La Omega del Diablo [Haruchiyo Sanzu x Tu] [Yandere]

3. Estúpido Alfa

🍂 Escritora-chan 🍂

La joven de cabellos azabaches y mechones azules se encontraba sentada en una de las diferentes mesas del Local.

Un café donde siempre solía ir cuando salía temprano de la Universidad, cabe aclarar que no todo el tiempo salía temprano, muchas veces salía a las 10 de la noche, lo que era muy peligroso, al estar ella sola por las calles.

Además, para completar, por dónde Tn vivía una pandilla se la pasaba jodiendo, volviendo los, regreso a casa sola, se volvieran peligrosos.

Pero eso a ella no le importa, estando sentada allí disfrutando de su capuchino junto a un pastel de (T/S/F), la ojimiel era feliz.

Aunque...

Había algo que la molestaba

Ese aroma que desprendían todos los alfas que pasaban cerca de ella, odiaba que su Omega interno se sintiera atraído por aquellas feromonas, aunque habían algunas que le causaban asco, otras se le hacían de lo más atractivas.

Cómo por ejemplo aquellas feromonas que emanaba cierto alfa de cabellos rosa, aquellas feromonas con aroma a chocolate amargo, con cierto toque de...¿Vainilla? Seguramente, la distancia no dejaba disfrutar bien el aroma.

Sin darse cuenta termino liberando sus feromonas, dulces feromonas con aroma a (T/A/F) [Tu aroma Favorito, por si no entendieron].

Escencia embriagadora que llegó hasta el olfato de dos alfas que se miraron entre si al sentir el suave aroma de Tn.

— huele delicioso – sonrió el de cabellos rosados, mientras le daba vueltas al teléfono que descansaba tranquilo en la mesa.

— concuerdo contigo – el Alfa de cabellos Violeta asintió, para seguido, dar un vistazo por el local.

— Quien la encuentre primero se la queda?

Una propuesta muy buena por parte del Pelirosa, pero al pelilila no le interesaba la o el Omega, tenía muchos otros, así que se encogió de hombros.

— no me interesa, puedes quedarte con el Omega – tomo del café negro sin azúcar, mirando hacia la nada.

— ok – El Alfa que tenía dos Cicatrices con forma de rombo en su boca se levantó de su asiento.

Estirando su cuerpo levemente, dió unas miradas por todo el local, el cual estaba lleno de Omegas, tanto de Betas, no había ningún aroma de Alfa, además del suyo y el de su compañero.

Sonrió cual cazador mirando a su presa, al encontrar a una Omega que disfruta tranquilamente de su capuchino y un trozo de pastel de (T/S/F).

Se acercó a pasos tranquilos hasta el puesto de la chica, para cundo estuvo justo a su lado, hablo.

— buenas tardes, Señorita – dice para llamar la atención de la chica, la cual deja de ver su pastel, para mirar al de hebras rosadas.

— ¿Pasa algo? – y allí estaba el suave aroma a (T/A/F) que desprendía la Omega, aunque está lo hacía sin otras intenciones, el Alfa no pensaba eso.

— estaba tomando tranquilo de un café, cuando me doy cuenta de que estás sola, una hermosa señorita no debería estar tomando café sola, asi que... ¿Me permite tener el gusto de sentarme a su lado? – sonrió de manera sutil, soltando de manera sutil sus feromonas a chocolate amargo y vainilla.

— e-etto? ¿Está bien? – respondió confundida, por el repentino interés del alfa, aunque al recordar que tenía a alguien del género que tanto odiaba, alzo sus barreras, reteniendo sus feromonas.

— y cual es su nombre? Claro, si se puede saber – Sanzu sonrió con su vista fija en los ojos contrarios.

— soy Tn...solo Tn – habla de manera celosa, intentando no sonar seca.

— oh qué lindo nombre, te queda linda – le sonrió de manera coqueta sonrojando levemente a la chica – yo soy Sanzu.

— es un gusto, Sanzu-san – sonrió de manera amable, aunque algo forzada.

— lo mismo digo Tn, te puedo hacer una pregunta? – la Omega asintio no muy convencida – ¿Tienes novio? ¿Pareja? ¿Un alfa? – empezó a jugar con un mechon de cabello de la chica, quien se removió incómoda.

— este.. no, no tengo, ni novio, ni pareja y mucho menos un alfa – el más alto al escuchar aquello sonrió complacido.

— eso es bueno, ¿Te han marcado? – aquello sonrojo a la chica quien nego – que interesante jejeje~ ¿Quieres que te marque? – aquello te tomo por sorpresa.

Pero sin poder responder ya que guste inundada con muchas feromonas con aroma a chocolate amargo y vainilla, el aroma era tanto que empezaba a sentirse mareada.

— ¿Que pasa te sientes bien? – el pelirosa se levantó de su asiento y camino hasta estar al lado de Tn, para tomar su mentón y alzarlo para que esta lo mirara.

— d-detenga se – pidió en un hilo de voz.

— pero si no te estoy haciendo nada – sonrió para elevar el aroma de sus feromonas.

Sin darse cuenta, que las demás Omegas empezaban a entrar en celo por su culpa.

— a-alfa...

— m-mi celo se a-adelantó

— ¡Márcame!

Cosas así empezaron a escucharse en el café, al ser un lugar en donde la mayoría de los clientes eran Omegas que un alfa alzadas su atractivas feromonas para seducir a una Omega terminaba afectando a los demás de ese género.

— ¡Idiota detente! ¡Apestas! – gruño su compañero, el menor de los Haitani frunció su ceño con una mueca de asco.

— oh jejeje~ perdón, me deje llevar – quito la mano del mentón de Tn, para alzar las manos en modo de rendirse.

— *toce* estúpido Alfa – se quejo aún con un ligero dolor de cabeza.

— que linda Omega, te voy a marcar – sonrió al ver la cara nerviosa de la chica de mechas azules.

Es una promesa

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