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❛Por qué me tratas tan bien

"Arianna Ferrara más cerca que nunca a sus colegas"

Varios artículos sobre ella en el diario y en las revistas, hablando del pequeño brindis entre Fito y ella días después de terminar de grabar Taquicardia.
También habían algunos colados en las fiestas a las que ella iba y de ahí salían todas las noticias, no les tomaba mucha importancia por ahora y tampoco dejaba de ir a ellas.

Justamente ahora se encontraba en otra y ahora Bianca si pudo acompañarla.

Arianna bailaba junto a Fito, le parecía extraño no ver por ningún lado a Charly ni a Fabi. Mientras tanto Bianca charlaba muy a gusto con un amigo de Fito.

—¿Y los chicos? Fueron ellos los que nos invitaron, ¿no? —Habló en voz alta.

Fito asintió.

—Fabi tuvo que viajar. —Contestó entristecido.— Y Charly seguía en el estudio cuando me fui, supongo que ya va a aparecer.

Ella también asintió.

Poco a poco se unía gente a ellos y bailaban en ronda, los pasos de baile eran diversos y divertidos, ninguno se privaba de bailar. Pero aún bailaban más entre ellos dos y no tanto con los demás, la noche estaba siendo un poco aburrida de no ser por la compañía de su amigo.

—Voy al baño, bancame. —Mencionó Fito casi gritando y ella asintió.

Ella también aprovechó de ir al baño y mojarse un poco la cara, el sueño le estaba pegando de a poco y el alcohol lo hacía desaparecer al mismo paso lento.

Supuso qué Fito seguiría en el baño de hombres pero se equivocó. Él estaba con alguien en el mismo lugar donde estaban bailando anteriormente.

—Hola, Ari. —Era imposible no reconocerlo.

—Charly. —Sonrió ella saludándolo con un beso en la mejilla.

—Ves, qué te dije a vos. —Fito miró a su amiga y luego a Charly.

—¿Qué pasó que llegaste para los aplausos? —Preguntó Arianna agarrando uno de los vasos con tragos que Fito había ido a comprar.

—Por si no estás enterada, estoy grabando un álbum, nena. —Respondió en forma burlesca.— Me atracé un poco y me enojé.

Charly alzó sus hombro y prendió un cigarro.

—Y vos qué haces de tu vida ahora. —Le largó el humo a un costado de la cara a Arianna.— ¿De joda en joda?

—Me estoy tomando un tiempo, ya hice lo que tenía que hacer. —Respondió.

Fito estaba parado escuchando la conversación sin opinar nada. Estaba estático y al caminar se tambaleaba, no había ido al baño sólo para hacer una única cosa al parecer.

Entre charla y charla con Charly, Fito se fue de allí desapareciendo de la vista de ambos. Lo buscaron con la mirada pero lo dejaron ser, casualmente se lo veía sentado en la barra.

—¿Queres bailar? —Preguntó Charly.

—Dale. —Contestó.

Charly se puso detrás de ella para dirigirla más al centro de la multitud de gente, era más divertido bailar allí.

Bailaban entre empujones de las demás personas y chocando también.

Charly se sacaba el cigarro de la boca y se lo pasaba a ella pero siempre recibía un "no" por su parte, siguió insistiendo un par de veces más solo para molestarla un poco.

—¿Viniste sola? —Preguntó él cerca del oído de Arianna.

Negó con la cabeza.— Con Bianca.

Garcia asintió con la cabeza.

—Si la vi, creo. —Respondió y continuó bailando con ella.

Al momento de bailar no era algo tan íntimo entre ellos dos, lo veían similar al acto de hablar o cualquier cosa cotidiana. Íntimo sería un contacto por parte de cualquiera de ellos.

Charly siempre la invitaba a bailar con esperanza.

—¿Qué tal el álbum? —Preguntó entre sonrisas.

—Más o menos. —Hizo una mueca.— No preparé tantos temas y no son suficientes.

Era verdad, se veía en su rostro y se notaba en su voz. Por un momento sintió pena por él, tenía una expresión triste.

—Tranca, vos. Ya va a surgir algo, siempre te va bien y ahora no va a ser la excepción . —Animó.

—Espero. —Alzó una ceja y volvió a colocar el cigarro en su boca.

Habían hecho dos pausas cortas, una para ir a comprar bebida y otra para que Garcia la ayudase a atar los cordones de su bota.

Se habían olvidado de Fito y de Bianca, qué estarían haciendo ahora, ninguno se preguntaba nada por el momento.

Charly disfrutó el momento y no pensaba terminarlo.

Curiosamente Garcia lograba avivar los nervios de Arianna al acercarse a ella.
Bailaban más pegados y las sensaciones que provocaba en ella no eran falsas.

—¿No estás flasheando cualquier vos? —Preguntó ella bromeando.

Miró a Charly a los ojos y él negó con la cabeza.

—¿Te molesta? —Cuestionó él colocando una mano en el brazo de ella.

Unos eternos segundos después ella también señaló que no, dudosa, pero al responder ya no había vuelta atrás.

Sus manos comenzaban a actuar, Charly recibía el calor de las manos de Arianna en su cuello, y ella sentía unos fríos dedos tocar su mandíbula.
Era un momento tan extraño y repentino, repentino para ella que nunca se lo habría esperado.

No quería decir que no cuando ya se encontraba en esa situación comprometedora, veía a Charly muy concentrado y callado.

Charly se agachaba sólo un poco para acercarse a ella, sus manos estaban bien posicionadas sobre la mujer y sus ojos no paraban de mirar su sonrisa.

Sus narices se tocaban nerviosas, los ojos de Arianna estaban ligeramente abiertos observando los párpados cerrados de Garcia y su bigote bicolor tan distintivo.

Observó por unos segundos más a Charly, nunca lo había apreciado tan de cerca y de esa forma. Sus labios, su nariz, sus ojos, las marcas en su piel, todo.
Una extraña sensación recorrió su espalda al terminar de acortar la distancia.

Extrañamente los dos estaban tímidos esa noche después de tanta cercanía sin vergüenza, ese beso había sido una exclusividad para Charly.

Sus bocas se movían lentamente y sin apuro, Charly abrió un poco los ojos para mirar a la mujer que estaba besando y sintió la misma sensación que ella. Sus manos bajaban lentamente por sus brazos hasta la cintura de Arianna, la abrazó como si no la conociera y tampoco dudó en seguir el beso.

Ella sintió el cabello castaño de Garcia entre sus dedos, los movía con suavidad bajando hacia su nuca y la palma de su mano terminaba en la mejilla de Charly.

Había sido algo que nunca olvidaría cuando él se separó de sus labios y le regaló un beso en la mejilla para acercarse a hablarle cerca del oído.

—¿Vamos afuera? —Preguntó. Sentía tanta pena de mirarla hacia los ojos pero lo terminó haciendo.

Ella asintió con la cabeza antes de hablar.

Ahora tomó la iniciativa agarrar la mano de Arianna y llevarla con él hacia afuera.
Allí estaba oscuro y no pasaba nadie, literal. La hora también no era la adecuada para andar por la calle, mayormente todos salían de joda a esa hora o quién sabe qué otra cosa también.

Los dos salieron esquivando a la gente para terminar sentados en el cordón de la vereda.

Cinema Verité | Charly García. COMPLETOWhere stories live. Discover now