Capítulo 11: Miedo toma el control

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—¿Y qué pasa si el miedo toma el control de todo? —pregunta Tim.

—Todas las decisiones de Riley van a estar condicionadas por el temor. Va a dudar, a la hora de hacer algo audaz lo va a pensar dos veces. Después ella se va a retraer más. Se va a volver más y más insegura.

—Riley, querida —dice el papá—. Tenemos que salir con mamá. ¿Te puedes quedar sola en casa por un momento?

—Sí, supongo —dice ella desde la cama.

—Si necesitas algo, me llamas al celular. ¿Ok?

—Ok.

Riley se queda oculta en la cama. Se siente amenazada por las sombras de los edificios del atardecer. Le asustan las manchas de la pared.

—¿Papá? ¿Mamá? —llama Riley desde la cama, sin obtener respuesta. Temerosa, abre la puerta de su habitación. El pasillo le parece más gris que nunca, el chirrido de las escaleras la aterra— ¿Mamá? —solloza Riley llegando a la cocina. Afuera está lloviendo a cántaros. Los relámpagos la paralizan.

—El verdadero problema—continúa Fobia—, es que, si el miedo toma el control de todo. And I mean, everything, Riley puede quedar simplemente paralizada. She can just panic. Incapaz de tomar decisiones o encontrar respuestas, ella simplemente se paraliza.

Miedo ya se ha convertido en una verdadera montaña de músculos. El resto de las emociones están agazapadas en un rincón del Control Central.

—¿Nosotros le dimos esa fuerza? ¿No tenemos forma de solucionarlo? —pregunta Tim desesperado.

—Oye, Alegría —dice Tristeza en voz baja—, creo que hay una forma de solucionarlo.

Alegría no tiene fuerzas para responder.

—Hay algo llamado Trauma —explica Tristeza—, lo leí en los manuales de la nueva consola. Es un botón para reiniciar la máquina.

—¿Trauma? —pregunta Olvido—. ¿Acaso no tiene efectos secundarios?

—Si activan el Trauma, pueden borrar la memoria de Riley —dice Fobia.

—¿Borraríamos toda su memoria? —dice Alegría alarmada.

—No —la serena Tristeza—, solo la de estos momentos. Luego todo volvería a la normalidad.

—Ella va a tener un agujero en la memoria —dice Fobia.

—No puedo permitir que eso pase —dice Tim.

—No a Riley —dice Alegría.

—No veo otra opción —se resigna Tristeza mirando a Miedo desde lejos.

—Tiene que haber otra salida —dice Tim—, porque, si oprimen ese botón, si le borran la memoria de estos momentos. Es a nosotros a los que van a borrar y vamos a desaparecer.

—Estamos a cientos de metros de la salida más cercana, bro, enterrados en la profundidad del subconsciente—dice Lapsus—. Llegar allá arriba es como trepar a la luna, digo trepar una duna.

—¿Qué dijiste? —exclama Tim emocionado.

—¿Duna?

—No, luna. Dijiste luna. ¡Lapsus, eres un genio!

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