[03] La entrevista

13 1 2
                                    


La alarma sonó, siete de la mañana con treinta y cinco minutos.

Con pesar apagué la alarma, removiendo en la cama sin querer levantarme al tener la cama tan suave y calentita, pero era hora de levantarse e iniciar el nuevo día. Una entrevista de trabajo, ¿Cómo tenía que presentarme?


—Hola, soy Kim Gabriel Ortiz... —No, no, no... era muy informal, carraspeé mi garganta e intenté de nuevo. —Buenos días, mi nombre es Kim Gabriel Ortiz, vengo a la entrevista de trabajo. —me miré al espejo intentando ordenar mi cabello nuevamente, ¿Estaría bien así? ¿Y si me preguntan el cargo? ¿Me verán muy sobrado? —¿Qué opinas Apolo? —le pregunté al cachorro que me miraba desde el marco de la puerta del baño mientras terminaba de arreglarme los últimos detalles, busqué algo de perfume y me puse un poco en la zona del cuello.


Tenía la habitación desordenada, tomé la toalla que ocupé para secarme después de la ducha y la dejé colgada en la parte del balcón del tendedero, rápidamente revisé la hora nuevamente, me había demorado solo treinta minutos en estar listo, tal vez eran los nervios que hicieron que me arreglara tan rápido. La empresa me quedaba a unos cuarenta y cinco minutos desde mi departamento, así que era hora de salir y tomar el transporte.

Esta vez me puse la sudadera que me tenían mis abuelos para un cumpleaños, color blanca por completo y con capucha. Era lo más formal que tenía, además de los jeans, no sabía cómo presentarme realmente, pero al menos olía bien y mi cabello no estaba rebelde.

Dejándole la comida y agua lista a Apolo en sus respectivos recipientes, con la puerta del balcón abierta, salí esperando que todo saliera bien.


—Mi niño, ¿A dónde vas tan guapo? —me detuve al escuchar la voz de la señora Ji quien me sonreía mientras dejaba de regar las plantas que estaban en la ventana del pasillo.


—U-una entrevista de trabajo... Tengo miedo la verdad, estoy bastante nervioso... —le sonreí tomando los puños de mis mangas intentando ocultar mis manos.


—Hijo mío, todo saldrá bien. Conseguirás ese empleo y serás el mejor. —me había tomado de las manos con cuidado, sentía las arrugas de sus manos y la calidez que me quería transmitir para que quedara más tranquilo.


Asentí contento y dándole las gracias me despedí de ella con una sonrisa y un pequeño abrazo. El camino estaba bastante despejado, la verdad es que si estaba teniendo suerte últimamente y no quería que esa suerte se fuera, necesitaba el empleo, cualquier empleo en realidad y con ello podría continuar, y continuar para mejor.

Pidiendo la parada al chofer del bus, bajé frente al gran edificio de DB Technology (Daseot Byeol Technology), la empresa más grande de tecnología de Corea del Sur y el mundo. El gran edificio de no sé cuántos pisos, pero definitivamente eran demasiados. Tomé valentía y sin que las personas bien vestidas de traje no me intimidaran, caminé hacia la puerta principal.


Tal vez era mala idea.


Tanta tecnología, tanta formalidad y yo un perro vagabundo. Me sentía como un cavernícola en medio de tecnología del futuro y robots con un toque de inteligencia artificial y autos voladores.

Me acerqué al mesón luego de tomar aire y finalmente me atreví.


—Buenos días... Soy.. —no me dejaron terminar mi frase, la chica del mesón estaba ocupada hablando por un teléfono seguramente coordinando algunas cosas. Me mantuve en silencio volviendo a repetir mis palabras en mi mente hasta que la señorita terminara de hablar.

Nothing Like UsTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang