Anemia [TodoBaku]

Cap. 04: ¿Quién es el padre?

La impresión tan atroz permanecía en el rostro de Kirishima y Kaminari, mientras aún se encontraban en el suelo; procesar algo de tal magnitud no era tarea fácil para ese par, cuyo coeficiente intelectual... Eh, podría variar algunas veces.

Bakugo, por su parte, se hallaba recargado de la pared cerca de la puerta, cruzado de brazos y fulminando con la mirada a sus dos amigos. Agradecía que los calcetines en sus bocas hubieran servido para apaciguar el griterío, lo que menos necesitaba era a todo el piso despierto preguntando el porqué del escándalo.

Cerró los ojos, lleno de frustración, la ansiedad que le generaba el hecho de saberse en cinta era abominable, aunque sí había descendido gradualmente al soltarles dicho secreto a esos dos, no terminaba de desaparecer. Y es que no lo haría pronto. Estar embarazado no era nada sencillo de digerir, mucho menos en dichas circunstancias. Descubrir que era un doncel cuando claramente antes jamás hubieron indicios de serlo. Ni un rasgo, ni comportamientos, nada.

Katsuki suspiró, intentando dejar de sobre pensar. Lo hecho, hecho estaba, y por más que quisiera, no podía permitirse perder el control.

—¿Piensas tenerlo? —Kirishima preguntó, después de quitarse el calcetín de la boca, mirando fijamente a su mejor amigo.

—¿Tú qué crees, cucaracha? —respondió con ironía, dejando descansar sus brazos a cada lado de su cuerpo—. No soy un desgraciado sin corazón, jamás sería capaz de matar a alguien que no pidió ser procreado, y, aunque sé que esto me traerá muchos problemas, al final está creciendo dentro de mí. Tengo humanidad.

—Okay, okay, okay —asintió el pelirrojo—. Ya entendimos tu postura pro-vida.

—Pro-vida tu madre —dijo, mirándolo con desagrado—. Las feministas dicen que es su cuerpo, su decisión; okay, si es mi cuerpo, mi decisión es tener al escuincle, ¿ya?

—Yap.

—Y ti... de... qu... pad... —Kaminari intentó decirl algo, pero olvidó que todavía tenía los calcetines en su boca.

—Quítate eso del hocico, idiota —dijo Katsuki, acercándose a él y sacando de su cavidad las prendas.

—Me refiero a que... —comenzó a toser un poco—. Me refiero a que si tienes idea de quién es el padre.

—¿Mi padre? Él se llama Masashi —dijo el alias Red Riot.

—¡Tu padre no, estúpido! —Denki lo miró como si fuera un bicho raro—. ¡Hablo del padre del bicho que tiene Blasty en el estómago!

—Ah... —Kirishima comprendió—. Lo siento, je.

—Ah, sí serás bruto —bufó Katsuki.

—¿Pero sí sabes quién es el padre, o no? —volvió a picar el rubio eléctrico.

La habitación permaneció en silencio, con el pelirrojo y Denki mirando espectantes a su amigo con quirk explosivo. Bakugo no contestó.

—¡¿NO SABES QUIÉN ES EL PADRE?!