𝗔𝗡𝗢𝗧𝗛𝗘𝗥 𝗥𝗢𝗨𝗡𝗗 𝗢𝗙 𝗦𝗘𝗫? ☆ Quackity.

𝗗iversión | M

El sudor que recorría su cuerpo, aquellos labios abiertos mientras soltaba sonidos de satisfacción, su cabello negro revuelto y su hermosa piel de porcelana con pequeñas marcas rojas causadas por las mordidas, para los ojos de Missa era jodidamente perfecto.  ¿Como habían llegado a esa situación?

Bueno retrocedamos un poco...

     ୭ৎ  ࣪ ׅ  핫

— Ya rubius, suéltame tienes que ir a minar —

— Pero patooo — alargó la “o” en forma de protesta.

— Nada de peros, tienes que ir porque si no ¿Quién me va a mantener? —

Soltando un suspiro el híbrido oso finalmente se resignó, a este le había tocado salir a minar con Spreen y Shadoune y no se quería despegar de su novio después de todo el clima era templado como para quedarse abrazado con su patito, cuando se alejó de esto le dio un beso en los labios el cual el azabache acepto con muchos gusto poniendo sus brazos alrededor de su cuello y el oso posó sus manos en la diminuta cintura de el contrario.

Quedando un largo rato besándose, Rubius mordió el labio inferior de Quackity haciendo que soltara un jadeos y abriera un poco sus labios para poder meter su lengua en la boca de este, su mano fue recorriendo de su cintura hasta llegar a la orilla de su abrigo y meterla en aquella prenda mientras que el híbrido pato acariciaba su cuello y enrollaba algunos cabellos castaños entre sus dedos, lentamente el mayor lo dejo sobre la cama separándose de sus labios para dirigirse a su cuello, dejando un rastro de chupetones y pequeñas mordidas, Quackity solo se limitaba a gemir en voz baja dejándose hacer.

Un carraspeó hizo que inmediatamente se separaran, ahí se encontraba Spreen en la puerta con los brazos cruzados.

— Espero que se hayan divertido, capo, tenemos que irnos ya —

Retomando su camino se alejo dejando ver al chico con máscara de su nariz hacia arriba de esqueleto, este se encontraba serio y simplemente siguió a el chico que anteriormente se había ido.

Quackity sintió un escalofrío, a pesar de tener la máscara es como si lo hubiera mirado atraves de esta, una pequeña idea se le vino a la mente después de ver eso, una pequeña idea que la haría cuando quedarán solos.

— Bueno patito, nos acaban de tirar el momento, nos vemos en la noche, Chiqui —

— nos vemos — solamente soltó resiviendo un beso en la frente para luego estar solo en aquella habitación, en unos segundos se encontraba mirando la ventana visualizando como los tres chicos se alejaban de la casa.

Finalmente era el momento de divertirse un rato, se acostó sobre la cama y alzó un poco sus shorts y su abrigo azul, sabía que a Missa no le gustaba estar solo y de seguro en unos momentos subiría para estar con él y así como lo predijo escucho unos pasos subiendo las escaleras.