Capitulo 20

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*Beep* *Beep* *Beep* *Beep*

*Beeeeeeeeeeeeeeeeee*-

Hace mucho que no despertaba en este lugar tan melancolico y vacio, la habitacion blanca llamada realidad con la que siempre intentaba almenos tener un respiro. Lo unico que recuerdo es haber huido de aquella bestia semejante a la de un monstruo gigantesco que consumia y se formba en base a mis mayores miedo y problemas para pensar con claridad. El estres que se acumula y no sale a la luz se transforman en una masa negra de negatividad que crece mas y mas con mas avanzo en esta nueva vida, un supuesto regalo de lo que crei podia ser una oportunidad para empezar desde cero. No mas lejos de la realidad, estaba aqui, encerrado, en mi propio pensamiento.

El ruido agudo del cardiograma en la habitacion me estaba ya resultando molesto, no solo por la alta frecuencia que se dirigia a mis timpanos con intensidad. Si no el constante recordatorio de que ya no estoy vivo, lo que alguna vez fue de mi no existe, solo estoy hecho para ser un receptaculo vacio hecho para poder hacerse las mas terribles intenciones y los mayores crimenes contra la existencia y el universo mismo. Me levante de mi cama recordando este lugar, un olor viejo de las paredes y un estilo rustico. Desconecte la maquina y me dirigi a la ventana para ver si me habia llegado una nueva carta, no habia nada mas, solo aquella tarjeta que recibi la primera vez cuando llegue a este lugar. Mi siguiente paso fue estirarme e irme de ese lugar, escapar una vez mas como el cobarde que soy.

Abri la puerta y. . . del otro lado, no habia mas que una oscuridad en un lugar antiguo. Una biblioteca con apenas luces zumbantes de las ya desgastadas linternas que apenas podian darle algo de brillo al sombrio lugar. El olor a libros viejos era lo que se podia ver en la atmosfera ya que solo habia polvo en cada rincon de la sala. Camine un poco para percatarme en las portadas de los libros, la fuente de letras y el idioma era de mi propio mundo. Aquel mundo cuyos recuerdos son vagos pero provienen a mi mente cada vez que los necesito. Tome el primer libro y lo desenpolve para revelar la borrosa portada: "Ponte atento", miro el contenido de la primera pagina:

"El miedo puede estar solo en tu mente, pero una luz milagrosa puede ayudarte a imaginar que no esta alli. Ten cuidado, alumbrar al objetivo incorrecto puede desatar su ira, usa tus recursos a tu disposicion."

La siguiente pagina del libro no decia nada pues era una tabla de madera que removi para encontrar que el libro era en verdad una caja con una sola pagina que callo al piso. Dentro en el contenido habia una linterna extraña con ojo en la lente. Toquetee un poco para averiguar como encenderla y en la parte del mango tenía un botón que daba un *click* al encenderla o apagarla, en el momento que la encendí una vez más todas las luces del lugar se apagaron.

Empeze a direccionar hacia todos los lados con el brillo de mi unica proteccion, note a primera vista que los librero estaban vacios y se podian ver incluso más viejos y polvorientos de lo que estaban antes, empeze a moverme lentamente en lo que parecía que se había transformado un oscuro pasillo. El ruido de la lluvia que se escuchaba en el techo más los insesantes truenos, no habían ventanas, ni tampoco una forma de ver el exterior, solo pasillos vacíos de pura melancolía que aspiraban a perderse más y más.

Intente regresar atrás sobre mis pasos peor lo que se pensaba que había una puerta, no había más que otro librero en su lugar. El laberinto estaba desolado y mientras observaba intentaba recolectar todo lo que podría ayudarme, primero encontré una mochila algo vieja pero podría servirme para ir llevando el resto de cosas, seguidamente de algunas baterías extra para mí linterna. Jugueteando un poco con esta logré entender que al mantener pulsado el botón del flash por mucho tiempo hacían que la linterna hiciera un choque fuerte de luz hacia el frente el cual era deslumbrador. No entendía para que podría servir en una linterna convencional pero siento que si por algo la encontré, fue por sus funciones.

ShimekiriDonde viven las historias. Descúbrelo ahora