Cap 21: Rumores

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Y pensar que una mirada es más que suficiente para encerrar a una persona y acabar con su cordura, como lo has ello tú, Bayron Scott.

Me despierto por el ruido de la alarma, salgo de la cama y voy de camino al baño, después que hago mi rutina diaria camino a la cocina a desayunar junto a mis padres.

Ya estando en el primer piso la única persona que se encuentra ahí es mi madre, quien está deslumbrante cantando la canción que acostumbra, me siento en el comedor y espero a que se dé cuenta que ya no está sola.

__¡Buenos días cariño! --dice después que se voltea __¿Qué vas a querer para almorzar?

Miro hacía la cocina y puedo ver un sartén con tocino, así que decido pedir otra cosa para molestar. Se perfectamente que no preparará algo más simplemente porque yo se lo pida.

__Quiero huevos revueltos con un puré de patatas

Sonrío descaradamente a su dirección, mi madre pone una cara larga pero después me sonríe.

__Estoy preparando tocino y puré de papas --acaricia mis mejillas __Eso es lo que hay para almorzar

__¿Por qué preguntas que quiero si al final me vas a dar lo que ya tienes preparado? --interrogo rodando los ojos

__Es para que no digas que no te tomo en cuenta --camina a la cocina __Para que veas que si te quiero mucho, te he preparado lo que más felicidad te da

Sofía vuelve a mí con un capuchino, una gran sonrisa se forma en mi rostro cuando lo estaciona encima de la mesa.

__¡Ay Mami! Eres una reina

__Una de las ventajas que tengo al conocerte --me guiña el ojo __Es que te puedo sobornar siempre con lo mismo

__No pienso discutir eso Sofía ---empiezo a beber mi cafecito __Porque sabés que tienes razón en todo

Ella vuelve hacer lo suyo mientras me quedo observándole, después de unos minutos regresa con la comida preparada y se sienta junto a mí.

__¿Papá no va ha desayunar con nosotras? --pregunté mirando hacía los escalones, ya ha pasado varios minutos y él aún no muestra señales de vida

__Tú padre tuvo que irse temprano hoy --sonríe __Sólo seremos madre e hija esta vez

__¡Está bien para mí!

Ambas empezamos desayunar en silencio hasta que me mira a los ojos con esa mirada que conozco mejor que nadie, esa misma mirada que siempre tiene cuando quiere saber algo, así que decido preguntarle.

__¿Dime qué es esta vez? --la veo dudar así que insisto __¿Qué quieres preguntarme?

Lentamente suelta el tenedor y se torna de forma recta sobre la silla, acción que indica que es algo serio.

__¿Por qué tardaste tanto para decirme que tienes problemas con algunas compañeras?

Respiro profundo preparándome mentalmente para responder, hasta mucho se demoró en preguntar, me sorprende que no halla sido papá quien me preguntará aquello.

Bajo las garras de mí acosador Donde viven las historias. Descúbrelo ahora