La bestia estaba sobre Lisa, dispuesto a dominarla, a mostrarle su oscuridad, su nariz resoplaba como un semental enérgico he incontrolable, pero fue ahí en pleno deseo donde una bala le rebotó en la sien.
Los ojos de Lisa se abrieron de golpe, estaba aturdida por aquella detonación, desconcertada por la abrupta intromisión.
—No....—Enseguida tres disparos más le fueron dados a la bestia, cualquier humano ya habría caído muerto, pero para el asombro de Lisa, las balas le habían rebotado a su amante.
La mirada de la bestia ardía cómo llamas del infierno
Al desviar la mirada pudo ver a su agresor.—¿Dan? ¿Que demonios crees qué haces? !Baja el arma imbécil¡—Lisa se puso de pie con rapidez y comenzó a insultar a Dan y a ordenarle que se detuviera, pero este estaba segado por los celos que le roían el alma.
—!Aléjate de él¡ —gritó Dan enardecido y añadió.—Voy a matar a ese fenómeno.
Lisa estaba furiosa y al mismo tiempo sentía su corazón lleno de adrenalina, sus latidos no la dejaban identificar bien sus emociones, lo que sentía era miedo, miedo de que lastimaran a la bestia.
—Deja que haga su mejor intento, haber quien destruye a quien.—exclamó la bestia con gran seriedad.
El se puso de pie y miró fijamente a Dan, provocando que a este se le erizara la piel.
—No me importa si eres el diablo o si eres a prueba de balas, voy a buscar la forma de asesinarte bastardo anormal.
—!Déjate de estupideces Dan¡ creí haberte dicho que te detuvieras ¿desde cuando me desobedeces? —le gritó Lisa enfurecida.
—Es obvio que no sabes cuidar de ti, estabas apunto de entregarte a ese demonio ¿Porque me haces esto?
!te pedí que te alejaras de él¡ !lo que hago solo es para protegerte¡ ¿Que no vez lo que acaba de hacerle a ese hombre?Dan estaba asqueado por haber visto a su amada Lisa en brazos de su enemigo, acariciandose frente al cadaver de aquel infeliz.
—No me hagas enojar más Dan...no te conviene ...—le dijo Lisa apretando los puños con fuerza y trato de interferir interponiéndose en medio de ellos, pero Dan que era hábil con el arma ya tenía identificado a su objetivo.
Nuevamente Dan dispara a quema ropa y esta vez la paciencia de la bestia se agota y este camina hacia Dan mirándolo con desprecio.
Lisa estaba en shock, Dan iba enserio, no le importó que las balas le pasaran por un lado, rápidamente volteó en dirección a la bestia y no podía creer cómo es que era inmune a las balas, sin duda era un ser sobrenatural, probablemente él si era el diablo.
—¿Ya te cansaste de jugar?.— le pregunto la bestia con aquella voz infernal, Dan seguía disparando hasta que se quedó sin balas y una vez que hizo eso no le quedó más que írsele a los golpes.
—!Como es que sigues vivo maldito¡ !ni si quiera te molestas en cubrirte el rostro¡ tu peor error fue haberme revelado tu verdadera identidad...
Lisa estaba con la mirada oscurecida, su corazón frívolo y marchito había tomado una decisión, miró a Dan con tanta rabia que el pudo sentir su desprecio y eso lo desconcertó haciendo que bajara la guardia y recibiera un herida en el costado, la bestia le había enterrado un cuchillo , aunque no lo había herido de muerte.
—A diferencia de mi, tú si sangras.—la bestia encontró los ojos de su oponente y Dan cayó de rodillas pero no debido al dolor agudo que sentía, si no porque aquel asesino era un desquiciado, nunca sintió algo tan siniestro en su vida.
La bestia quería matarlo, pero algo inesperado lo detuvo.
—¿Estás bien? —Dan creyó que aquella pregunta hecha por Lisa iba dirigida hacia él, pues con su mano trataba de detener el sangrado, sus ojos se abrieron de golpe al ver que su amada corría a los brazos de la bestia, el imponente hombre estaba perdiendo la razón.
Varias voces salían de su garganta, como si varios hombres estuvieran dentro de él, sus manos cubrían su rostro, como si estuviera impidiendo que algo emergiera de él, Dan no sabía que pensar, era evidente que la bestia tenía un conflicto interno, algo muy extraño y bizarro estaba ocurriendo ante sus ojos.
Su asombro y su temor se eclipsaron al ver a Lisa angustiada.
¿Alguna vez puso esa cara conmigo? ¿Era posible que ella se preocupara genuinamente por alguien? Lo único que Dan conocía de Lisa era su maldad, su egoísmo y narcisismo, su odio y su sed de venganza, cuán doloroso fue para él darse cuenta de que su amada era brillante y más humana cuando estaba con esa bestia inmunda.
El corazón de aquel policía se rasgó en dos con tal violencia que quería llorar, su Lisa estaba embelesada por ese vil asesino.
Rápidamente lo puso de pie y se lo llevó de ahí, sin importarle el estado de Dan lo abandonó como si de un perro herido se tratara y mientras caminaban el pronunció con rabia.
—Ahora veo que si tienes una debilidad, él...—exclamó Dan devastado y con una mirada llena de odio y celos la amenazo.
—!Voy a matarlo¡ !si no me eliges a mi voy a matarlo¡—Dan le lanzo una piedra en la cabeza a la bestia y en un acto desesperado se juró a sí mismo...
Voy a encontrar la forma de que sangre, les voy a demostrar que yo también puedo ser un demonio... uno que tú creaste...mi amada y perversa Lisa...
Una vez que se adentraron a lo profundo del bosque, lejos de las amenazas, Lisa se acurrucó en el cuerpo inconsciente de la bestia.
—No te preocupes, voy a disipar a todos tus enemigos, así que duerme mi precioso conejo blanco

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Las dos caras de géminis
Mystery / Thriller¿Quien podría describirse así mismo?, ¿Quien se atrevería a decir que es realmente bueno?, ¿A expresar lo que realmente siente?, creo que todos vivimos ocultos bajo la máscara de la moralidad y los buenos modos, yo no soy la excepción, soy una exper...