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Hansol golpeaba ligeramente la punta del lápiz contra la hoja de papel que reposaba sobre su propia butaca.
No lograba concentrarse como tal. Leía las preguntas del examen, pero su mente solo podría pensar en Wonwoo.
Bueno, eso no era inusual, pero está vez llegó a tal extremo que casi entrega la hoja de respuestas en blanco.
El día de ayer, Hansol tenía todo el día planeado, se forzó a hacer eso por culpa (o no realmente) de Seungkwan.
Se sentía nervioso, porque era el gran día, el día que por fin tomaría valentía y quería declararse, ilusionado de no recibir una respuesta negativa.
Aunque realmente no sabía como dirigirse hacía él.
Sentía que tenía las mejillas rojizas y puede que en ese momento Wonwoo estuviera externo a lo que le sucede, debido a que él estaba tan concentrado comiendo, mientras se quejaba de lo extremista que eran sus docentes al poner tantos proyectos junto con los exámenes finales.
Pero las cosas tomaron por otro rumbo cuando la madre de Wonwoo llamó repentinamente, ordenando que su primogénito regresará a casa y para terminar también este mismo estaba teniendo problemas con su equipo sobre algo que no entendió de un vídeo.
Hansol se molestó un poco, pero su futura suegra no iba a entrometerse en su declaración. Realmente había pensado en todo; así que gracias a Dios y escribió una carta, ya buscaría el momento para entregársela.
Tuvieron que recortar planes y Wonwoo le pedía disculpas junto con promesas que otro día saldrían a hacer todo lo que el menor quisiera.
Después de un helado rápido, tomaron rumbo hacía sus casas y entonces, cada quien ingresó a su casa después de que Hansol le dijera a Wonwoo que tenía que hacer unas cuantas cosas e iba a regresar más tarde.
Y lo prometido es deuda, pero esta vez sucedió algo diferente.
El castaño no tocó a su ventana más tarde, ni regresó a presentarse.
Pero el pelinegro solo logró encontrar un sobre junto a un pequeño ramo de cinco tulipanes siendo cuatro rojos y el que estaba justo en medio era un tulipán jaspeado.
Wonwoo sintió curiosidad, pero no tenía suficiente tiempo en ese momento, así que tuvo que dejarlo para después.
Tal vez esa sea la razón por la cual; en el presente Hansol está tan preocupado, Wonwoo no le había vuelto hablar durante dieciséis horas.
El fin de clases, era esta semana, Hansol no estaba tan apurado, pero si tenía sus pequeñas mañas.
Al finalizar sus clases, no esperó más, incluso dejó a Seungkwan con su despedida en la boca.
Buscaba algo desesperado; ir a la casa de Wonwoo.
Llegando a su casa, saludó rápidamente a su madre para irse corriendo a tirar su mochila.
Si Wonwoo no lo buscaba, él siempre lo buscaría aunque la relación se tornara incómoda.
Cuando Hansol decía que apreciaba a una persona, era de verdad. Siempre buscaría la forma de darle a conocer que siempre estará para esa persona.
Seungkwan y Chan lo confirman.
—¡Iré con Wonu, má!— gritó Hansol, después de acomodarse un poco el cabello, cual se despeinó al cambiarse tan bruscamente.
—¡¿No vas a comer?!— respondió su madre.
—¡No, más tarde vuelvo!
Y claro, la madre de Hansol se iba a oponer, pero ver a su hijo correr de la misma forma que entró sin siquiera escucharla; decidió dejar que su hijo fuera a la casa vecina.
Hansol debatió si tocar la puerta principal o simplemente ir a la ventana del pelinegro, recordó que él no le agradaba a la señora Jeon.
Y pensando lo bien, puede que eso impida su relación, pero eso no importa, tal vez Wonwoo no siente lo mismo por él.
Terminó por decidir y fue a la ventana del mayor, cuya se encontraba como siempre, abierta con la cortina abajo.
Entonces no tocó la ventana, simplemente se acercó y abrió la cortina, con intención de asomar casi la mitad de su cuerpo y con una sonrisa.
—Hey, Nonu.— dice mientras hace todo lo necesario para ver hacía el interior de la habitación, pero se encontró con diferentes rostros volteándolo a ver.
El piso estaba repleto de hojas, cartón, botes de pintura, tijeras y...¿ese chico tenía pintura amarrilla en el rostro?
Siente las mejillas sonrojarse al tener la atención de cinco individuos incluyendo la que él buscaba.
—¡Lo siento!, mal momento.— se disculpa, agachando un poco la cabeza para volver a acomodar la cortina y agacharse apenado, escondiéndose contra la pared.
¿Cómo no pensó que posiblemente él mayor estaba tan ocupado con sus proyectos como para prestarle atención?
—¡No! Hansol, necesitamos ayuda.— El castaño escuchó y al ver hacía la ventana, donde estaba Wonwoo con un pequeño puchero. —¿Nos puedes ayudar? otro par de manos nos ayudaría bastante.
[...]
Wonwoo se preocupó por presentar a todos con todos y seguido le encargó a Hansol recortar algunas cosas.
El castaño no entendió de que iba la maqueta, pero decidió ayudar en silencio aunque por dentro moría por preguntar por qué el tal llamado Mingyu tenía en la mejilla una mano pintada de amarrillo.
Pasó un rato, concentrado en su trabajo, forzándose a no salirse de la línea que ni se dio cuenta cuando Wonwoo salió de la habitación.
—Tss...niño.— alguien le susurró a un lado y no le quedó más que hacer que voltear, era el rubiesito de cabello medio largo. —Te llamas Hansol ¿verdad?
El castaño asintió y él chico le sonrío.
—No te asustes.— dice el más alto, hablando en tono bajo. —Pero debemos hablar de esto.— y Hansol no sabe como hizo para sacar de la nada un sobre.
El mismo sobre que contenía su declaración de amor.
Oh no.
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me tuve que rendir con esto 🏃🏻♀️
y la volví a cagar
siguesingustarmeperonimodo- tenía que actualizar pq ansiaba tanto el cumpleaños de Wonu para subir dos capítulos, pero sucedieron cosas, la vida de repente se pone en contra mía y no tengo nada listo y AAA chaO💀
