💠[1.6] the end of the day

482 35 0
                                    

El Manchester United suma otra victoria más contra el Arsenal ganando el encuentro 3-1

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.








































El Manchester United suma otra victoria más contra el Arsenal ganando el encuentro 3-1. Sin duda Lisandro Martínez estaba muy motivado durante el juego gracias a que sus hijos y Mar lo estaba viendo por primera vez desde que habían tomado la decisión de juntarse como una familia.

La mexicana fue quien decidió que las cosas avanzaran lento para evitar que las cosas entre ellos se saliesen de control. En cuanto a los mellizos, Rhaegar no podía estar más que contento al ver a su padre más seguido, mientras que Myrcella intentaba ser positiva ante esta situación y darle confianza al argentino de acercarse más a ella.

Mar estaba acompañada de sus amigas quienes también vinieron a presenciar el partido de los Red Devils y una vez que este acabó, se bajan a felicitar a los futbolistas por el gran trabajo que habían dado.

—Si Licha busca de mí, le dices que fui al baño? —pide Tina al oído de Mar.

Suelta una sonrisa burlona— creo que ya deberías decirle de tu "relación" con Garna —aconseja con una mirada pícara.

Tina llega a sonrojarse— queee...? De qué hablas? Yo con ese tonto?! Jamás! —niega.

Deja escapar una risita de ternura— ya ve con él, yo me encargo de distraer a tu hermano.

—Eres la mejor, Mar —agradece la argentina y se va corriendo a dirección opuesta.

Rhaegar también sale corriendo al ver que su padre estaba cerca por lo que una vez que se acerca, lo abraza con fuerza diciéndole que había jugado increíble. Las chicas al poco tiempo se acercan a ellos para también felicitarlos—. Enhorabuena por la victoria, Lisandro —halaga Mar.

—Felicidades, papá —apoya Myrcella con una sonrisita sincera.

—Gracias a ambas. Siempre me encargo de darlo todo por ustedes tres —confiesa el central con afecto—. No crees que merezco un beso como premio? —le coquetea a la mexicana.

Mar alza una ceja tramando algo— sí, tienes razón —coincide—. Myrcella, puedes darle un beso a tu querido padre? Se lo merece.

La pequeña se sorprende ante el pedido de su mamá pues no esperaba aquello. Pero lo que más sorprendió a los demás, fue que hizo que Lisandro se agachara a petición de su hija y la chiquilla le regala un corto beso en la mejilla a su padre. Esto hizo impulsar al argentino dándole un cariñoso abrazos a su hija transmitiendo el amor que sentía por Myrcella.

La niña poco a poco fue sintiendo confianza y cariño hacia su padre. Al parecer este momento sirvió para unir más a estos dos, algo que Mar estaba deseando desde el instante que Myrcella conoció a Lisandro. Y al ver esto, la imaginación de la mexicana hizo que pensara en por fin tener una linda familia.

Después de unos minutos más, Liz y Vian llegan a acompañar a la familia con sus respectivas parejas. Los cuatro ya tenían planeada su plan para fortalecer más el amor entre Mar y Licha quedándose a cuidar a los mellizos para darle tiempo a solas a los respectivos padres.

—Oye, Rhaegar, te gustaría acompañarnos a los bolos? Scott y yo vamos —anima Rashi.

El chiquitín salta de la emoción asintiendo a la invitación. No sin antes pedir permiso a su mamá quien no entendía lo que sucedía. Al instante, sus dos amigas le piden si pueden llevarse a Myrcella de compras quien también se pone entusiasmada. 

—Amor, nos quieren dar tiempo libre de los niños —susurra Lisandro en el oído de Mar estremeciendo a la morena.

—Ok! Pues ya nos vamos —avisa Liz tomando de la mano a la melliza.

—Te avisamos cuando lleguemos a la casa!! —dice Vianey partiendo junto con los demás dejando por fin solos a los papás.

Mar se gira para ver frente a frente a Lisandro—. Asumo que fuiste participe de esto, cierto? —deduce.

El argentino toma por la cintura a su amada— creo que nos merecemos un tiempo libre, no crees? —dice pícaro.

—De acuerdo, Lisandro —acierta Mar y juntos se van a recorrer las calles de Manchester debajo de una estrellada noche haciendo su salida romántica.

Caminaron siempre tomados de la mano, se detenían en un par de ocasiones para hacerse cariñitos y demás, hasta llegar a un puente que permitía cruzar un lago. En ese lugar Lisandro se atrevió a confesarle a Mar cuanto la extrañó desde el día que partió, lo complicado que fue el no estar con ella, la misión imposible de dejar de pensar en Mar.

La mexicana se quedó sin palabras para responderle, por lo que lo abrazó y así corresponderle aquellos sentimientos que con cada día que pasaba, ya estaban más que claros. Quería darle una oportunidad a Lisandro para oficializar su relación.

Regresaron a la casa de la ojiazul con Lisandro poniéndose un poco dudoso al ver un carro desconocido justo enfrente— esperas a alguien? —desea saber cuando salen del vehículo.

Mar reconoce del auto—. No. Pero sé de quién se trata. —explica y juntos entran a la casa con la sorpresa de que el papá de la mexicana había regresado de su viaje de negocios—. Papá!! Volviste! —dice asombrada de verlo aquí.

El sr. Barrueco suelta una sonrisa al ver a su hija— mi amor —responde abrazando a su hija por los hombros. Cuando se separan, se fija que no venía sola—. Acaso estoy viendo mal o ese es Lisandro Martínez? —cuestiona con un toque de broma.

Lisandro traga saliva sintiendo cómo sus piernas le querían fallar— buenas noches, sr. Barrueco —saluda extendiendo su mano.

Se acerca a estrechar la mano del padre de sus nietos— veo que te has reencontrado con mi hija, no es así?

El rostro del argentino deja resaltar que aquel apretón de manos fue fuerte— papá! No quieras crear una escenita —pide Mar quejándose.

—Para nada! —voltea a ver a su hija— sólo he quedado asombrado por lo pequeño que es el mundo —comenta—. Dime, Lisandro, cuáles son tus intensiones con mi hija y nietos?

—Papá!

—Me aseguraré de nunca dejarlos ir —dice el futbolista armándose de valor—. Los perdí una vez pero le aseguro que no volverá a suceder. Y puedo decir con certeza que no permitiré que nadie más interfiera con mi familia —dice directo a los ojos del sr. Barrueco.

El padre de Mar sonríe a los pocos segundos— este chico me agrada para ti, mija —jala el brazo de Lisandro para darle un abrazo al argentino mostrando que esta satisfecho con lo sucedido.

𝐇𝐎𝐍𝐄𝐘 :: 𝗟𝗜𝗦𝗔𝗡𝗗𝗥𝗢 𝗠𝗔𝗥𝗧𝗜𝗡𝗘𝗭Where stories live. Discover now