"Eres Mía" / "¿Te quedarás conmigo?"

Capitulo 11

Gladius: Debo admitir que no lo hubiera creído, hasta que vi a Telxínoe con mis propios ojos días después. -lo miró a los ojos- Era realmente hermosa, como si me hubiera perdido...

Fred: ...En un sueño. -sonrió al imaginarlo-

Gladius: Siii, unos 4 días después de que nuestros tripulantes despertaran y dijeran las mísmas "locuras", Telxínoe trajo a Maite de regreso con nosótros. Ya que ámbas habian llegado a un acuerdo.

Fred: U-un momento, ¿Maite llegó a un acuerdo con las criaturas del mar?

Gladius: Si, aunque fue algo bastante sencillo, a cámbio de devolvernos a Maite, mi madre debia jurar que ninguno de nuestros barcos volvería a pezcar en sus aguas. Algo que mi madre aceptó con tal de tener a Maite de regreso.

Fred: ¿Y cómo sellaron ese pácto? Porque supongo que las sirenas no firmaron un simple papel.

Gladius: En eso tienes razón. Ellas hicieron un trato de sangre. -lo dijo restandole importáncia- Fue parecido a un matrimónio, pero que nunca se consumaría.

Fred: ¿Un matrimónio? -dijo sorprendido- ¿Eso significa que tu madre se "casó" con una sirena?

Gladius: No, no fue mi madre quién lo hizo. Las sirenas debian escoger...y Telxínoe escogio a Maite.

-Fred no dijo nada al respécto, ya que era mucho que asimilar-

《FLASH BACK》

-Hace 3 años atrás-

Telxínoe: Élla debera cumplir con nuestro trato.

Ervina: Nó. No dejaré que Maite selle el tráto.

Telxínoe: ¿Entonces no quieres la páz con nuestro pueblo?

-Todos se quedaron en completo siléncio-

Maite: N-no, no se refiere a éso. -lo dijo nerviosa-

Telxínoe: En ese caso que acépte nuestra propuesta.

Maite: Lo haré.

Ervina: ¿Qué? Claro que nó.

Maite: Princesa, si no acépta que haga esto ya no podra navegar por estas agua jamás.

-Ervina no dijo nada, ya que era ciérto, el navegar hasta conocer cada roca o superfície del mundo era su vida y la de sus hombres, no podria negarles eso solo por su capricho personal y aunque le partía el alma dejó que lo hiciera-

Ervina: Esta bién. Maite tiene mi bendición, aunque no deseo que lo haga, para sellar el trato.

-Al decir eso Telxínoe salió del agua para subir al barco y al hacerlo su cola de pez y sus escamas comenzaron a desaparecer para transformárse en piernas humanas-

Maite: Vaya, no sabia que podian hacer eso.

Telxínoe: Es nuestra forma para los que lo deséen puedan vivir en su mundo.

Ervina: ¿Hay gente de su pueblo entre los humanos? -lo preguntó intrigada-

Telxínoe: Si, solemos recorrer su mundo, nos gusta ver cuánto van avanzando con el tiémpo.

Ervina: Comprendo.

-Al llegar la noche Telxínoe y Maite se juntaron ante el cielo estrellado, ámbas cortaron levemente las palmas de la otra y juntaron sus manos, haciendo que la sangre de las 2 cayera sobre un cáliz con agua del mar-