Capítulo 2

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Narra Taehyung

Años atrás: 2017

—El estúpid-do del señor Lee no sab-be de lo que habla —dije con la voz entre cortada mientras sorbía por la nariz, no había parado de llorar desde hace más de una hora y media

Me encontraba en la sala del departamento que compartía con Jungkook. Estaba sentado en el piso entre las piernas del ya nombrado, dándole la espalda, la cual se encontraba recargada contra su pecho mientras él me daba leves caricias en la cintura, intentando calmarme.

Desde que me recogió del bar él no había hablado tanto a comparación de mí, no he dejado de soltar veneno hacia los maestros que no aprecian mis creaciones. Siempre dicen los mismo, que no tengo el potencial ni la disciplina necesaria para ser un exitoso diseñador. Antes esas palabras no me lastimaban tanto, pero son ya tantas las veces que las he escuchado, que ya tienen cierto peso sobre mí.

Logran perjudicarme y crearme ciertas inseguridades que me hacen preguntarme ¿Si realmente puedo con eso?

Jungkook también se había quejado, un poco, junto a mí de lo pesado que estaba siendo su proyecto, los profesores los tenían muy presionados con sus trabajos finales para pasar el semestre. Estaba muy frustrado, y al igual que yo, se siente insuficiente para la carrera. Cree que la capacidad que tiene no es la necesaria para triunfar.

—Tienes razón, cariño —habló con voz ronca el pelinegro mientras posaba su barbilla sobre mi hombro— el señor Lee no sabe lo que dice, eres muy talentoso, dedicado, creativo y sobre todo, perfecto en tu carrera. No dejes que él, ni ningún otro estúpido menosprecie tu esfuerzo y dedicación

Jungkook no era la mejor persona dando ánimos, pero cuando lo necesitaba siempre buscaba las palabras correctas para hacerme sentir mejor, a pesar de que en el fondo él también estuviera al borde del llanto.

Las inseguridades no se van así como así por unas cuantas palabras de ánimo provenientes de una persona. La diferencia de esta situación es que no era cualquier persona la que me las decía. Era el amor de mi vida, esa persona que en tan poco tiempo se volvió la luz de mis ojos y en la esperanza de mi existencia.

Ahora estaba muy seguro de que él era con quién quería estar el resto de mi vida. El cariño que le tenía hace apenas unos meses había crecido, ya era aún más fuerte, más sólido, más duro, más inquebrantable.

—J-Jungkook —me tembló un poco la voz antes de alejar las manos del pelinegro de mi cintura, girar mi cuerpo y cruzar mis piernas para quedar frente a frente de él

Él alzó una ceja en espera de una respuesta por mi repentino movimiento.

—¿Te incomodaron mis caricias? Lo lamento mucho —dijo preocupado mientras sostenía mis manos y me miraba con esos ojos de bambi

Negué con la cabeza regalándole una sonrisa para que se tranquilizara.

Hace tiempo que vivíamos juntos en un departamento, el cual era compartido junto con otros amigos. Pero hace solo apenas 3 meses que vivimos solo los dos en uno propio. Es algo nuevo, admito que fue incómodo y raro al principio.

De hecho, hace poco comenzamos a llevar nuestro cariño a otorgarnos caricias mientras charlamos o nos besamos. Aún era nuevo, existen ocasiones en las que nos preocupa el no hacer las cosas bien o el llegar a incomodar al otro mientras intentamos mimarnos.

Es tierno que se asuste por haberme tocado y por haber pensado que me desagrada, cuando en realidad es todo lo contrario.

Como hace unas semanas que nos estábamos dando mimos en el sofá. Yo me encontraba sentado en su regazo, repartiendo unos cuantos besos por su cuello mientras él me sujetaba por la espalda. Me di cuenta al instante el cómo sus manos comenzaron a descender hasta llegar a mi trasero, fue una sorpresa, pero lo que me sorprendió aún más fue cuando sentí un leve apretón en ellas, debido a tal acción solté un brinco algo impactado por la sensación.

I Don't Love You Anymore [Kookv]Where stories live. Discover now