Capítulo 10

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El árbitro da el pitido que indica el comienzo del partido. El corazón parece que no me cabía dentro del pecho. El balón comienza a rodar. me lo Sandra me da un pase, controlo tranquila el balón y lo paso a la defensa. Movemos el balón de un lado a otro. El Borussia no parece ser muy bueno, porque aún no las hemos dejado tocar el balón. La primera oportunidad que tuvimos fue un pase que le di en profundidad a Sandra, que controló y tiró, pero acabó en las manos de la portera. Cuando los minutos pasaban, el corazón se iba relajando, ya me iba calmando. Para ser el primer partido de capitana, y con este equipo, no parece estar mal, y cada vez que tengo oportunidad, miro a la grada e intento buscar la mirada de Toni. Cuando la logro encontrar, gesticula con los labios "Lo estás haciendo genial", no puedo evitar sonreír. Tenerlo allí me daba seguridad. De repente, veo a Sandra en el suelo a 1 metro del área por el lado derecho, la contraria le había dado un codazo en la espalda al luchar por un balón aéreo. Fui corriendo a ver si estaba bien, y eso parecía.Cuando se levanta, se pone en zona de remate, ya que pitó falta. El entrenador me dijo que yo sería la que tiraría las faltas, debido a mi perfecta colocación y mi potencia de tiro. Me posicioné enfrente del balón pidiendo pasos al árbitro, y cuando este indica que las chicas de la barrera se vayan hacia atrás, empiezo a dar mis 5 pasos hacia atrás. Cuando estoy preparada, el árbitro me indica que tire la falta, y allí voy. Mis pies se dirigen despacio pero seguros hacia el balón, cuando estoy lo suficientemente cerca, coloco mi pie derecho de apoyo, y lanzo el balón potente con mi zurda. El balón supera fácilmente la barrera, y se dirige a la escuadra derecha. El balón va con la suficiente potencia como para pasar por encima de los guantes de la portera y acabar en el fondo de la red. Cuando el balón toca la red, la adrenalina empieza a subirme por el cuerpo. Sandra corre a por mí y se tira encima de mí, y seguida de ella, todo el equipo. Cuando me logro poner en pie, miro a la grada para buscar a Toni, y allí estaba, de pie celebrando el gol. Cuando su mirada se fija en mí, me señalo el dorsal, el 39, su número, y le señalo besando el escudo. El me dedica su hermosa sonrisa, y yo le devuelvo otra. La adrenalina sigue corriendo por mis venas. En cuanto me doy cuenta, el árbitro da el descanso, y el entrenador nos manda ir al vestuario. Antes de desaparecer por el túnel de vestuarios, vuelvo a mirar a la grada donde están Toni y Mario. Ambos hablan entretenidamente, hasta que Toni me mira. Un segundo antes de desaparecer por la carpa, le saco la lengua, la cual provoca una sonrisa en su rostro.

-Chicas, ya habéis visto, somos totalmente superiores, no tienen prácticamente nada. Solo tienen a la portera, que les ha salvado de unos cuantos goles. Laura, tremendo golazo, no esperaba menos de nuestra capitana – cuando dice eso, una sonrisa se dibuja en mí – bueno, ahora saldremos las mismas y les meteremos más goles, porque podemos, VAMOS CHICAS! – cuando acaba su última frase, todas lanzamos un grito y salimos con ganas de más al campo.

Cuando los dos equipos estamos bien posicionados, el árbitro da comienzo a la segunda parte, aunque esta vez sacan ellas. Cuando la delantera toca el balón, Sandra sale disparada con ganas de robar ese balón. No duraron más de 1 minuto con la posesión, ya que Sandra se lo robó cuando se lo pasaron a la defensa. Justo al robar, aprovechó y tiró, pero el balón acabó en las manos de la portera. La segunda parte transcurría más tranquila, sin presiones. Cuando me voy cuenta, me indican que tenemos un córner a favor y que tengo que ir a sacarlo. Me dirijo seria y dispuesta a sacar el córner. Coloco el balón con suavidad, y doy mis cincos pasos. Miro a Sandra, que me indica que coloque el balón en la zona en la que se encuentra, y yo asiento. El árbitro pita y yo lanzo el balón, que va en dirección a Sandra. Ella visualiza el balón, y cuando lo tiene a una buena altura, lo mete dentro de la portería con una perfecta bolea con su pierna derecha. Corro rápidamente hacia ella para celebrarlo, y la veo buscando en la grada a, como no, Mario. Cuando lo encuentra, se señala el dorsal, que tenía el número 19, el de Götze. Cuando acabamos de celebrar el gol, nos posicionamos y el equipo contrario saca de nuevo.

A partir del gol de Sandra, el partido siguió tranquilo, con alguna que otra oportunidad nuestra, pero que la guardameta impide que entre. Cuando noto que me iba a caer al suelo del cansancio, el árbitro da tres pitidos indicando el final del encuentro. Cuando suena el último pitido, todas las chicas vamos al medio del campo y nos abrazamos. Me siento muy a gusto, siento tranquilidad en mi

- Bendito fútbol - susurro.

Cuando acabamos de saludar a los aficionados, que parecían bastante contentos, nos fuimos al vestuario a ducharnos. Hubo una chica que llevó altavoces y no sé qué parecíamos, todas cantando desnudas; estábamos para vernos. Yo, como siempre, acabo la última. Yo soy siempre de las que está 1 hora en la ducha, y de las que se arruga como una pasa. Cuando salgo de la ducha, me encuentro todo el vestuario vacío, las otras ya habían acabado. Me vestí lentamente, tampoco es que tuviera prisa. Cuando salgo del vestuario me encuentro a Toni, de espaldas y apoyado en la pared. Me acerco lentamente por detrás y le tapo los ojos.

- Mmm... - piensa – huele a melocotón... - insinúa – Laura, sé que eres tú.

-Jo... - digo quitándole las manos de los ojos. El me agarra el mentón con su mano y me da un beso lento, pero dulce.

- Por cierto, vaya golazo  -me dice separándose de mí, pero su frente sigue pegada a la mía – pero me gustó más la celebración, cuando señalaste ese dorsal, besaste el escudo... cuando me señalaste... - cuanto termina esa frase, simplemente lo cayo con un beso.



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Qué os parece? os gusta? Si es así me encantaría que comentarais y que votarais.

Muchas gracias y nos vemos el sábado!

PD: no tardaré mucho en empezar a subir la nueva novela que tengo preparada :)

Más que un deporte [Toni Kroos]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora