Sasuke x Naruto ~ SasuNaru ~

El Doncel Del Mafioso I

Sasuke respiraba entrecortado mientras era encadenado a la parte trasera de una camioneta azúl. El homofóbico de su padre descubrió que estaba embarazado y en castigo decidió venderlo como esclavo.

Ahora se encontraba dentro de una camioneta sucia con sus brazos encadenados a uno de los barrotes con una cinta plateada tapandole la boca.

Estaba siendo conducido a un desconocido lugar y aquellos a los que ahora pertenecía no tenían piedad alguna, ni siquiera sabiendo que estaba embarazado de un mes y medio.

Los donceles eran muy raros en ese mundo, los escasos que existían eran codiciados por los hombres. Y más raro aún eran los donceles gay ya que en su mayoría eran hetero.

Encima un doncel embarazado era el broche de oro para la mayoría de los millonarios hombres de todas las edades.

Por eso la agencia que lo hubo comprado era conciente de la cantidad de plata que haría con Sasuke y su futuro bebé.

Al tratarse de donceles todos los codiciaban, por tal motivo eran protegidos por sus familiares y parejas.

Por tal razón los dueños de la agencia aún no podían creer que un doncel haya sido vendido a ellos como esclavo. Menos aún estando embarazado.

Y tratándose de un Uchiha, perteneciente a la aristocracia aquello era más asombroso aún. Por eso se sercioraron de que todo estuviese en regla.

Ahora en la camioneta Sasuke era conducido a un sitio bastante alejado de todo, donde permanecería encerrado hasta haber sido vendido.

El emo no pudo escapar aunque lo hubo intentado al saber que su familia había tomado la decisión de venderlo como esclavo.

Ahora solo podía pensar Naruto, el padre de su hijo que estaba formándose en su interior.

Naruto, por favor....buscame mi amor. Buscanos. Naruto...

Solo le quedaba confiar en su amado rubio y no perder las esperanzas. Podía sentir a su bebe llorar en su vientre ya que sentía lo mismo que él.

Intentaba soltarse de los grilletes pero le resultaba imposible. Cuando se detuvieron en una estación de servicio, empezó a patear la puerta de la camioneta con desesperación, mientras intentaba gritar pese a la cinta que le tapaba la boca. Lloraba a más no poder.

Pero nadie acudió en su ayuda, absolutamente nadie. Solo consiguió que uno de sus secuestradores lo golpee en el rostro ordenandole guardar silencio.

Sasuke se desesperaba al oír voces fuera y volvió a patear la puerta con fuerza. Pero otro de sus secuestradores lo sujetó de su negra cabellera arrojando su cabeza hacia atrás mientras le susurraba amenazante:

- Silencio jovencito o te inyectaré un veneno que matará exclusivamente a al niño que llevas dentro.

Al oír eso el terror se apoderó de su ser y empezó a temblar. Sasuke no quería que a su bebé le pase nada, no podría vivir si algo le llegase a suceder.

-¿Te quedó claro? - preguntó el hombre y Sasuke asintió con la cabeza - Estupendo, nos estamos entendiendo.

Lo soltó y bajó de la camioneta dejaba a un desolado Sasuke que tras cerrar sus ojos empezó a llorar desconsoladamente. Solo podía pensar en Naruto y suplicarle ayuda.

Se sentía tan derrotado y mal por haber sido un perfecto idiota. Naruto le propuso escapar juntos cuando se enteró que él esperaba a su hijito.

Pero Sasuke se negó a aceptar su propuesta por desear darles a su familia una oportunidad más. Es que en verdad había creído que cambiarían de opinión sobre su tendencia al saber que serían abuelos.