Reze: ¿y te tuvieron que ayudar? Me decepcionas
Denji: cómo si tú lo hubieras hecho mucho mejor -movió la pequeña bolsa con hielo que tenía en la cabeza- tengo fiebre... Debería entrenar más mi don
Reze: la verdad es que si, Tomura será mucho peor que esto -miró la palma de su mano- yo también debo mejorar si quiero ser útil en esa batalla
-nos encontramos apenas 1 hora después de la batalla contra Dabi, los chicos volvieron a la base a curar sus heridas y descansar-
Denji: ¿qué hora es...?
Reze: hm, las dos de la mañan- -la interrumpió un grito desde otra habitación-
Yoru: ¡para para para! ¡Seguimos después!
Izuku: debes aguantar, tengo que hacerlo así
Yoru: ¡no puedo más! ¡Duele! ¡Duele! ¡Se más cuidadoso!
Izuku: ¡no me vengas con esas, tú querías esto!
-Reze y Denji se miraron complices, se acercaron a la puerta de la que provenían los gritos de sus amigos, ambos pensaban lo mismo-
Denji y Reze: (¿están follando?)
Denji: (que descaro, con su hermano a 5 metros de distancia)
Reze: (¿quedarán palomitas?) -la chica no estaba realmente interesada en el tema-
Izuku: aguanta, aguanta... Ya casi termino...
Yoru: ¡rápido!
Izuku: ya está, todo limpio
Denji: (joder, que velocidad)
-la puerta se abrió derrepente, mostrando a Yoru sin camiseta boca abajo en la cama, en la mesita de noche había un botiquín de primeros auxilios y al lado, toallitas con alcohol para desinfectar-
Denji: (ah, la estaba limpiando las heridas...) ¿Hola?
Reze: (definitivamente deberían quedar palomitas, yo dejé dos paquetes hace tres días)
Izuku: ¿se puede saber que hacéis?
Denji: oh, estoy taaaan cansado -fingió muy mal un desmayo-
Izuku: ¿y tú?
Reze: ¿quedan palomitas?
Izuku: en la cocina, mueble de arriba a la derecha detrás de unas latas, la dejé ahí para que Denji no las encontrara
Reze: ¡te has sacado la lotería, Yoru! -fué en busca de su comida-
Denji: ¡espera, yo también quiero! -persiguió a la pelimorada-
Izuku: son tal para cual, ¿verdad?
Yoru: si, creo que si -se puso una camiseta-
Izuku: esa camiseta es mía
Yoru: ¿algún problema?
Izuku: para nada -se sentó junto a ella en la cama- vaya noche, ¿eh?
Yoru: para recordar, sin duda... ¿Quieres hablar del tema?
Izuku: no se...
-Yoru se dió un par de palmadas en los muslos, Izuku entendió el mensaje y se tumbo utilizando estos cómo almohadas-
Yoru: ¿y ahora?
Izuku: hm... creo que si
Yoru: ¿que fue exactamente lo que te ocurrió Izuku? -comenzó a acariciar el pelo de su chico-