Tu misterioso alguien. (Rivari/Rivama)

Soy bebé.

-Ari... ven. -mi voz ronca y "melosa" salió mientras intentaba mantener a la contraria en la cama. Abrazándola con delicadeza pues la mayor se estaba levantando de la cama.

Estaba calientita con ella a mi lado, y no podía negar que me sentía bien al tenerla ahí.

-Mi amor, tengo que prender stream. Ayer no prendí precisamente porque cedí a ti, no puedes ponerte así todos lo días, mi corazón. -respondió ella acostándose nuevamente conmigo mientras me miraba, yo solo atiné a hacer un puchero y a acercarme más a ella.

-Si puedo, si. Te quiero conmigo, por fi. Soy bebé, tienes que hacerme caso.

-¿Ahora si eres bebé?

-Si soy, lo sieeeento. ¿Si te quedas? Por favor.

Ella me había dicho aquella misma mañana que me estaba comportando como bebé, y es que si, admito que desde que inició aquella nueva semana de convivencia con Ari, lo que más había querido es estar pegada a ella, quería que me consienta y si, tal vez si me estaba comportando como bebé. A lo cual negué cuando ella me lo dijo.

-No puedo, Sam. -respondió dejando caricias en mi cabello sin dejar de mirarme.

Relajante.

-Si puedes, pero no quieres estar conmigo. Eso es. -respondí acercándome más a ella, acercando un poco mi rostro al suyo.

La escuché suspirar pesadamente y tras eso, su respiración se volvió más lenta. Ella había cerrado los ojos.

-Créeme que lo que más quiero es estar contigo, mi bebé. -mordió su labio inferior, evité aquello llevando una de mis manos a su rostro, utilizando mi pulgar para hacer que suelte su labio.

-Te vas a lastimar. -susurré sintiendo mi corazón acelerarse y mis mejillas arder.

-Tengo que... tengo que prender stream, ¿Te unes en un rato?

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-Y bueno, hoy voy a tener que cortar temprano así que voy pidiendo perdón por eso, tengo unos asuntos pendientes. -escuché a Ari decir desde su habitación de stream, fruncí el ceño confundida al escucharla, a mi no me había dicho nada de tener planes.

Entré a la habitación en silencio jugando algo nerviosa con el anillo que tenía en mi dedo anular, me quedé parada en la puerta unos segundos al notar que había volteado a verme, indicándome con una señal para que me acerque a ella, por lo que caminé a pasos lentos en su dirección.

-Hablando de asuntos pendientes... -dijo ella para el stream, acomodándose en su silla para darme lugar a mi.

Había tomado la costumbre de sentarme en su regazo cada vez que la veía sentada, me gustaba hacer eso.

Estar con ella siempre era un sentimiento de seguridad y una extraña (pero buena) calidez en el pecho.

-Desde que inició la semana esta señorita ha estado queriendo atención y que me la pase con ella, saben perfectamente que no puedo negarle nada. -comentó rodeando mi cintura con sus brazos para afirmarme sobre ella. Dejó un pequeño beso en mi mejilla a los cual suspiré, apoyando mi cabeza en la suya para leer el chat, sonriendo al ver como es que la gente llenaba todo de emotes o mensajes bonitos.

-No me expongas así... ellos se piensan que soy ruda. -susurré utilizando una de mis manos para afirmar mi agarre en uno de sus brazos, de ese modo no perdería el equilibrio.

-Lo siento, bebé. -respondió ella aguantándose la risa mientras dejaba caricias suaves en mi cintura, utilizando una de sus manos para tomar la que yo tenía en su brazo.- Sam...

Hice un sonido nasal en respuesta sin quitar mi mirada del chat, al sentirla acariciar mi mano, quité mi atención de la pantalla para dársela a ella, acomodándome para verla.

-¿Sam?

-¿Qué cosa? -pregunté ladeando la cabeza confundida, ella utilizó sus dedos para señalar de alguna manera el anillo que tenía puesto.- Oh. -solté una risita antes de asentir.

-Gente, voy a cortar stream aquí, ¿bueno? Quiero mimar a esta señorita porque esta semana es bebé aunque le duela admitirlo. Los quiero muchísimo, mañana prendo más temprano, se los prometo. -despidió ella mientras me sostenía con una sola mano, por lo que decidí ayudarla rodeando su cuello con mis brazos.

-Hasta mañana, perdón por quitarles a Abi. -dije yo un tanto apenada pero feliz, era lindo cuando Ari me ponía en primer lugar.

Cuando cortó stream, aclaró su garganta antes de hablar. Yo ya sabía sobre que.

-¿Desde cuando?

-No lo sé... Me di cuenta esta semana, nunca... Nunca había sentido algo así. -respondí mirándola a los ojos, sonriendo feliz al ver los suyos brillar.- O tal vez si, no recuerdo.

-¿Entonces?

-Ari, te amo.