🔥CAPITULO 28🔥

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SIN EDITAR.
⚠️LLOREN⚠️

🤒<<Benjamin}>>🤒

Maicol: Llévate mi arma, pueden darle a algunos fantasmas.

Se ríe y salgo de la casa un poco asustado, entró en la casa y miro hacia todos lados, nunca había entrado y agradezco en serio nunca haberlo hecho.

Hay sangre seca, cintas policiales, ratas, mugre y mucho olor.

Subo las escaleras y voy pasando por las puertas mirando hacia adentro con el corazón latiendo fuertemente en mi pecho.

No encuentro nada más que ratas hasta que llegue al baño y siento como si mi corazón explotará.

Benjamin: ¡Chicos ayuda!

Grité con fuerza mientras corría dentro del baño.

La chica está en la bañera llena, el agua está de color rojo y su cabeza está hundida, la saco de debajo del agua y la agarro en brazos escuchando los pesados y apurados pasos subiendo por la escalera.

No sé qué hacer.

Sebastián: ¿¡Qué pasó!?

Benjamin: Sangre... sangre...

Es lo único que puedo decir viendo la bañera con el agua roja y sus brazos cortados.

Isaías: ¡Al carro, vamos!

Sebastián: Hay un celular.

Isaías: Tómalo, es seguro que es de ella.

Bajo corriendo con ella en brazos mojándome y llenándome de sangre.

Benjamin: Estaba debajo del agua.

Nos montamos en el carro y arrancamos hacia el hospital más cercano.

Maicol: Hermano, es Venus.

Isaías: Lose, lo note.

Sebastián: ¿Quién es Venus?

Maicol: Ella es la niña que vivía en esa casa.

Benjamin: ¡Apúrate que no tiene pulso!

No, no, no.

No se puede morir en mis brazos.

Llegamos al hospital y nos acercan una camilla dónde la pongo y entramos, le colocan algunas máquinas para escuchar sus latidos.

No tiene.

Le hacen rcp.

No consiguen pulso.

Maicol: No carajo, ¡háganlo con más fuerza!

La escena me parece surrealista, viéndola ahí con sus brazos fuera de la camilla goteando agua y sangre.

No se veía mal cuando la vi.

Incluso me regaló la sonrisa más hermosa que he visto alguna vez.

Doctora: Hora de la muerte...

Maicol: ¡No!

Empuja a la doctora y a las enfermeras y se monta sobre la camilla, empieza a hacerle rcp con fuerza.

Su pecho se hunde con cada presión de las manos de Maicol.

Sebastián: Déjala no lo estás consiguiendo.

Sigue sin importar que la doctora haya llamado a seguridad o que las enfermeras estén intentando sacarlo.

Maicol: No, ella sobrevivirá, yo lo sé.

Sigue ejerciendo presión hasta que un Bip seguido de otro y otro muy pausado y débil lo hace llorar de alivió.

Doctora: Salga señor para que podamos atenderla.

Él se baja y se la llevan ocultándola de nuestra vista.

Sebastián: Su celular suena con un contacto que se llama Papá Hunter.

Isaías: Atiende, puede ser que haya sido adoptada.

Benjamin: Pon el altavoz.

Atiende y coloca el altavoz.

📱Papá Hunter: ¡Hija! Joder niña llevamos buscándote mucho tiempo, ¿Dónde estás?

📱Sebastián: ¿Habla español?

No conocemos todas las palabras, aunque si lo hablamos, esas son las ventajas de ser estudiantes de intercambió.

📱Papá Hunter: ¿Quién eres y por qué tienes el teléfono de mi hija?

Se escucha mucho griterío en el fondo de la persona.

📱Sebastián: Lo encontramos en una casa abandonada.

📱Maicol: Encontramos a Venus casi muerta.

Justo en ese instante mucho ruido viene de la otra línea y la doctora se acerca a nosotros.

Nos acercamos ignorando la llamada.

Doctora: Perdió mucha sangre, logramos ponerla fuera de peligro y contactamos con el área de Psiquiatría, no descartamos que vuelva a intentar autolesionarse por lo que recomendamos ayuda psicológica.

Maicol: ¿Sobrevivió?

¿No escucho lo que dijo?

Doctora: Sí señor, usted la salvó, felicitaciones.

Cae al piso de culo.

Isaías: ¿Estás bien?

Maicol: La salve, pude salvarla está vez.

📱Papá Hunter: ¿¡Hola!? ¿¡Hola!? ¡Carajo hablen!

📱 Sebastián: Perdón, estábamos escuchando a la doctora.

📱Papá Hunter: ¿Cómo es eso de que se autolesiono?

📱Benjamin: La encontré en una bañera con los brazos cortados y el agua con sangre cubría su cabeza.

📱Papá Hunter: ¿Dónde está? ¿Está bien?

Le pasamos la ubicación e insulta cuando escucha que estamos en República Dominicana.

Sebastián: ¿Qué hacemos ahora?

Benjamin: Esperar a sus padres.

Maicol: Pude salvarla.

Sigue mirando la pared repitiendo una y otra vez lo mismo.

Isaías: Lo hiciste hermano.

Se tira al piso junto a Maicol y lo abraza.

Para ser de la milicia no parecen hombres tan fríos.

Me siento en la sala de espera cuando el peso de todo lo que vi llega a mí.

Mierda.

Encontré a una mujer casi muerta, se murió en mis brazos y revivió frente a mis ojos a manos de uno de mis mejores amigos.

Necesito que me tomen la presión, me siento muy mal.

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Sebastián

Benjamin

Isaías

Maicol

Venus. 10° Versión (Más es mejor)Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora