Capítulo 2

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Narra Harry:

Todos esos chicos parecían unos auténticos criminales y no voy a mentir pero sentía de todo menos comodidad y tranquilidad con ellos. No quería ni imaginarme por qué motivo estaban ahí. Podrían incluso ser asesinos. Había oído casos de chicos de mi edad que habían acabado en sitios como este por delitos tan horribles como matar a sus propios padres.

Miré a cada uno de ellos con un miedo dentro de mí que no podía evitar. No parecían gente de fiar y estaba acobardado aunque quisiese mantener la compostura delante de ellos y esconder el miedo que realmente sentía.

Mi hambre se fue esfumando a pesar de que después de unos minutos ya no era el centro de atención y estaban todos conversando animadamente de algo que yo no me estaba enterando, pues no estaba muy integrado en esa charla ya que no conocía a nadie.

Intenté comer. No podía estar sin comer nada después del día lleno de emociones que había tenido.

Pinché con el tenedor algunos trozos del filete de ternera que había en mi plato y fui comiéndomelo despacio a la par que bebía de mi vaso de agua para poder tragar sin atragantarme. Sin duda echaría de menos la comida de mi casa.

Era sorprendente toda la gente que había en ese lugar y la mayoría de ellos serían criminales seguro. ¿Cómo iba a mantenerme seguro en ese sitio?

Mi cabeza ya estaba cansada de pensar y me levanté de mi silla con aún muchísima comida en mi plato.

Louis y los demás chicos que había en la mesa me miraron extrañados y cuando tenia la intención de irme una mano sujetó mi brazo.

—Dónde vas...¿Cómo has dicho que te llamabas?—Me preguntó Louis frunciendo el ceño y yo quería soltarme de su agarre lo más rápido posible.
—Harry.
—¿Dónde vas Harry?
—A la habitación.
—Tienes que terminar de comer.—Dijo Isaac.—Van a comprobar si te has comido todo y nadie puede irse antes del postre.— Señaló con la cabeza a todos esos hombres que estaban cenando pero que a la vez nos vigilaban.

No podía seguir comiendo, me estaba doliendo la tripa entre los nervios y el miedo que tenía. Necesitaba huir de ahí y refugiarme en mi nueva habitación.

—Siéntate.—Me dijo Louis.

Dude por un momento e iba a sentarme ya rendido pero justo cuando iba a hacerlo, Niall cogió mi plato lleno de trozos del filete ya partidos que no me había comido y empezó a comerse el filete. ¿Qué tipo de favor me estaba haciendo?

—Niall, ¿Qué haces?—preguntó Louis con una expresión de enfado que hizo que me recorriese por el cuerpo un escalofrío.
—Cállate Louis, tengo mucha hambre y me han dado la bandeja con el filete más pequeño de todo el reformatorio.—Dijo sin dejar de comer y ese comentario me sacó una sonrisa.

No quería ilusionarme con hacer un amigo porque al fin y al cabo Niall era un delincuente como todos ellos pero me había salvado de un gran apuro.

—Joder estás siempre muerto de hambre no me jodas.—Dijo Isaac riendo.

Louis soltó mi brazo ya rendido y comenzó a discutir con Niall. Me di cuenta de que había gente que ya iba por el postre, incluso había sillas vacías, así que yo me fui para la habitación donde podía estar allí seguro sin nadie que me molestase.

Cuando llegué a la habitación arrimé la puerta lo más que pude para que nadie me viese, ya que me habían explicado que en las horas que nos dejaban las puertas abiertas no podíamos cerrarlas del todo para que pudiesen saber lo que hacíamos. Me tumbé en mi cama y observé todo porque la hora que había estado antes no me había fijado mucho en nada, solo en la pared que ponía el nombre del criminal con el que compartía habitación.

Rude & Sweet (Larry Stylinson) with wandisftshawnWhere stories live. Discover now