•Epílogo•

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NANON

Estoy mirando el pan en la cocina, porque tengo hambre, pero ya he decidido no comer hasta que vuelva Ohm.

Es que estoy triste sin razón.

Mi lobo se siente mal, creo que necesita de Ohm.

Es... extraño.

—Esperaremos a que regrese tu papá —digo mirando a mi barriguita.

Es que ha estado sonando.

Aunque aún me faltan los meses difíciles, ya he aprendido mucho con Bea, y no estoy preocupado porque Ohm siempre ha sido de ayuda.

Fingía estar desinteresado, pero nunca me dejó solo con ella.

Él ama mucho al bebé que viene y todos acá saben que es un gran papá.

Volteo a la puerta, al oír a la gente moviéndose, con los pasos apresurados.

Me acerco al pasillo, cuando escucho la voz de Drake.

—¿Y Ohm? —le pregunto al verlo y él baja el teléfono que tenía en la oreja.

Su respiración es irregular, y ya casi anocheció.

—Lo siento, Nanon.

No entiendo a qué se refiere, pero cierro la boca, porque Bea sale de su habitación y corre al verlo, sonriendo.

Drake la carga, pero él no luce feliz como siempre que la tiene cerca.

—Hola, princesa —dice acomodándole el cabello y ella se apoya en su hombro, cerrando los ojos.

—Drake —digo de nuevo y él me mira.

—La llevaré de vuelta, no será una noche tranquila.

Miro al resto de Alfas acomodándose en el patio, pero no logro entender lo que murmuran.

Nunca había visto tanto movimiento acá.

Salgo al balcón y Drake se para a mi lado, soltando un suspiro.

—La puse en la cama, no puedo jugar con ella ahora.

—¿Qué pasó? —le pregunto volteando a verlo y noto en sus ojos lo que siente.

Lástima.

¿Lástima por mí?

—Él mato a Dew.

—Yo lo sabía, él no sabe conversar —digo ya ansioso— se está metiendo en problemas con la organización de ese chico, ¿verdad?

—Ohm murió también, Nanon.

Quisiera que esté sonando como una broma.

Yo no reacciono, solo... siento mis lágrimas cayendo ya, como si todo lo demás se hubiera pausado.

—No creo que tengamos problemas, fue una pelea personal, ambos están muertos, no creo que haya más que una conversación larga entre sus padres.

No le respondo, porque no me siento capaz de abrir la boca sin quebrarme.

—Estás seguro, Bea lo está también, sé que vas a necesitar tiempo para procesar esto, pero Ohm...

Ya no estoy escuchando.

Me apoyo en la pared y el llanto atrapado en mi garganta se escapa.

Drake se acerca y está intentando apoyarme, pero no va a funcionar.

Sabía que no debía ir.


🌻

FIN
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Holi, muchas gracias por leer, votar y comentar en esta historia, me hace mucha ilusión sisi. ❤️

Si quieren leer un extra, lo encuentran en Our skyy. ❤️

Débil [Ohmnanon]Where stories live. Discover now