2. Amor y demonios

28 2 3
                                    



Rin se quedó paralizada por varios segundos. ¿Había escuchado bien lo que le dijo Sesshomaru o le estaban jugando trucos sus oídos? Tal vez estaba demasiado cansada, o quizás seguía sobresaltada luego volverlo a ver de repente. Sin duda alguna, toda la situación era muy extraña. Buscó algún rastro de diversión detrás de la mirada de Sesshomaru que le indicara que solo estaba bromeando, pero no lo encontró, como era de esperarse. Sesshomaru jamás bromeaba.

"¿Señor Sesshomaru? ¿Por qué me está pidiendo eso?"

"Era de mi entendimiento que los seres humanos también comprendían el concepto del matrimonio. Tal vez me equivoqué."

"No, no. Creo que no me entendió," Rin tomó aire lentamente, intentando calmar sus nervios con toda esta conversación. "Me refiero a que no lo he visto en todos estos años, y lo primero que me dice al volvernos a ver es que... ¿Me case con usted?"

"Ya veo. Tal vez fue muy ambiguo de mi parte," Rin sonrió al pensar que él finalmente lo había comprendido. Pero por supuesto, lo que dijo después tiró esa noción a la basura de inmediato. "Necesito que te conviertas en mi mujer y que tengas a mi descendencia, a cambio de un compromiso de cuidar y protegerte por el resto de tu esperanza de vida humana. ¿Así queda más claro?"

Rin no pudo borrar la cara de estupefacción que se creó en su rostro. "Todo muy claro, sí, pero..."

"Perfecto. Entonces no perdamos más tiempo y vámonos," Sesshomaru intentó tomar su mano y halarla para que caminara tras él, pero Rin se la arrebató y negó con la cabeza repetidamente.

"Espere. No he dicho que accedí a nada."

"Pero dijiste que comprendiste mi propuesta."

"Comprenderla no es lo mismo que aceptarla," Rin sonrió con nerviosismo, intentando buscar las palabras más apropiadas para darle a entender al demonio su perspectiva sin ofenderlo. "Me alaga mucho su propuesta, Señor Sesshomaru, y me alegra mucho volver a verlo. Pero hay muchas cosas que tomar en cuenta antes de pensar en un matrimonio..."

"¿Cómo cuáles?" Preguntó Sesshomaru.

"Bien... Según la Anciana Kaede, es importante que un marido pueda cuidar y proteger de su mujer y su familia apropiadamente."

"Puedo garantizar eso."

"Sí, por supuesto... pero hay más. Según la señorita Sango, es importante que las dos personas se conozcan muy bien, tanto en sus cualidades como en sus defectos."

"¿Defectos?"

"¡No digo que tenga muchos defectos! Lo que quiero decir es que es importante tomar el tiempo de conocerse bien."

"Nosotros nos conocemos desde hace mucho tiempo."

"Pero eso fue cuando era una niña."

"No has cambiado mucho," Sesshomaru dijo, sin darse cuenta del golpe que acababa de darle al autoestima de Rin. "Sigues siendo más baja que yo."

"Además, la señorita Aome siempre dice que lo más importante es que haya amor..." Rin sintió sus mejillas sonrojarse al mencionar esto último, sintiéndose como una niña tonta por decirlo.

"¿Amor?" Sesshomaru sonaba perplejo ante esto. "¿A qué te refieres?"

"Pues... verá, para los humanos es importante que una pareja... Bueno, es decir, el amor es..." Rin de repente quedó igual de pasmada que Sesshomaru al darse cuenta de que no sabía cómo explicarle lo que era el amor a Sesshomaru, porque ella no estaba muy segura de lo que era tampoco.

"¡AMO BONITOOO! ¡ESPÉREMEEE!"  La inconfundible voz de Jaken, acompañando al mismísimo demonio sirviente de Sesshomaru, hicieron que Rin se salvara de tener que continuar con esta incómoda conversación por el momento. "¿Por qué me dejó de esa forma tan...? ¡Ay, pero si es Rin!"

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Jan 31 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

La Bella y El Demonio [Inuyasha] (SessRin)Where stories live. Discover now