Fika

Una sonrisa inrreemplazale

Una sonrisa sin precio
Que puede dejar al banco
En quiebra por lo valiosa Que eres para mí, en todo los aspecto románticos y tiernos de amar en el universo, llamado nuestro globo de la felicidad en dónde nadie puede interferir en está.

Eres y serás en todas
Mis noches un tesoro que
Cómo pirata desearé robar, siempre buscándote en las imágenes de esas misma noches, cuando deseo recordar de esas escenas descontroladas e íntimas como los secretos mejor guardados por estar solo entre nosotros.

Me hacías mucha
Falta como el profesional
De salud que sana y busca la mejor medicina para las heridas que sangran o angustian lo físico, que cubre alguna parte del cuerpo o la mente específica.

Heridas hechas
Y dejadas por otros
ajenos a nosotros, sin importar lo insoportable
que fuera me diste un beso en la frente como una amiga y promesa de algo más.

No eres el oxígeno
para mí sino, no hubiera
podido esperar tu regreso
tan inesperado, eres la tela llamada piel, la que me transmite diferentes texturas
que conforman el mundo, cual nos rodea y cambia como en todo en la vida.

Pero tu sonrisa
persiste pese al tiempo
pase, aún si el dónde detrás
tuyo sea diferente por cada segundo que traspasa, desde el alumbran y ensegesedor sol de la mañana, el gris funebre y tranquilo de las nubes de la tarde, el tono anaranjado del sol despidiéndose con su último aliento de su larga jornada y empieza el azulado hasta morado oscuro del trabajo de la luna y su espacio la noche.

Tus ojos me abren
la vista a distintas facetas
de ti, desde el miedo que te
obliga a tirarte al suelo, el terror  que te paraliza  tus extremidades y cuerdas vocales y la alegría total o entusiasmó que sueltas y contagias como el aire de un globo espichado.