Dicen que la bestia está por llegar. Si su alma gemela no aparece, ese aterrador animal se enloquecerá por completo. Él es un salvaje hombre dominante; un alfa.
Y no sé detendrá hasta encontrarla...
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Hace miles de años atrás:
Mi madre siempre me regañaba porque me escapaba de casa. Solía ser muy travieso cuando era niño, me escapaba al bosque a observar a las extrañas criaturas y animales merodeando en esa zona. A oscuras era mucho peor, por la noche se transformaba en un clima demasiado frío y la Luna se pintaba de color rojo.
Ese lugar era realmente misterioso y aterrador, pero a la vez increíble.
A mis 12 años de edad, por primera vez me encontré con una figura terriblemente escalofriante y demasiado grande. La diferencia de altura era realmente inexplicable.
En ese momento, estaba tan oscuro el bosque que casi no podía verlo fácilmente, sin embargo, apreciaba ver sus ojos color azules mirando fijamente los míos.
Un escalofriante frío había recorrido mi cuerpoen un segundo.
La Luna comenzó a pintarse cada vez más rojo y la cara de la criatura logró ser vista al fin; un lobo.
No era un lobo normal, sino uno gigante.
Mi corazón había comenzado a latir rápidamente, pensaba que se me iba a salir por la boca. Cuando el lobo terminó de examinarme, comenzó a caminar poco a poco hacia mí. Mi cuerpo empezó a temblar mientras retrocedía. Choqué contra un árbol y de un parpadeo, la criatura ya estaba verdaderamente cerca.
Había comenzado a sollozar, el miedo era realmente inexplicable. Mi respiración ya estaba agitada, sus ojos azules se empezaba a oscurecer a unos negros que cambiaba completamente su rostro; uno más aterrador aún. Mi terror aumentaba cada vez más.
Acercó su hocico y empezó a olfatearme. La respiración del gigantesco era tranquila pero a la vez fuerte, el silencio de la noche hacía que pudiera escuchar suavemente su corazón. Pero al cabo de unos segundos, sentí un dolor inmenso en el brazo que jamás había experimentado.
El lobo me había mordido.
Succionó mi brazo sin piedad, mi cuerpo comenzó a debilitarse más y más. Mi visión se tornaba borrosa y unas lagrimas se resbalaron por mis mejillas. Al instante, mi cuerpo cayó sobre el césped húmedo y lo último qué pude escuchar fue un aullido por parte del aquel monstruo.
***
Espero les haya gustado. Ya subiré el próximo capítulo, saludos ♡
