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Empezaba el día fuerte, el famoso Tom kaulitz estaba sentado en una sala de espera, y se preguntarán ¿en una sala de espera? Si, del hospital.

A las 12 de la noche lo llamo Griselda, desesperada gritándole que había roto aguas y estaba camino al hospital, Tom que estaba medio dormido al escuchar la palabra "hospital" se levantado todo lo más rápido que pudo, se vistió corriendo y salió para el tan dicho hospital.

Se equivoco 2 veces de hospital, la ciudad era grande y había por lo menos 3 hospitales distribuidos por toda ella, fue a dos de ellos, tardando 2 horas hasta llegar al correcto, ahora mismo estaba en la sala de espera llevando una bolsa de bebé.
Le dijeron que aún no podía entrar por que justo ahora la estaban revisando, no podía hacer más que esperar.

— ¿Familia de Griselda Klein? —se le escucho a la enfermera que estaba de pie en la puerta.

— ¡Yo! Soy su novio —era mentira, no era su novio pero si el padre de su bebé.

— Bien pase por aquí, están las dos perfectamente, solo a dilatado 4 centímetros, hasta los diez no pueden llevarla a la sala de parto —le explicaba la enfermera, el chico asentia fingiendo que entendía todo cuando realmente no entendía nada, solo la seguía hasta la sala donde estaba Griselda.

Una vez en la puerta la enfermera le dio la señal de que podía entrar y así lo hizo Tom, miró a la chica tumbada en la camilla con un vestido de hospital, o así lo llamaba Tom.

— Hey Sel, hola...¿Cómo estás? —era primerizo en esto, no sabía que hacer, no sabía nada.

— Bien, con contracciones cada 5 minutos pero estoy bien —miro a Tom de arriba abajo, se notaba que estaba más nervioso que ella, y eso que el no daba a luz— Oye calmate, vienes temblando, tu no eres el que va a parir.

— Pues lo siento, pero voy a tener una hija y estoy muy nervioso —se sentó en la silla al lado de la camilla— al menos me alegro de que te lo tomes con más calma y estés bien.

Ella lo miro con una ceja alzada y sin decir nada se tumbó mejor en la camilla, estaba impaciente por dar a luz, no soportaba las contracciones.

— Entonces...¿que te dijeron los médicos? —empezó Tom a hablar— a mi me informaron de que estaba todo bien y que habías solo dilatado 4 centímetros, pero no entendí nada.

Griselda se río de eso, su risa era hermosa, miró a Tom negando con la cabeza y le empezó a explicar todo sobre un embarazo, el pobre saldría traumado.

Así pasaron el rato hasta que un doctor fue a revisarla de nuevo, ya pasaron 3 horas desde la última revisión, y ya había dilatado 10 centímetros, así que rápidamente la llevaron a la sala de parto.

El padre de la criatura estaba demasiado nervioso, le sudaban las manos y respiraba agitado, no quiso entrar a la sala de parto, se sentó en un banco, frente a la puerta, a esperar.

No mucho tiempo después el doctor salió con algunos papeles sobre la información de la niña, cabizbajo. Tom enseguida pensó que algo malo le había ocurrido a la niña, claro que eso le preocupaba más que nada, pero no fue así.

Cuando el doctor estuvo frente a frente con Tom le entrego los papeles.

— Señor kaulitz, lo sentimos mucho, no pudimos salvar a la madre, la niña está perfectamente bien y sana, está en la sala de niños —pauso unos segundos para suspirar— la señorita Griselda le puso de nombre ____.

Sin más se fue dejando a Tom solo, para darle su espacio por la noticia impactante.
Respiro profundo, analizando seriamente todo, ahora tenía una hija a la que cuidar, pero estaba solo en eso, se lo contaría a su hermano para que le ayudara al menos, pero ahora era padre y tenía que hacerse responsable, de su hija, de su pequeña y linda criturita.

[...]

Dos hombres miraban el cristal fijamente, al otro lado había muchos bebés, algunos con su ropita azul y otros con su ropita rosa.

Ellos dos miraban específicamente a una bebé con ropa rosita, que dormía plácidamente y en su muñeca tenía una pulsera con el nombre de ____.

— Es muy linda —Empezó el más alto de los dos.

— Parece un feto —la única respuesta que recibió del más alto fue un golpe en el hombro— ¡Oye! Solo digo la verdad, lo bebés recién nacidos no son lindos.

— Es tu hija bruto, se ve tan indefensa mientras duerme

— Ya...bueno, es un bebé, me dijeron que se quedara aquí unos días, ya que la madre murio la tienen que alimentar ellos —la miraba con nostalgia, amor y tristeza en sus ojos— Es muy pacífica a comparación del resto de bebés.

— Cómo se nota que no nació a ti —Se burló el otro.

— Tu eres el más ruidoso —le reclamo un poco molesto— además, su madre era muy calmada, seguro lo sacó de ella.

— Estoy seguro —miro al suelo por un momento y miro a su hermano gemelo— ¿Que vas a hacer ahora Tom? Tienes una hija y eso es mucha responsabilidad.

— ¿Crees que no se? Bill estoy consciente de eso, y ya intente buscar ayuda —nisiquiera era capaz de mirar a Bill, estaba muy nervioso y avergonzado a la vez por todo el acontecimiento— hace unos días, conocí a una chica.

Bill se molesto por eso, su hermano no tenía ni idea se esto, pero ¿de verdad iba a traer a una total desconocida a la vida de su bebé? Eso ya era pasarse.

— Tom, olvídalo, no le enseñes a tus novias que tienes una hija, se más maduro, y busca ayuda por tu cuenta, te ayudaré si lo necesitas, pero presentar a una mujer a esa pequeña criatura es mala idea.

Claro que Tom sabía que su hermano tenía razón, y eso haría, pero no admitiría que solo hizo eso por que su hermano se lo dijo, eso nunca.

— Esta bien

— ¿Ya la cargaste? —volvieron a mirar a la pequeña bebé.

— Aún no me la dieron, no tuve tiempo de pensar en eso después de la muerte de Griselda.

— Pobre Sel, tuvo que dejar a su pequeña niña con un demente —Tom al escuchar eso le pego suavemente mientras se reía y a Bill se le contagio la risa.

Los dos salieron de allí regresando a la sala de espera, tampoco iban a hacer mucho.

Pero una pequeña niña justo cuando se fueron abrió los ojos, sus ojos eran muy grandes y hermosos, no emitía sonido, pero se quedó allí, con los ojos bien abiertos observando su ambiente, como si lo estuviera analizando.


•Autora•

HOLAAA DE NUEVO PIPOLS, el segundo cap, me hacía ilusión meter ya a Bill la verdad, espero que les guste, y mil disculpas si hay faltas de ortografía, hasta aquí BYESSSS 🫶💕.

1160 palabras.

¿Mi Papá? || Tom kaulitz Where stories live. Discover now