Otoño en tus ojos || Yeonbin

🍂Ropa de Pareja🍂

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—Oigan....levantense para comer.

—No queremos.

—¿Me veo con cara de que me importa? Solo levantense.

—Diez minutos más.

—No, ahora.

—¡Hyung un ratito más!

—Esta bien beommie, tu si. Pero Yeonjun no seas flojo y levantate.

—Hay privilegios con los que no estoy de acuerdo en este hogar.

Soobin río ante el comentario de su novio y simplemente atinó a darle un suave beso en sus labios susurrandole un «Buenos días Yeonnie» al oído haciendo sonreír como un bobo al pelinegro mayor. Yeonjun atinó a responderle de manera cariñosa mientras se dirigían a la cocina caminando a paso despacio para mimarse en el camino con palabras dulces y lindas que muy poco se decían a lo largo de lo que tenían en su relación .

—Soobin-ah, eres muy lindo—. Dijo el mayor sonriendo en el cuello del menor mientras depositaba besitos tiernos en ese lugar y el contrario solo sonreía negando con la cabeza.

—Eso no me hará cambiar de opinión, ven desayunemos—. Dijo el menor sonriendo ante los pequeños berrinches de su pareja y sirvió el desayuno para ambos mientras el pelinegro mayor a su lado tenía los labios en forma de un puchero viendo la comida disgustado.

—Vamos Yeonnie, yo se que tu quieres...—. Dijo el menor alentando a su novio a comer mientras este le miró mal y en ese preciso instante, acabo el momento tierno y dulce de ambos.

—En el menú no esta tu culo para desayunar,entonces no quiero nada.

—¡Choi Yeonjun!—. Gritó Soobin alarmado y dándole un pequeño golpe en la frente a su pareja mientras este soltó una carcajada sosteniendose el estómago por la repentina risa que le llego.

Luego de ese pequeño suceso, ambos se dedicaron a desayunar en paz y calma mientras se daban una que otra caricia en el proceso. Por lo menos, el mayor acariciaba de vez en cuando el muslo de su pareja y el contrario colocaba su mano encima de la de Yeonjun para que siguiera con ese acto tan tierno y tan gentil. En esos momentos era dónde ambos disfrutaban de sus pequeñas pero divertidas discuciones matutinas, de los regaños de Soobin hacía su pareja con sus chistes malos o algo pervertidos, y una que otra caricia con besos de por medio mientras seguían hablando de cosas triviales tan por la mañana.

—Soobin-ah, hoy no debes de tener clases—. Dijo el mayor luego de desayunar en el comedor con su pareja mientras ambos recogían y limpiaban lo que habían ensuciado esa mañana, solo dejandole el desayuno a Beomgyu en el microondas para cuando se despertase en unos momentos.

—Aparentemente no hyung—. Dijo el menor viendo en su teléfono como el clíma estaba tan horrible esa mañana, pues los asotaba una tormenta de nieve y así el menor no podría ir a su escuela aunque fuera su segundo día, no podía arriesgarse a salir de ese modo y pescar un resfriado de esa manera, no quería enfermarse en medió de clases. Mientras tanto ambos terminaban de arreglar las cosas y escuchar sobre como estaría el clíma en Seúl esos días, unos toques en la puerta irrumpieron su pequeña burbuja haciendolos extrañarse brevemente y verse pensando quien podría ser con esa tormenta de nieve arrasando la ciudad.

—Solo un loco sale con este frío—. Dijo Soobin riendo levemente ante la persona que en verdad tuvo que haber salido con ese frío y la tormenta arrasando. Por su parte, Yeonjun fue a abrir con una expresión confundida y mucho más al ver un tipo más alto que el, con un semblante serio pero que detinaba nervios y ropa holgada con una gorra y un abrigo enorme cubriendole encima.