TITANIC ♡ JeongMi

Capítulo 4

Un enorme helicóptero Sea Stallion cruzó el océano con estruendo. No había tierra al final de ninguno de los dos horizontes. El Keldysh era visible en la distancia.

Se podía ver el rostro de Jeongyeon, mirando tranquilamente por la ventana del helicóptero.

Jihyo y Chaeyoung estaban viendo cómo arrojan el Mir 2 por la borda para iniciar una inmersión. Chaeyoung claramente no estaba feliz.

"¡Es una maldita mentirosa! Una chiflada. Como esa mujer rusa Anastasia."

"Están llegando" Buell les avisó.

Jihyo asintió y ella, Chaeyoung y Buell avanzaron para encontrarse con el helicóptero que se aproxima.

Son no se rendía. "Ella dice que es Yoo Jeongyeon, ¿Verdad? Yoo Jeongyeon murió en el Titanic. A la edad de 17 años. Si hubiera vivido, ahora tendría más de cien años."

Jihyo tampoco se rendía "Ciento uno en noviembre".

"Está bien, entonces ella es una maldita mentirosa muy vieja. La rastreé desde los años 20... trabajaba como actriz en Los Ángeles. Una actriz. Su nombre era Myoui Jeongyeon. Luego se casó con un tipo llamado Jeon Jungkook, se mudó a Cedar Rapids y tuvo dos hijos. Ahora Jeon está muerto, y por lo que he oído, Cedar Rapids también."

El Sea Stallion se acercó al barco, lo que obligó a Jihyo a gritar por encima de los rotores.

"Y se supone que todos los que saben sobre el diamante están muertos... o en este barco. Pero ella conoce. Y quiero escuchar lo que ella tiene que decir. ¿Entiendo?"

En un estallido atronador, las ruedas del helicóptero rebotaron en el helipuerto.

Park, Buell y Son observaron cómo el jefe de tripulación del helicóptero repartía unas diez maletas y luego los tripulantes de Keldysh bajaban a Jeongyeon a la cubierta en una silla de ruedas. Tzuyu, agachándose innecesariamente bajo el rotor, la siguió, llevando a Bbosong, el Pomerania.

Jihyo se acercó a saludarlas. "Hola, soy Park Jihyo. Bienvenidas al Keldysh".

Le devolvieron el saludo mientras ella les estrechaba la mano.

Tzuyu empezó a empujar a Jeongyeon por la cubierta en su silla de ruedas.

La viejita parecía increíblemente frágil entre todo el equipo de alta tecnología, la tripulación de cubierta sucia y el equipo gigantesco.

Jihyo estaba a punto de seguirlas cuando la llamaron. Luego, el jefe de equipo le entregó a una Park desconcertada una pecera con varios peces en ella.

Son le gritó a Park. "No viaja exactamente ligera, ¿Verdad?"

🌸

Tzuyu estaba desempacando las cosas de Jeongyeon en la pequeña sala utilitaria. Jeongyeon estaba colocando una serie de fotografías enmarcadas sobre la cómoda, colocándolas con cuidado al lado de la pecera. Jihyo y Chaeyoung estaban en la puerta.

Jihyo habló. "¿Tu camarote está bien?"

Jeongyeon sonrió. "Sí. Muy agradable. ¿Conoces a mi nieta, Tzuyu? Ella cuida de mi."

Tzuyu respondió. "Sí. Nos conocimos hace unos minutos, abuela. ¿Recuerdas, en cubierta?"

Jeongyeon rozó sus dedos en la parte superior de su cabeza. "Oh, sí."

Jihyo miró a Son... oh oh. Son puso los ojos en blanco. Jeongyeon terminó de arreglar sus fotografías: fotografías de sus hijos, nietos, y su difunto esposo.

"Listo. Tengo que tener mis fotos cuando viajo. Y a Bbosong por supuesto. ¿No es así, cariño?" le habló al perrito.

"¿Te gustaría alguna cosa?" Preguntó Jihyo.

Jeongyeon la miró. "Sí. Me gustaría ver mi dibujo".

Jeongyeon mira el dibujo en la bandeja de agua, enfrentándose a sí misma en un lapso de 84 años. Hasta que puedan descubrir la mejor manera de preservarlo, deben mantenerlo sumergido. Se balancea y ondula, casi como si estuviera vivo.

Los ojos antiguos de Jeongyeon observaron el dibujo.

Recuerda la mano de una mujer, sosteniendo un crayón conté, creando hábilmente un hombro y la forma de su cabello con dos líneas eficientes.

El rostro de la mujer del dibujo, bailando bajo el agua.

Una vez más, sus recuerdos se centraron en los ojos de la mujer, apenas visibles sobre la parte superior de un bloc de dibujo. Levantaron la vista de repente, directo a Jeongyeon. Ojos dulces, pero intrépidamente directos.

Jeongyeon sonríe, recordando. Jihyo tiene la foto de referencia del collar en la mano.

Jihyo comienza a hablar. "Luis XVI usó una piedra fabulosa, llamada el Diamante Azul de la Corona, que desapareció en 1792, cuando Luis perdió todo, desde el cuello para arriba. La teoría dice que el diamante de la corona también fue cortado... recortado en forma de corazón... y se convirtió en Le Coeur de la Mer. El Corazón del Mar.
Hoy valdría más que el Diamante Hope."

"Era una cosa muy pesada." Dijo Jeongyeon y señaló el dibujo. "Solo lo usé esa vez."

"¿De verdad crees que eres tú, abuela?" Preguntó Tzuyu.

"Soy yo, mi cielo. ¿No era un encanto?"

Jeongyeon y Jihyo rien un momento y Jihyo asiente sonriendo.

"Lo rastreé a través de los registros del seguro... un antiguo reclamo se resolvió bajo términos de absoluto secreto.
¿Sabes quién era el reclamante, Jeongyeon?". Preguntó Jihyo poniéndose seria otra vez.

"Alguien llamado Kim, me imagino."

"Kim Namjoon, así es. Un magnate del acero de Pittsburgh. Por un collar de diamantes que su hijo Seokjin compró en Francia para su prometida... tú... una semana antes de zarpar en el Titanic. Y la demanda se presentó justo después del hundimiento. Así que el diamante tuvo que haberse hundido con el barco. ¿Ves la fecha?" Le preguntó a Tzuyu.

"14 de abril de 1912."

"Si tu abuela es quién dice ser, llevaba puesto el diamante el día que se hundió el Titanic. Y eso te convierte en mi mejor amiga." Le dijo a Jeongyeon. "Con mucho gusto lo compensaré por cualquier cosa que pueda decirnos que conduzca a la recuperación."

"No quiero su dinero, Sra. Park. Sé lo difícil que es para las personas que se preocupan mucho por el dinero regalar algo."

"¿No quieres nada?" Son preguntó escéptica.

"Puedes darme esto, si algo de lo que te digo es de valor." Dijo Jeongyeon señalando el dibujo.

"Trato. Aquí hay algunas cosas que hemos recuperado de sus camarotes." Dijo Jihyo mientras cruzaba la habitación.

Sobre una mesa de trabajo hay unos cincuenta objetos, desde mundanos hasta valiosos. Jeongyeon, encogida en la silla, apenas puede ver por encima de la mesa. Con mano temblorosa levantó un espejo de mano de concha de tortuga, con incrustaciones de nácar. Ella lo acarició con asombro.

"Esto era mio ¡Qué extraordinario! Se ve igual que la última vez que lo vi." Dio la vuelta al espejo y vio su rostro anciano en el cristal roto. "El reflejo ha cambiado un poco."

Ve algo más, un broche art nouveau de plata y piedra lunar.

"El broche de mi madre. Ella quería volver a por él. Causó un gran alboroto."

Jeongyeon tomó un peine adornado de estilo art nouveau. Una mariposa de jade toma vuelo sobre el mango de ébano del peine. Ella lo giró lentamente, recordando. Jeongyeon experimenta una avalancha de imágenes y emociones que han permanecido inactivas durante ocho décadas mientras sostiene la peineta de mariposas.

"¿Estás lista para volver al Titanic?" Le preguntó Jihyo.

Jeongyeon la mira y asiente, con lágrimas en los ojos.