoche no tuve tiempo de continuar con mis movimientos porque cierta personita huyó antes de tiempo— dijo mientras acercaba lentamente su rostro al mío. Llevó sus suaves labios al lóbulo de mi oreja y comenzó a mordisquearlos con delicadeza, como si temiera hacerme daño.

No pude evitar soltar un gemido que hizo sonreír a Jungkook el sonido de su risa es maravillosa y me encantaría escucharlo una y otra vez.

—¿De qué habla, profesor? — logré preguntar en tono bajo.

Jungkook no respondió, simplemente lamió y mordió nuevamente el lóbulo de mi oreja y sentí mi cuerpo temblar.

Efectivamente, desde la noche anterior se había generado una tensión sexual que no puede ser ignorada hasta no sucumbir en nuestros perversos pensamientos y deseos sexuales que son demasiado obvios.

—Mhm... hueles tan bien— dijo después de inhalar el aroma en mi cuello; repartió unos cuantos besos y lamidas en mi cuello, la zona más sensible que tengo en todo mi cuerpo.

"¿Realmente logré que Jeon Jungkook, el hombre más guapo y atractivo de todo el mundo sienta atracción hacia mí? ¡Eso es una locura y me encanta!", pensé con felicidad.

No pude evitar acercar mi rostro al suyo para besarle, sin embargo, él se alejó un poco y dijo—: Me besarás cuando yo te lo haya ordenado. ¿Entendido, estudiante Park?

¿Juego de roles? Me gusta.

—Entendido, profesor Jeon— logré responder tras tragar en seco pues Jungkook decidió llevar una de sus manos a mi tetilla que se encuentra cubierto por la tela de la camisa y comenzó a jugar con él.

Nuevamente, solté un gemido a causa de la excitación que me está inundando por completo.

—¿Te gusta esto? — preguntó con tono varonil.

—Me encanta— respondí sin mostrar un gramo de vergüenza.

De pronto, fui tomado de la cadera y no dudé en colocar mis manos sobre sus hombros para evitar caer. Jungkook me cargó y me llevó hasta el escritorio para colocarme sobe este, de esta manera, tendrá más acceso a mi cuerpo entero. Sin excepciones.

El atractivo hombre llamado Jungkook estaba a punto de asaltar mi cuello nuevamente, cuando de pronto, alguien intentó abrir la puerta; rápidamente fui puesto en libertad e intenté peinarme y acomodar mi uniforme, tal y como lo estaba haciendo el profesor Jeon.

—¿Hay alguien...?

—¿Sucede algo? — preguntó Jeon.

—¡Profesor Jeon! ¿Puedo hablar con usted? — preguntó la mujer desde el otro lado de la puerta.

Sin perder más el tiempo, tomé mi mochila del suelo y caminé hasta la puerta, la abrí y sonreí abiertamente a la profesora de artes que no dudó en sonreírme de regreso