Capítulo IV

284 20 12
                                    


Órbita de Harvest

Sistema Epsilon Indi

UNSC Klaus

"Las defensas orbitales han sido activadas y las fuerzas terrestres han comenzado a movilizarse. El General Lee está organizando un despliegue masivo de tropas alrededor de los puntos clave de la colonia, señor", informó su primer oficial.

"¿Qué pasa con Utgard?", preguntó el Vicealmirante.

"La 5ª Brigada de Infantería del ejército ha sido desplegada, señor, y el 8º Regimiento del Cuerpo de Marines ha sido alertado. Se están apostando alrededor de la ciudad mientras hablamos. Además, el General Lee ha solicitado la intervención del 3º Batallón de los ODST para ayudar a asegurar la salida del cañón que lleva a la ciudad".

"Concédelo y llama a Johnson. Dile que tengo una misión para él".

La IA de la nave interrumpió.

"Creo que ya se está dirigiendo hacia el hangar, señor. Parece haber reunido un muy particular equipo para esta misión", dijo el pequeño holograma.

Siendo la incorporación más nueva dentro del UNSC KLAUS, y además de fabricación reciente, el Vicealmirante Mac Allister sospechó que esta nueva incorporación de su nave estaba demasiado inexperta para una misión como esta. Si bien no era correcto que un capitán y su IA formaran lazos, le era difícil no añorar las extremadamente capaces manos de su última IA.

Habiendo tomado la apariencia de una niña caucásica con un vestido blanco de una sola pieza del siglo XXI, reforzó la idea de su inexperiencia en la mente de Mac Allister, pero de nuevo, no había nada que él pudiera hacer al respecto, ya que las IAs decidían su apariencia por sí mismas.

"Adivinaré tiene pensado bajar con un grupo de cadetes", dijo burlonamente el Vicealmirante.

La pequeña IA simplemente asintió en respuesta.

"¿Y quiénes son ellos?", preguntó con la esperanza de que el legendario sargento hubiera reunido algunos buenos talentos.

"El Team Rabbit, señor", respondió expectante.

Esa noticia cayó como un balde de agua fría para Mac Allister.

"Mierda", exclamó.

"Ahora sí que lo hiciste Johnson, maldito loco suicida", suspiró el Vicealmirante con frustración.

"¿Señor?", preguntó su primer oficial.

"No es nada, Morales", respondió, mientras se quedaba mirando el absoluto vacío durante un momento. ¿En qué demonios estaba pensando Johnson al llevar a algunos de los peores cadetes de la historia de la academia para apoyarlo en sus operaciones en tierra?

Pero estamos hablando de Johnson, él nunca pondría en riesgo a esos chicos sin una buena razón. Lo único que se me ocurre es que realmente considere que puedan ayudar a conseguir la victoria. ¿Por qué demonios estoy pensando tanto en esto?

Fe. Al final, todo se reduce a una cuestión de fe. Si confío lo suficiente en Johnson o no. Es una maldición el hecho de que las decisiones más importantes se reduzcan siempre a una cuestión de fe.

Algún día depender tanto de nuestra suerte terminará por matarnos a todos.

-Nosotros creamos nuestra propia suerte- recordé lo que dijo aquel Spartan.

Terminará matándonos, eso es un hecho... pero hoy no.

"Comunicación quiero una línea directa con el sargento mayor Johnson", ordenó el vicealmirante.

Seek the LightWhere stories live. Discover now