Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
TOM KAULITZ 🚬 - Leipzig, Alemania
Al bajar de aquella sala, la música aumentaba, manteniendo alerta cada parte de mi. Sentí las miradas de algunas personas sobre mi, sobre todo la de las chicas.
—hey — escuchó a aaron a mi lado, volteo mi vista hacia el peli rubio que esta frente a mi el cual me hace una seña de observar atrás, al voltear, ruedo los ojos ante lo que veo.
Ella...
Mantengo mi vista en la rubia delante de mi, en medio de aquella pista, la cual movía sus cinturas a ritmo de la música, su pelo sobre salía por los lados de su cara.
Llevo una de sus manos a su cabello, y lo deslizó hacia atrás, viéndose totalmente sexy, su otra mano pasando descaradamente por todo su cuerpo, llegando a sus senos, los cuales se veían jodidamente deseable.
Acomode mi pantalón, el gran bulto en estos ya comenzaba a ser evidente, aún con mi mirada sobre ella camine hacia uno de los sillones y tome asiento en uno de estos, abrí mis piernas y coloque una de mis manos sobre esta.
Nuestras miradas se encontraron, noto como se tensaba, sonreí ladino ante su reacción, sabiendo lo que provocaba con tan solo una mirada, la rubia continuo moviéndose esta vez seduciendome, pude notar como se daba vuelta, dandondome una vista perfecta hacia sus nalgas, se veían malditamente bien, parecía un ángel malicioso, un ángel caído, a punto de caer a las manos de su dulce diablo.
Mi vista viajo hacia el rubio que se acercaba hacia ella, podía observar su sonrisa, podía identificar claramente la mirada de este, sus deseos carnales en los cuales mi rubia era su protagonista.
Mordí mi lengua, apartando mi mirada con furia de estos, intentado no sacar mi arma y dispararle a aquel y sacarle los dos ojos y que sufriera de la manera más fea y cruel posible. Me levante de aquel lugar tranquilamente, para dirigirme hacia la menor delante de mi, lacual permitia que aquel tomara de su cintura, me miraba con una sonrisa victoriosa, al sentir como aquel susurraba algo en sus oídos.
Separo a este de manera brusca de la rubia. — aléjate de mi rubia. — digo mientras muevo a esta hasta pegarla completamente a mi por su cintura.
El rubio estaba a punto de reclamar, cuando nota mi arma al costado de mis caderas y los dos lacayos a mi lado, observo como aquel camina lejos de nosotros, desapareciendo entre las personas.
