Recuerdos

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Pov'Leah

Mis pensamientos estaban revolucionados,  mi mente no paraba de hacerme recordar el pasado, cada palabra, cada golpe, cada humillación y sin pensarlo volví a trasladarme a ese tiempo, esa Navidad de hace ocho años.

》♡《

-papi, ¡ha nevado!- una niña de diez años bajaba las escaleras de la gran casa con sus patines en la mano.

-¿quieres salir cielo?

-¡mami!- la niña abrazó entusiasmada a su madre- ¿ya estas mejor?

-perfectamente- la mujer sonrió como pudo y la niña asintió.

-vamos al lago mami, puedo enseñarte los giros que Marga me ha enseñado- La pequeña Leah tiraba de la mano de su madre mientras se acercaban a la puerta.

-no hay prisa princesa, el lago no se irá

-¿no?- la morena puso una cara rara y asintió- pero vamos ya.

-esta bien, y luego por la noche hacemos unas pizzas y galletas y vemos Rapunzel.

-¡si!

Madre e hija pasaron el día en el lago, hacia un montón que Leah no lo pasaba tan bien y con la mejor compañía.
Al llegar por la noche a su casa Leah se sentó en el gran sofá esperando con ansia a su madre... pero nunca llegó.

-¿Mamá?- la niña confundida subió las escaleras hacia el cuarto de sus padres, escuchaba gritos por parte de su padre pero no podía distinguir lo que decía, un golpe...otro...- ¿Mamá?- cada paso que daba hacia que sus lágrimas salieran más rápido,estaba asustada,  la puerta estaba entreabierta y con un empujoncito la pequeña niña la abrió-¿papá?- vió la escena y tembló.

-Cariño vete de aquí- la mujer susurró como pudo.

-¡Mamá!

》♡《

Abrí los ojos alterada, estaba llorando, los recuerdos cada vez dolian más,  ¿cómo cambió todo tan derrepente?

Apoyé mi cuerpo en el respaldo de la cama de Nick y abracé mis piernas pegándolas a mi pecho. Intenté tranquilizarme pero cada vez costaba más respirar.
La puerta de la habitación se abrió y dejó ver a un Nick cansado.

-Noah ya duerme- anunció y se calló al mirarme- Cariño...

-yo...- las palabras no salían de mi boca,  solo pude regalarle un sollozo.

-no digas nada- se sentó a mi lado apresurado y me abrazó.

-No puedo más Nick, todo me supera- no me contestaba, se limitaba a acariciar mi pelo- las pesadillas han vuelto,  los recuerdos me atormentan, ya no tengo a dónde ir Nick, mi padre me echó,  él....

-Leah, escúchame, este es tu hogar y puedes quedarte el tiempo que haga falta, mi padre estara encantado contigo.

-Pero Noah...

-hablaré con ella, debe entender que eres de la familia al igual que ella.

-estoy maldita.

-no digas tonterías Leah- rió y me sacó una sonrisa- eso, sonrie Lele, estas preciosa cuando sonries.

-Gracias Nick- me separé más de él y volvimos a estar cara a cara, más cerca que la última vez.

-Nunca lo olvides amor, estoy y estaré siempre para ti, para evitar que caigas y que te hundas en un bucle.

-no sé que decirte...

-No digas nadas, haz lo que te diga el corazón- sus ojos tenían un brillo, un brillo especial, lo pude ver, no mentía, siempre estaría para mi.

El ambiente se volvió cálido,  nuestras respiraciones se entrelazaban, iba acercándome poco a poco a él,  su nariz rozaba la mía y cerré los ojos.

-esto no está bien Leister- susurré y él colocó una mano en mi mejilla.

-claro que lo está Jones, solo somos tú y yo, siempre lo hemos sido- esas palabras fueron lo que necesitaba para dejar todo miedo atrás y unir sus labios con los mios.

El beso era lento,  bonito y tierno, con su dedo pulgar acariciaba mi barbilla y parte de mi mejilla, llevé mis manos a su pelo y lo pegué más a mi, sus manos bajaron a mi pierna, la acariciaba de arriba a abajo y cuando pensaba que subiría más paró.

-¿Hice algo mal?

-claro que no Leah- hizo una pausa y ladeó la cabeza- no voy a hacerte nada hasta que ese miedo que veo en tus ojos no desaparezca.-Sonreí ante su contestación.- vamos a dormir, debes descansar.

-esta bien.

-estos días iré con Maddie, ¿te apetece venirte?

-me encantaría Nick pero...

-lo tomaré como un si- me interrumpió y se tumbó.

-Eres un idiota Leister- reí e imite su acción.

-descansa Leah- dejó un corto beso en mis labios y me pegó a él de nuevo.

Estar con Nick me hacía estar en paz, respiré su aroma y sonrei, siempre sabía como calmar mis tormentas, como hacer que mi corazón se derritiese ya sea por un roce, un beso...

Algo en mi me decía que era aquí donde debería permanecer, pero otra parte me decía que escapara antes de que me hiciesen daño.

Sea lo que sea que el destino quisiese para mi, sabia que mi vida estaba junto a él,  que nunca me decepcionaría, que siempre me pondría como su prioridad.

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Holaa, ¿Qué os ha parecido?

Siento deciros que en los próximos capítulos nuestra pequeña Leah sufrirá mucho:(

¿Noah y Leah serán amigas al final?

Votad y comentad me gusta saber vuestras opiniones:)

<3

Adicction// Nick Leister Y Leah JonesWhere stories live. Discover now