Capítulo 1 [Tlalocan]

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Dando una vista impresionante de la ciudad de Tenochtitlan en la cual se observaba la entrada del templo mayor donde el dios Huitzilopochtli acababa de regresar junto con Axolotl de una visita en San Luis Potosí donde vivía Ehécatl y que aún cuidaba los restos del espejo de Tezcatlipoca en un lugar seguro.

Huitzilopochtli
- Al fin en mi templo

Axotl
- Bueno, al menos ya llegamos a Tenochtitlan

Huitzilopochtli
- Ya quería estar en mi templo

Axolotl
- Habla por ti, quiero ir a relajarme al mi lago

Huitzilopochtli
- Bueno, deberás cumplir con algunas cosas primero

Axolotl con una risa sarcástica:
- No lo creo, tengo que ir con mis fieles súbditos

Huitzilopochtli riendo
- Los Ajolotes no son tus súbditos

Axolotl
- Claro que lo son, me obedecen y yo los cuido algo así como lo que tu haces pero con más estilo y sin sacrificios

Huitzilopochtli
- No necesito estilo y sabes que los sacrificios si son necesarios, tengo que ser como Quetzalcoatl, fue un gran dios y...

Axolotl lo interrumpe:
- Ahí vas de nuevo, vamos Huitzil, sabes lo que tienes que hacer, no necesitas...

De pronto la conversación era interrumpida por un sonido muy estruendoso, se escuchaban fuertes rayos, parecía que se acercaba una gran tormenta, el cielo comenzó a nublarse oscureciendo la ciudad de Tenochtitlan.
Ambos miraban el cielo nublado.

Axolotl
- ¿Ya es época de lluvia?

Huitzilopochtli
- Tlaloc no mencionó nada al respecto

Axolotl
- Pues parece enojado, yo creo que le hace falta ver a su esposa (En tono sarcástico)

Huitzilopochtli
- Esto no es normal, algo está pasando

Axolotl
- ¿Y porque no sólo le preguntas?

Huitzilopochtli camino hacia su sala en el templo donde se encontraba Teuctlamacazqui (sacerdote rey) que era el encargado del templo mayor quien le informó que la ciudad estaba siendo atormentada por fuertes lluvias desde hace algunos días.

Huitzilopochtli
- Debo subir a ver que sucede en Tlalocan

Axolotl
- Que te vaya bien

Huitzilopochtli
- ¿No vienes?

Axolotl
- Olvídalo, la última vez que fui casi se inunda Tenochtitlan

Huitzilopochtli
- Nadie te dijo que te transformaras en Tlaloque

Axolotl
- Nadie me dijo que esos jarrones eran los que producían la lluvia

Huitzilopochtli riendo:
- ¿Recuerdas la cara de Tlaloc?

Axolotl
- ¡Si! Sobre todo el de su esposa, lo bueno fue que ella calmo la tormenta, además éramos niños no nos podían juzgar

Huitzilopochtli
-Lo bueno que Quetzalcoatl estaba ahí

Axolotl
- ¡Si! Si no hubiéramos acabado en el reino de tlaloc para siempre

Dioses al Mictlán "El secreto del Zip" Donde viven las historias. Descúbrelo ahora