19.

267 58 3
                                    

Aiko tendía unas prendas recién lavadas de su hermano, aprovechando que el infante decidió darse un baño

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Aiko tendía unas prendas recién lavadas de su hermano, aprovechando que el infante decidió darse un baño.

Su cuerpo voltea al canasto donde yacían más prendas para colgar en las ramas de un árbol, pero su mirada captan la figura de un hombre a no muy lejos de ella, acercándose a pasos acelerados.

La castaña se enderezó esperando al allegado, quien la veía de ceño fruncido.

—Solo quiero hablar contigo. —Confesó el rubio de mirada seria.

Y aunque sus palabras eran sinceras, Aiko recorrió con su mirada por todo su alrededor, comprobando que no había nadie más escondido.

—Bien, puedo escuchar. —Aceptó la platica volteando su cuerpo al canasto bajo.

Estaba indefensa. Aiko no traía ni un mísero kunai y es por eso que se vio obligada a ceder. Ahora solo estaba tendiendo una prenda mientras pensaba qué inventarse.

Pero bien sabía que tener al enemigo de espaldas era lo peor, así que ella lo llamó con su mano.

—Ayúdame a tender la ropa, por favor.

Y tras las palabras de ella, algo curioso y con una gota de sudor bajando por su mejilla, Naruto se acercó ayudándola a tender.

—¿Tú ayudas a Sasuke con su venganza? —Fue directo Naruto.

—¿Yo? Yo no tengo porqué detenerlo.

Aiko sabía que en cualquier momento, el Uzumaki podría acabar con ella por lo que simplemente se mantuvo en su calma habitual.

—La venganza es un camino sin salida, sin éxito. Luego de la venganza, ¿qué habrá? —Hablaba el rubio de ceño fruncido, sus manos se apretaban con fuerza.— ¡No es más fácil simplemente el perdón y soltar el pasado de una vez!

—Para algunos sanar es perdonar y soltar... Pero para otros el único camino a la sanación es la venganza. —la mirada de ella fue directa a los ojos del contrario.— ¿no lo crees?

Su calma era evidente. Algo que de alguna manera inquietaba al rubio. La voz relajada de Aiko prosiguió.

—¿Preguntaste, que habrá después? Por fin después se comienza a vivir. Y quizás así Sasuke se sentirá un poco menos miserable.

—¿En verdad crees eso..? —Una voz desmotivada escapó de sus labios.

Seguido de eso, Naruto tomó fuerza y su postura se enderezó, habló:

—Sasuke es mi amigo y no pienso dejarlo solo, él está hundido en la oscuridad y no encuentra otro camino, cree estar solo... ¡Sólo es por eso..!-

—¿Y sólo es por eso? —Las palabras del rubio fueron interrumpidas por ella.— Escúchame, no volveré a repetirlo. Aléjate de él, Sasuke no está solo porque me tiene a mí. Valoro tu esfuerzo, pero él no valora tu amistad, entiéndelo.

En la Cima de la Montaña ➳ Uchiha SasukeWhere stories live. Discover now