Euphoria - ( omegaverse ) Sanegiyuu 💌?!

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Euphoria - capítulo 4

Ya había dado inicio a su incógnita sobre lo que pensarían de él los docentes, ayer ni siquiera un aviso del porque se fue tan repentinamente había dado, gracias a esto les generó muchas dudas y una que otra especulación, al entrar al área de profesores los escuchaba, balbuceos que salían de estos hablando de lo ocurrido la noche anterior. Su mirada se enfocó más en el piso que en donde caminaba, hasta que levantó la vista cruzándose con aquel alfa de ojos lilas, se puso aún más nervioso con su cara de cero expresiones y fue directo a su escrito a recostar su cabeza. Así un albino alfa de nombre Uzui se sentó frente a su escritorio, estos dos tenía una breve amistad.

— Hey Tomioka ¿qué pasa? — acarició la cabeza del azabache preguntando aquello y el solo levantó su mirada un poco. — ¿Es por lo de anoche? Descuida, seguro tuviste algo importante que hacer, eso es lo que creemos — Mortífero tras sonreír extravagantemente, su extravagancia nunca quedaba atrás, ya que era tan característica de aquel peligrisaseo tirando a blanco, levantó sutil con sus falanges la barbilla de giyuu poniendo un mechón de cabello del azabache detrás de su oreja, impredecible hecho en aquel mechón de hilos de cabellos negros hizo que un color rojo adornara sus facciones faciales. No muy lejos los veía aquel alfa de dominio que no pudo evitar enojarse al ver eso. Ni siquiera entendía el porqué se sentía tan enojado. Mientras un suspiro no notado salía de sus adentros aquellos dos, alfa y omega, seguían en conversación acerca de lo sucedido.

Tengue podía mostrarse atractivo y extravagante en ciertas ocasiones, pero cuando se preocupaba lo hacía de verdad, una que otra veces pude que sea en burla con tal de afanar a otros, pero en temas serios se mantenía cuerdo. ─ ya deja de fastidiar a Tomioka Uzui, esta más que claro que se fue anoche por su lema de "no soy igual a ustedes" cuanto me cabrea ─ Esta vez obanai había metido la pata, sus palabras fueron tan macabras que a pocos segundos que terminó las mejillas del morocho no perdieron tiempo en inflar se para que las lágrimas abundaban su rostro, cosa que hizo enojar al alfa Uzui y cierto alfa albino de cicatrices tantas.

Continuará.
Próximo cap de 700 palabras.