Dos almas (Itanaru)

Capítulo 3

Naruto se levantó con molestia, vio a Itachi levantar su dedo, todo se volvió extraño -¿qué demonios?, ¿un genjutsu? -Itachi sonrió -no sólo con mis ojos puedo usar genjutsus Naruto -el rubio se cabreó, trató de explotar su chakra, el Uchiha caminó lentamente hacia el pequeño -eso no funcionará, mis genjutsus no son como los de Kakashi, para mí esos son un juego -el rubio se puso nervioso, nuevamente trató de explotar su chakra. Itachi comenzó a rodearlo lentamente como un cazador a su presa -dime, ¿cómo te tratan en la aldea?, ¿ya dejaste de ser el perdedor? -

Naruto apretó el ceño -cállate, eso a ti no te incumbe -el Uchiha se acercó más invadiendo su espacio personal, el Uzumaki abrió sus ojos con miedo -¿acaso te doy miedo? -sonrió con diversión el mayor -haces bien en temerme -el pequeño apretó el ceño cabreado, sintió las cabezas de sus amigos salir de su cuerpo -¿por qué no me ayudaste? -Sakura reclamaba.. -¿por qué eres tan patético? -Sasuke salió, comenzaba a reclamar -estoy muerto por tu culpa -un Gaara muerto hablaba -no cumpliste tu promesa inútil -nuevamente Sakura reclamaba; Naruto negó con desesperación escuchándolos -noooooooooo -trataba de salir del genjutsu.

Itachi lo veía con intensidad, el rubio se tomaba la cabeza y negaba con desesperación, no soportaba los gritos y sus palabras hirientes, abrió sus ojos con miedo sin poder moverse al ver al Uchiha justo frente a él, el mayor se acercó aún más, levantó su mano, con el dorso de esta acarició su mejilla -shhhhhhh calma, yo puedo ayudarte -el pequeño negó con lágrimas en los ojos -¿de qué demonios hablas?, hazlos que se callen, duelen sus palabras -Itachi bajó su dedo a sus labios, los tocó suavemente -no puedo hacer que callen, debes respirar hondo e ignorar sus gritos, sólo tu puedes hacer que callen-

Naruto respiraba entre su llanto tratando de calmarse, esas palabras lo atormentaban, comenzó a obedecer a Itachi sin saber porqué su mirada y sus palabras en ese momento tenían valor -eres un inútil, ni siquiera recuperarme puedes -Sasuke hablaba con odio -me juraste que regresarías a Sasuke-kun, no eres más que un mentiroso -la cabeza de Kakashi hizo a un lado la de Sakura -por eso mi preferido siempre fue Sasuke, eres idiota -sacudió su mente- el jinchuriki de Konoha es importante -el pequeño trataba de calmarse pero no podía -esas palabras vienen del fondo de tu corazón, son tus miedos más profundos, no te valoran lo suficiente pequeño -los azules levantaron su mirada viendo los onix frente a él, la mano del Uchiha acariciaba suavemente su rostro -¿por qué dejas que te afecten?, tu eres importante -el Uzumaki mordió sus labios escuchando sus palabras -eres valioso, no es la bestia lo que te hacer tú -las lágrimas comenzaron a parar en el rostro del menor, el pulgar de Itachi acarició sus suaves labios una vez más lentamente -si otouto se fue, fue su decisión, en cuyo caso es culpa mía, ¿no lo crees?-

Naruto apretó el ceño, era su amigo y por culpa de este sujeto -un amigo no te deja en un charco de sangre, un amigo no te hace jurar y atar tu vida a esa promesa, un sensei no tiene preferencias, debería tratar a todos por igual, la gente no debería llamarte jinchuriki cuando eres un humano, una persona que no se define por una bestia, eres inteligente, haz logrado mucho más que otros que te llaman inútil o estúpido, si el Kazekage murió, no era tu deber salvarlo, él debió ser más fuerte -el mayor lo vió con cuidado -¿eres patético por tener sueños y querer demostrar que vales?, los patéticos son ellos -

Naruto lo veía con cuidado escuchando cada palabra del sujeto frente a él -no eres un inútil, haz salvado muchas vidas, contando a esos idiotas que te llaman de esa forma, vales mucho más que todos y por eso te tratan de esa forma, son egoístas y envidiosos de lo que puedes llegar a ser, de lo que eres, de la libertad con la que hablas y expresas, de tu sonrisa; quieren detener tu crecimiento, quieren someterte a sus designios haciéndote creer que no tienes valor, cuando es todo lo contrario pequeño -

Naruto veía al Uchiha sin parpadear, lo sentía tan cerca, ¿acaso eran verdad sus palabras?, ¿acaso tenía razón?, ¿no era un inútil?, ¿era valioso? ¿lo envidiaban? -no tienes que complacer a todos esos cretinos, ¿acaso es tu obligación?, ¿acaso su palabra importa y rige tu vida?, ¿acaso serás un idiota o inútil sólo porque ellos lo dicen así?, no pequeño, hazte preguntas, ten dudas, la desconfianza es válida, la duda, el coraje, el odio, todos son sentimientos válidos, eres libre de tenerlos-

El pequeño abrió sus gemas enormes -te han hecho mucho daño y te han ocultado demasiado, aún así tienes un corazón puro y sigues confiando, piénsalo -las gemas se veían confundidas -piénsalo, ¿ya te olvidaste de aquellas dudas de tu infancia?, ¿quienes son mis padres?, ¿tengo familia?, ¿acaso olvidaste el deseo de saber tus orígenes? -el rubio apretó el ceño con duda, era verdad, olvidó que siempre quiso saber quiénes eran sus padres "los muertos, muertos están, debemos dejarlos en paz", no recordaba esas palabras de su jiji, ¿acaso él? -sé que ahora tienes dudas, pero no es difícil conseguir lo que deseas, la biblioteca es un amplio mar de información -

Itachi sonrió sensual, se acercó al pequeño invadiendo su espacio, sin dudar besó suavemente sus labios -Naruto abrió sus ojos con sorpresa, se aguadaron con miedo, pero le había encantado ese suave roce y esa sonrisa en el rostro del Uchiha -te buscaré pronto -el rubio salió del genjutsu, respiraba con dificultad -caíste en ese genjutsu, Kakashi sensei te dijo que no lo vieras a los ojos, demonios Naruto -el rubio apretó el ceño con molestia recordando las palabras del Uchiha, zafó sus manos del agarré de la chica con coraje -suéltame -la chica y kakashi lo vieron con sorpresa por su actitud a la defensiva, el pequeño corrió, con una odama rasengan en mano destruyó al Uchiha, Itachi sonrió antes de desaparecer, se dejó atacar para darle confianza al rubio, el equipo vió con sorpresa al pequeño quién tenía el ceño marcado, respiraba agitado lleno de dudas.