El castaño llegaba a casa algo agotado por el trabajo, que se había sentido particularmente pesado ese día.
Cris: -al llegar deja su mochila con sus cosas en el sofá y saca su teléfono donde mira un par de fotos en las redes- ... -este suspira y deja caer el móvil al suelo para caminar al baño, y al llegar abre la canilla dejando correr el agua para lavarse la cara y después mirar su reflejo- ... -se lleva una mano al pecho y siente su corazón latir con rapidez e intensidad- ...siempre me haces lo mismo, y hasta ahora no entiendo porque, si nunca tuve oportunidad, por qué? -Apoya ambas manos en el lavado de manos y aprieta el agarre y los dientes- Grr... RRAAH! -despues de ese grito golpea el espejo rompiendo el cristal causando que su mano quede con fragmentos clavados y sangrando, lágrimas brotan de sus ojos-
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Lo que siguió después no fue más que una patética demostración de enojo, desesperación y dolor descontrolados, ignorando las punzadas y la perdida de sangre en su mano, empezó a romper y tirar cuantas cosas hubiera en el lugar, no era ningún problema para nadie más que él, ya que vivía solo, al terminar se encontraba agotado en el suelo, con las luces apagadas, aún llorando.
Cris: ... -de a pocos se puso de rodillas usando su mano sana como apoyo, acercó la otra a su pecho y de él salió una luz- ...estoy harto de ti, de que me hagas sufrir... Te arranqué de mi antes, y puedo volver a hacerlo, la única diferencia es que nadie podrá obligarme a recuperarte -dijo con enojo a aquella luz-
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Luego de eso solo la dejó entrar de nuevo en su pecho para buscar unas pinzas y sacar cuidadosamente los pedazos de vidrio de su piel, usando un poco de magia cerró las heridas y luego salió a comprar algunas bolsas para residuos, pues luego haberse descargado le esperaba una larga noche de limpieza, agradeció a Dios que fuera fin de semana.
Cris: -en una pausa, de la heladera (de las pocas cosas que no tocó) sacó una lata de gaseosa y la abrió para beber un poco, sentado en un sillón rasgado y roto- Que fastidio
