Beautiful

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-hermoso-

▭ׅLee▭ֹ ♡ ▭ֹMinho▭

Otro día mas donde mi molesta alarma rechina en mi mesita de noche, odio las mañanas pero amo las noches.

Me levante calmado, no pasaba nada si me tardaba una clase entera en llegar.

Baje donde se encontraba mi pequeño hermano Jeongin correteando de mi madre para no completar su tarea, tierno.

-Buenos días cariño.-dijo la mujer que corría tras el niño.-deje tu desayuno en la mesa, leche con cereal de avena y café, como más te gusta.

Solté un ruido afirmativo y me adentro a la cocina donde efectivamente estaba una taza lista para ser llenada de agua y un tazón de leche con cereal.

Heche el agua que estaba en un termo y tome mis cosas para sentarme en el sofá.

Acomode mis cosas en la mesa de centro y sujete a Jeongin que aún corría de mi madre.

-Niño travieso, porque no le haces caso a mamá, ella también está cansada de correr por toda la casa.-el niño rio y asintió estirando sus brazos hacia Jeongyeon quien lo abrazl entre sonrisas.

-Mis niño, que alegría me da que no dejes de querer a tu hermano aun con tu rebeldía.-acomodo los libros del infante.-hoy vendrá Nayeon, espero no te moleste por no avisarte primero.

-Ugh, ya te dije que me da lo mismo con quien te metas en la cama, yo ni voy a estar hoy.-termine de raspar mi tazón y corrí a la cocina a dejar la loza sucia.-puedes traerla de cualquier forma cuando quieras, trata bien a Innie y eso me conforma.

Subi a mi habitación donde me esperaba uno de mis tres gatos jugando con mi... MI TAREA.

Aleje a Dori del papel mordido, por suerte solo se comió mi nombre, tendría que llevarle al veterinario mañana.

Heche al gato de mi cuarto junto con los otros dos que aparecieron de abajo de la cama, obvio sin antes darle mimos, tengo una rara obsesión por ellos.

Acomode mi uniforme en mi cuerpo, me conformaba el uniforme porque marcaba mi abdomen y el pantalón lo ajustaba junto con el bleiser.

Arregle mi mochila y baje en tranquilidad.

-¿Te vas ya cariño?-dijo Jeongyeon mientras cocinaba.-te dejaré una porción de comida en el refrigerador, Nayeon dijo que podíamos ir a su casa.

-Está bien, me gusta que te sientas libre de expresarte.-se acunclillo para abrazar la niño que caminaba con un chocolate en su mano en dirección a la cocinq.-ven acá Innie.

-¿Min se va?-. Abrazo torpemente del joven.-no quiero~.

-Volveré, lo prometo.-beso la frente transpira da de Jeongin y se levantó.-intentare llegar antes que se vayan.

Amo a Innie desde que nació, a pesar de que nos llevamos un par de años nunca nos separamos, tiene solo 7 años, pero es como un niño de cinco, precioso ¿no es así?

Seguí caminando por la calle, la escuela no quedaba a más de dos cuadras de mi casa así que en tres minutos ya estaba allí, las clases por supuesto empezaron pero me daba lo mismo.

Camine tranquilo por el pasillo hasta que vi un juguetes de color lila, parecía pertenecer a alguien.

Me acerque y lo recogí, revise el nombre, era de un chico de tercer grado, no sería difícil encontrarlo, supongo.

Camine escalera abajo donde se encontraba el salón, cuando llegue no había nadie, supuse que estarían en la clase de educación física ya que vi algunos en el jardín.

Me iba a alejar cuando escuché un chillido y entre preocupado y vi un joven hecho bolita llorando.

Me acerco y sin dudarlo le acaricie el pelo, era suavecito.

Oye.-separo las manos del castaño claro.-¿estas bien? ¿Nesesitas ayuda en algo?.-saco los lentes húmedos del menor sin dejar suelta una de las manos.

El levantó su cara húmeda y rojiza, era muy bello.

-¿A-a-ayuda?-arrebato los lentes que el contrario tenía en sus manos rápidamente.-¿p-porque n-no e-estas c-con t-tus a-amigos?-temblo un poquito haciéndose más pequeño en su lugar. 

Solté sus manos y vi como volvió a rascarlas, ya estaban blanquitas de tanto que rasco y suponía que de eso ya iba a salir sangre, intente tomar sus manos pero el las alejo y así mucho.

Seré alguien que odia a media escuela pero el me hacía quererlo, nunca lo vi, pero me parecía precioso, me acomode y lo abrace, tal vez sería la única forma que deje de rascar sus manitas.

Me quite rápidamente y vi como su carita mostraba confusión así que solo sonreí y saque el juguete que estaba en mi bolsillo.

-¿Perdiste tu esto?-mostró el juguete que llevaba buscando.

El miró con sus ojitos brillosos.

-¡Si~! Gracias Hyung.-seque mis lentes y los volví a poner en su lugar.-n-no sé como agradecerle.

Lo mire con comprensión.

-Me alegro de encontrarlo, entonces supongo que tu nombre es Jisung.-tomo la mano del más bajito nuevamente y comenzó a mirarla.-¿te parece si vienes conmigo?, ya va a ser el receso para desayunar.

El volvió a poner carita de confusión, se notaba no tener amigos.

-¿Porque debería ir con u-usted Hyung?-sonrio con inocencia.-muchos dicen que soy feo y raro, porque usted que es muy hermoso y popular q-quería estar c-conmigo.

¿Yo? ¿Hermoso? Nah, dime algo que no sepa.

Rei bajito y me levante.

-Quiero cuidarte, para que no vuelvas a estar así como antes, no te ves bien estando tan solo.

-Si usted lo dice, estoy bien Hyung.-se levante sacudiendo su ropa.-le agradezco po- ugh no~.

Lo mire asustado pensando que algo malo hice.

-¿Que es lo que te molesta?.-miró preocupado al castaño claro.

-Timbre.

Saque rápido mis auriculares que estaban en mi bolso y se los acomode.

-Así esta mejor ¿verdad?.-tomo la mochila de Jisung y la colgó al otro lado de su hombro antes de hacerme una señal para seguirlo.

Tal vez había sentido amor a primera vista, o mejor dicho, primera vez en mi vida enamorado.

mi novio es autista || minsung Donde viven las historias. Descúbrelo ahora