•Dormido•

309 20 13
                                    













































Era jueves y el viernes Spreen  y Carrera irían a una bresh, por lo que decidieron que uno se fuera a dormir a la casa del otro y luego ir directo a la fiesta. Siempre iban a dormir a casa del azabache, así que, esta vez fue en la del ojiverde.

Iván le había mandado varios mensajes a Rodrigo, ya que hace unos diez minutos que estaba tocando la puerta y nadie abría. Lo llamó un par de veces, hasta que por fin abrieron la puerta.

—por fin wacho, hace dos horas que estoy acá—se quejó el alto mientras entraba.

—perdón amigo, me colgué en tik tok y me quedé dormido— se le notaba la cara de recién levantado.

—bueno, que hacemos. Yo te aviso que tengo hambre— dijo riendo.

—dale loco, es casi la una y vos tenés hambre, no jodás— no tenía nada preparado para comer, se suponía que iban a dormir.

—bueno... puedo sobrevivir— sonrió —duermo dónde siempre?— Carre tenía una habitación preparada para él.

—si, cómo siempre— dijo cerrando sus ojos por el cansancio —vamos a dormir antes de que me desmaye— rieron ambos.

Cada uno, fue a su respectiva habitación y se durmieron, o al menos uno de ellos. A Iván se le estaba haciendo imposible dormir. Ver al bajo con en pelo revuelto y la voz más ronca, hizo a su cerebro fantasear en contra de su voluntad.

En su mente el castaño estaba tocandolo mientras susurraba en su oído, con aquella voz grave que escuchó hace unos minutos. Acariciaba su cuerpo imaginando que era la mano de Carre.

Por un lado, se sentía horrible por estar haciendo esto en una casa ajena y más por ser la persona con la que estaba fantaseando, pero por otro, se sentía increíble la adrenalina de saber que en cualquier momento entrara el mayor y lo viera así de necesitado alteraba su lado racional.

Su pene se erectó con las caricias y su entrada no tardó mucho en contraerse queriendo ser llenada. Su respiración era entrecortada, por lo que su pecho subía y bajaba rápidamente y transpiraba.

Se dio vuelta quedando boca abajo y subió sus caderas quedando en cuatro patas, todo debajo de la frazada y bajó sus pantalones junto con los bóxer dejándolos caer contra sus rodillas flexionadas.

La liberación que sintió lo hizo soltar un gemido que intentó callar pero es lo que menos pudo hacer. Sin importarle mucho, llevó su mano hacia abajo lentamente, siguiendo con el pensamiento de que esa era la mano de la persona que se encontraba en la otra habitación, hasta llegar a su pija. La tomó, subió y bajó un par de veces, para luego llevar su mano un poco más lejos y acariciar su entrada mientras mordía su labio para no gemir tan alto.

Con sus dedos sentía como se contraía, tentado a introducirlos y se rindió a la tentación bastante rápido. Metió sus dedos en su boca y los chupó imaginando que eran más que solo unos dedos, deseando que fuera otra cosa. Los lamió por un rato creando ruidos obscenos que cargaban el ambiente cada vez más y los introdujo en su entrada.

Aguantó la respiración sin darse cuenta en el momento que sintió los nudillos de tres de sus dedos contra ese apretado agujero. Le dolió, pero fue lo suficientemente bueno para que pudiera resistir aquel dolor. No perdió el tiempo y los llevó de adentro hacia fuera cómo si su vida dependiera de ello.

Se notaba como su respiración era cada vez más pesada, por lo que abrió su boca en busca de aire, no fue una buena idea. Los gemidos fluyeron fuera de su boca formando un escándalo pero a Iván no le importó, estaba segado en el intento de llegar a su orgasmo lo más rápido posible. Sentía que su pene daba tirones ya listo para correrse en cuestión de minutos.

Su entrada se apretó fuertemente contra sus dedos anunciando su orgasmo y unos segundos después, ese líquido blanco y espeso se volcó en sus pantalones y no en la cama, por suerte.

Intentó calmarse pero no podía y fue
aún más complicado cuando sintió alguien posarse arriba suyo —pensaste que estaba dormido?—
















































703 palabras.
























Parte dos?

















one-shots •spreenxcarrera• Where stories live. Discover now