LA VERDAD

CAPÍTULO 6

Pasaron los días aburridos como siempre, Li no se presentó al trabajo en este tiempo, aunque eso es lo de menos, por ahora tengo que concentrarme en mi trabajo.

Vestía mi traje negro, me acomodé mi corbata frente al espejo de mi oficina, me veía realmente bien, esta noche es la entrega; tocaron la puerta y contesté con un simple "adelante", era la señorita Sha.

- Señor Ao, - se inclinó hacia enfrente. – saldremos dentro de una hora. –

- Bien, - me giré para verla. – ¿preparó todo? – me miró con una cara inexpresiva.

- Claro que sí mi señor, todos tomaron la delantera y están esperando su llegada. – esta será una noche larga.

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Miraba las luces de la oscura ciudad a través de la ventana de la camioneta, era alrededor de media noche, nos dirigíamos al lugar acordado.

- Mi señor, - le di una calada a mi cigarro y lo miré por el retrovisor. – los refuerzos llegaron. – giré mi cabeza hacia atrás visualizando la línea de autos blindados que nos resguardaba.

- Bien. – fue lo único que contesté para sacar el humo por mis fosas nasales.

Después de un largo tiempo llegamos a la costa, la reunión es en un barco, siempre pide que sea en el mar; nos estacionamos, esperé a que el chofer me abriera la puerta y descendí en cunando lo hizo.

- Señor. – se inclinó.

Caminé mientras los demás me protegían de todos lados, subí por la escalera y quedé sobre la popa.

- Señor Ao, es un placer que llegara. - miré al dueño de esa molesta voz, me sonrió y alzó los brazos en ambos lados.

- Discutamos el asunto de una vez, – me adentré en el barco mirando alrededor. – veo que no has cambiado maldito bastardo. – tomé un estúpido peluche parecido a mí, lo tiré al suelo pisoteándolo.

- ¡¿Qué haces?! – me hizo a un lado tomando esa porquería. – no lo invité para que destruyera mis cosas. – se sentó en un sillón. – bien señor Ao, ¿tiene lo que le pedí? –

- Te deshiciste muy bien de "eso" sin dejar ningún rastro, – chasqueé los dedos, entraron dos hombres con una maleta y la dejaron sobre la mesa. – aquí está tu entrega, Sun Wukong. –

- Fue un placer. – se rio a carcajadas cuando abrió la maleta y vio su contenido. –

- Deja de reírte, escucha, - golpee la mesa. – necesito que investigues a alguien por mí, - inclinó su cabeza a un lado. – su nombre es Ne Zha Li. – todo quedó en silencio, pero desapareció en cuando comenzó nuevamente a carcajearse.

Esa noche fue larga ya que no me dejó ir sin antes contarme todas sus estupideces y burlarse de mí por, este tipo es impredecible, siempre haciendo lo que quiere cuando quiere, bueno, no es de sorprender el saber porque lo hace.

La primera vez que nos encontramos me sorprendió ver a este ser siendo tan despiadado con lo que le pedían, es un amigo de la familia así que se podría decir que soy cercano a él.

El primer trabajo que le pedí salió herido de gravedad, me consumió la irá en ese momento y acabé con los responsables, pero al siguiente día estaba como nuevo y bromeaba en cada momento de lo ocurrido, incluso se burlaba de mi actuar, pero ya no importa, trabaja para mí y puedo hacer lo que quiera con él.